VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DE LA CONSEJERA DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL, CARLA ASTRID HUMPHREY JORDAN, DURANTE LA INAUGURACIÓN DEL CURSO PARA CANDIDATAS ELECTORALES “GRISELDA ÁLVAREZ PONCE DE LEÓN”, ORGANIZADO POR LA COMISIÓN INTERAMERICANA DE MUJERES (CIM/OEA) Y LA ESCUELA DE GOBIERNO DE LA ORGANIZACIÓN DE LOS ESTADOS AMERICANOS (OEA), JUNTO CON EL INE
Gracias, buenas tardes a todas, a todas las que están aquí, a todas las que nos siguen, a todas nuestras candidatas.
Saludo, por supuesto, con mucho gusto a Alejandra Mora, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Interamericana de Mujeres, de la OEA.
También, a mi compañera Nadine Gasman, Presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres.
A María Fernanda Trigo, Directora del Departamento para la Gestión Pública Efectiva de la Secretaría de Asuntos Hemisféricos de la OEA.
Y, por supuesto, a Carmen Montón, Embajadora Observadora Permanente ante la misión de la Organización de los Estados Americanos.
Y, además, gracias por la participación, por la coordinación, por la sinergia por el apoyo a en este caso a mujeres mexicanas.
Sin duda es la segunda ocasión en la que se hace ya este curso, como ya lo mencionaron, pero creo que ahora es muy importante, sobre todo, porque hay cuestiones nuevas en México, nuevas en el proceso electoral y, particularmente, en lo que tiene que ver con los derechos de las mujeres.
Ya mencionábamos que tenemos la primera legislatura de la paridad y aquí se hace efectivo lo que han mencionado todas ustedes, estas ligas entre mujeres, redes entre mujeres, cómo cambian las decisiones, incluso legislativas, la agenda legislativa.
Tenemos ya la primera bancada de la paridad, como se le llama aquí, la primera legislatura de la paridad, 48.2 por ciento de diputadas, 49.2 por ciento de senadoras.
Estamos también ante un proceso por primera vez de reelección legislativa en la Cámara de Diputados y Diputadas. Pero creo que, además de esto, tiene dos resultados muy importantes aplicadas en este proceso electoral: En primer lugar, la aprobación de la reforma en 2019, de paridad total o paridad en todo, que hace un cambio muy importante respecto a la paridad que se incorporó a la Constitución en 2014, ya que aquella hablaba de paridad en las postulaciones, y esta habla de paridad en la conformación de todos los poderes del Estado, en todos los niveles de gobierno, en los órganos autónomos y, también, bajo sistemas normativos internos.
El segundo, es que por fin se pudo aprobar esta reforma a ocho distintas leyes para prevenir, atender, sancionar, reparar y erradicar la violencia política en razón de género.
Justamente mañana cumple un año de que fue publicada esta reforma en materia de violencia política, que es otra de las novedades del proceso y es muy importante que, además de todas las herramientas que las mujeres obtendrán en este curso, sepan cómo pueden defender sus derechos políticos y electorales y que tienen, además, primero el derecho a ocupar cualquier cargo público en nuestro país; y, segundo, a que tienen que contender en elecciones o en contextos libres de violencia.
Aquí hay distintas vías para denunciar la violencia política en razón de género, a que se han implementado cuestiones novedosas como una declaración que llamamos ”3 de 3 contra la violencia” por medio de la cual todas las personas que se postulen a un cargo de elección popular deben firmar bajo protesta de decir verdad que no han sido sancionados por violencia familiar, por violencia sexual o contra la intimidad corporal y que son personas deudoras alimentarias morosas, porque precisamente no queremos que este tipo desde un cargo público o escudados en el fuero sigan violentando mujeres.
También, que tenemos lineamientos para los partidos políticos, porque ellos también son obligados por la reforma a atender y prevenir y sancionar los casos de violencia política al interior de los propios partidos políticos, tienen obligación de sustanciar las quejas y denuncias que se presenten.
En este lineamiento también obligamos a que les otorguen una de las primeras formas en las que se violenta a las mujeres es que no se les da recursos públicos para sus campañas o no se les da acceso a radio y televisión, así que establecemos que al menos el 40 por ciento del financiamiento público debe ser destinado de manera obligatoria a las candidaturas de mujeres.
Y, por supuesto, y además me parece muy importante el nombre de este curso, de nuestra primera Gobernadora, hace ya 42 años, y de pues nuestra primera Gobernadora en Colima, a la fecha han sido electas solamente siete mujeres para gubernaturas y dos de manera interina, por lo cual también aprobamos este acuerdo que denominamos Paridad en Gubernaturas para impulsar que los partidos políticos, de manera obligatoria, hay elecciones para 15 gubernaturas, debieran postular al menos siete mujeres en estas gubernaturas.
Creo que además llegarán más mujeres, claramente por méritos propios, pero desde obviamente nuestra primera Gobernadora a la fecha han pasado muchos años, ha pasado mucho tiempo y, sin embargo, las opciones y la posibilidad de que las mujeres participen ha ido a cuentagotas, desde acciones afirmativas, hasta cuotas de género, hasta el principio de paridad y ahora el principio de paridad total.
Así que el nombre Griselda Álvarez Ponce de León, espero que sea además un nombre muy adecuado para que ahora podamos seguir garantizando la paridad en el Poder Legislativo, en este caso, en la integración, no solamente en postulaciones, porque también, hemos implementado el mayor número de acciones afirmativas en un proceso electoral, cinco en total, para personas con discapacidad, para personas afromexicanas, para personas de la diversidad sexual, para, esta es la segunda vez que se implementa, para personas pertenecientes a pueblos y comunidades indígenas y también para personas mexicanas residentes en el extranjero.
Así que el curso me parece muy importante, dotar a las mujeres de herramientas, tenemos una red de candidatas que se ha ido presentando en cada una de las entidades federativas, falta sólo una entidad federativa, justamente para hacer lo que hacen también en este curso, tejer redes, generar visibilidad sobre las candidatas, sobre las formas en las que son violentadas, que además pues van cambiando, ahora las vemos mucho más en redes sociales, en medios de comunicación, pero que también son tan sutiles que resulta necesario que las mujeres conozcan cuándo están siendo violentadas políticamente, cuáles son las rutas para denunciar, quiénes son las autoridades competentes para ello y, además, las exhortamos a que denuncien la violencia política.
El INE y varios institutos locales han también aprobado guías para que conozcan de manera fácil, cuándo están siendo violentadas políticamente, ante quién acudir, pero también, hasta formatos de denuncia para hacerlo de manera más ágil para todas las candidatas.
Necesario recordar que no tienen que ser ellas las que denuncien, puede hacerlo cualquier persona con la anuencia de la mujer violentada, que se pueden presentar denuncias por teléfono, por internet y, por supuesto, de manera presencial y que estaremos dando seguimiento a distintas acciones que hemos implementado justamente para materializar de manera exitosa la reforma en materia de violencia política.
Fuimos el cuarto país a nivel mundial en tener un marco jurídico que combata la violencia política en razón de género, ya se han unido en América recientemente Perú, El Salvador, creo que Panamá también y creo que esta es la tendencia y la importancia además de este tipo de cursos con la OEA, con la CIM con esta visión internacional de ponentes de distintos países que les puedan dar otras herramientas también a las mujeres para tener campañas más exitosas.
Y, también, desde luego para cuando accedan al ejercicio de su cargo utilizar muchas de estas herramientas en una exitosa gestión, en este caso de una diputación federal.
Así que me enorgullece ser parte desde el INE, una vez más, de este esfuerzo para dar estas herramientas, y estos mecanismos para que las mujeres tengan mejores opciones, posibilidades y recursos durante sus campañas electorales.
Y, por supuesto, garantizando desde el órgano electoral que seguiremos, por supuesto, apoyando e incentivando este tipo de propuestas, de cursos, de iniciativas, justamente porque haremos todo lo que esté en nuestras manos para empoderar a las mujeres, para garantizar la paridad en la integración de distintos órganos.
Y, justamente, porque ya también se decía aquí, una democracia sin mujeres no es democracia, pero tampoco es democracia si las mujeres tienen que contender en contextos violentos, donde se les violente, donde se les impida ejercer sus derechos políticos y electorales.
Así que, tenemos preocupación por mujeres comunitarias, de pueblos y comunidades indígenas, que resultan ser las más violentadas. Y por eso también hay un registro nacional de personas sancionadas en materia de violencia política, en la que se registran a nivel nacional todas las personas que han sido sancionadas ya bajo esta reforma.
Y que claramente, creo que el mensaje que quiero dejar es que ahora sí en estas elecciones pasan cosas, violentar a las mujeres tiene consecuencias. Tiene consecuencias de negar registros, tiene consecuencias de sanciones distintas, desde multa, pero también incluso es un delito.
Cometer un acto o una omisión de violencia política en contra de las mujeres es delito, e incluso hay pena privativa de cárcel, así que apliquemos todas juntas estas herramientas que ahora tenemos, visibilicemos en qué contextos contienden las mujeres.
En medios de comunicación, por ejemplo, pues se dedican todavía el triple de tiempos a campañas de hombres que de mujeres.
También estamos trabajando en cursos para sensibilizar a las personas periodistas justamente de estos temas, y para no violentar políticamente a las mujeres en cómo se transmiten la información de las campañas de las candidatas o sus planes de trabajo, de gobierno, etcétera.
Creo que es un trabajo que tenemos que hacer desde distintas trincheras, desde distintas autoridades, desde distintos ámbitos, pero que, sin duda, las mujeres ganan con iniciativas como ésta, con cursos como éstos, en los que se llenan de visiones distintas, herramientas, formas de trabajar, de implementar exitosamente distintas acciones. Y creo que esa es la importancia central de este curso.
Así que a nombre del Instituto Nacional Electoral les agradezco de verdad su esfuerzo, su apoyo, sus ganas, además, de colaborar. Y espero que próximamente podamos vernos personalmente para platicar de estas y otras experiencias, y poder seguir nutriéndonos de lo que hacemos en nuestros distintos países para garantizar la participación paritaria de mujeres.
Muchas gracias a todas.
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