Número: 301
- Lorenzo Córdova subrayó que hay muchos que desde aquí están queriendo construir un discurso creacionista de la democracia, indigno de una universidad fundada en el conocimiento científico
- La UNAM y el INE son aliados para construir una cultura política que permita que la democracia dé los más altos y esperados frutos del país: Leonardo Lomelí
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Nacional Electoral (INE), instalaron la Cátedra Extraordinaria ENCCÍVICA Francisco I. Madero, con el objetivo de analizar, fortalecer y promover un debate sobre el estado contemporáneo de la democracia en México y el mundo.
En la Torre de la Rectoría, el Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello subrayó que es desde la máxima casa de estudios del país, donde se defiende el conocimiento científico frente al dogma y la fe irracional, donde la democracia es y debe ser entendida como el resultado de una evolución histórica y no de una creación providencial.
“Hay muchos que desde aquí están queriendo construir un discurso creacionista indigno de una universidad fundada en el conocimiento científico y que por definición debe defender la lógica evolucionista de nuestra democracia. Hay quien desde aquí está pretendiendo construir una narrativa de que la democracia nació el primero de julio de 2018. Ojalá y el primero de julio haya nacido una nueva alternativa política, un nuevo gobierno que resuelva nuestros problemas”, estableció.
Ante el Secretario General de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas; la Consejera Claudia Zavala; la directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), Angélica Cuéllar, del profesor investigador Fernando Castañeda y del comité de académicos de la cátedra, el presidente del INE reconoció que la democracia pasa por momentos difíciles que muestran su fragilidad.
La pobreza, la desigualdad, la corrupción, la impunidad, la inseguridad y la violencia, son las promesas incumplidas de los gobiernos democráticamente electos, dijo, pero lo más grave en tiempos recientes es el debilitamiento de los más fundamentales compromisos y el respeto de las reglas de la vida democrática desde el poder mismo.
“Desde los espacios de representación a quienes la ciudadanía les ha encargado precisamente la protección y promoción de las reglas y las prácticas democráticas y de quienes, desde los gobiernos, son los responsables de crear e instrumentar las políticas públicas que permitan la solución de esos problemas, hoy todavía irresueltos” y puso como ejemplo Baja California, donde se constituyó hace 30 años como un laboratorio de democracia, hoy es un laboratorio en donde está ensayándose, el peor atropello a nuestra, todavía, joven y endeble democracia.
Por ello, Córdova Vianello subrayó la importancia de la Cátedra que busca reivindicar la dimensión de la democracia como el resultado de una larga evolución y una apuesta histórica, a través de conferencias, sesiones de discusión, cursos en línea y una plataforma digital con un amplio repositorio con las actividades de la misma.
La UNAM ratifica su vocación con impulsar la democracia y los valores democráticos del país, afirmó el Secretario General de la UNAM, Leonardo Lomelí. “La Universidad y el INE deben de ser aliados para construir una cultura política que permita que la democracia dé los más altos y esperados frutos del país. Construir un criterio de exigencia ciudadana que permita mejorar el desempeño de las instituciones y de sus gobernantes”.
Por ello, ponderó que un catedrático tan notable de la UNAM, como lo es Fernando Castañeda Sabido, sea el responsable de la Cátedra Francisco I. Madero.
“La salud de la democracia no sólo se mide con la calidad de los resultados electorales -que hoy sabemos, han mejorado al punto que México es un ejemplo a nivel mundial y el INE presta asistencia a otros países que quieren construir elecciones confiables-, sino por la calidad de la deliberación pública, representación, la discusión informada y la cultura cívica”, enfatizó.
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