VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DEL CONSEJERO PRESIDENTE DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL (INE), LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, EN LA SESIÓN DE INSTALACIÓN DEL COMITÉ TÉCNICO PARA EL SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN DE LOS TRABAJOS DE DISTRITACIÓN NACIONAL
Muchas gracias, René.
Es un verdadero placer poder estar, de nueva cuenta, en tan breve tiempo, en tan pocos años de, no solamente celebrando la instalación, sino agradeciendo el acompañamiento de las expertas, los expertos que son quienes nos han acompañado, nos están acompañando con una renovación parcial. No hay nadie en este Comité que no haya tenido alguna responsabilidad en la distritación previa, de modo tal, hoy tal vez con nuevas responsabilidades, ya no como asistentes, sino como titulares de plena forma del propio comité, así que la verdad es algo que debemos, sin lugar a dudas celebrar.
El Comité al que hoy le damos la bienvenida va a ser el responsable de una tarea de enorme relevancia para la población mexicana en los años por venir. Son ustedes los que nos acompañarán en la definición y delimitación de los 300 distritos federales y de los 679, hasta el momento, ya nos ha pasado, digo, porque esto cambia, pueden cambiar constituciones.
De hecho, ya en la distritación pasada nos hicieron rehacer la distritación, como recordarán, porque hubo un cambio en una constitución local. Hasta el momento 679 distritos locales del país.
Pero, además, estos trabajos, y no quiero a pesar de que el nombre de este Comité y de los trabajos sean el de la distritación, pues también involucra, en tanto llegamos, y en eso me sumo, a una proporcionalidad pura en la democratización como lo decía el Consejero Espadas, un sistema en donde la representación sea absolutamente proporcional es, sin lugar a dudas, más democrático que otros, así que me auguro que algún día llegue eso, pero también, desde ahora, las tareas de este comité y que tendrá en su momento que aprobar el Consejo General, estoy seguro ratificando lo que de aquí surja, pues tiene que ver también con la definición de las cinco circunscripciones plurinominales.
Así que la idea de que estos trabajos de distritación maximizan el principio de una cabeza un voto lo cual es cierto, el de la igual representación de todas y cada uno de los pobladores de nuestro país, lo cual es cierto, eso ocurre no sólo en el plano de las elecciones a nivel distrital; es decir, de las diputaciones de Mayoría Relativa, sino también, de las otras diputaciones que son tan electas como las primeras, que son las diputaciones de Representación Proporcional.
Del equilibrio de los distritos, por un lado, pero también del equilibrio de las circunscripciones plurinominales, depende el hecho de que las y los representantes reflejen la voluntad expresada y representen políticamente, en consecuencia, a un número similar de pobladores.
La tarea es titánica, no solamente por lo que va a implicar en términos de su realización, sino también, por los efectos que va a tener.
Se tiene previsto que el resultado de este esfuerzo que hoy arranca forme parte o defina el marco geográfico electoral de al menos tres elecciones federales, las de 2024, las de 2027 y la de 2030, cuando tendrá que realizarse un nuevo censo, pero que aplicará para las elecciones posteriores, además de, por supuesto, todas las elecciones locales que se realicen en este periodo de tiempo, hasta el siguiente Censo General de Población.
Los trabajos de distritación, como ya se ha dicho, garantizan equidad en el valor del sufragio, en los efectos del voto; es decir, en la representación política porque favorecen la eficacia de la logística, pero también favorece la eficacia de la logística que llevamos a cabo las autoridades electorales y contribuye, en consecuencia, a la equidad de la representación política de las y los ciudadanos.
Los trabajos de destitución no solamente tienen que ver con la presentación política, lo hacen en una primera instancia, sino que también son indispensables para la organización y logística del Instituto Nacional Electoral cada vez que se tienen que realizar elecciones.
De la distritación dependen decisiones administrativas como, por ejemplo, la eventual ubicación de las sedes distritales o en su caso, de las sedes de circunscripción, de las cabeceras de circunscripción. En el ejercicio de distritación pasado 60 distritos electorales tuvieron un cambio de cabecera lo que implica una logística y consecuencias administrativas muy importantes para el Instituto Nacional Electoral, nuevas oficinas, reasignación de funcionarios, además de, por supuesto, una logística que tiene que reafinarse, que reajustarse de cara a cada elección.
Finalmente, las cabeceras distritales son a donde, en la noche de cada Jornada Electoral, tienen que confluir la totalidad de los paquetes una vez que la votación se ha cerrado en las casillas y la logística, los caminos, las distancias, los tiempos de traslado dependen del trabajo que al final del día realice este Comité y apruebe en la distritación el Consejo General del INE.
De acuerdo con el Censo de 2020 la población total del país ahora es de poco más de 126 millones de personas, lo que significa 13.6 millones más que en 2010, el Censo que sirvió de base para la distritación que hoy está todavía vigente.
Ese incremento de más de 12 por ciento en 10 años, aunado a la dinámica migratoria y a la movilidad propias de la población mexicana, sin duda tiene un impacto en el equilibrio poblacional de los distritos federal y locales, y vuelvo a insistir, también de las circunscripciones y éste habrá de corregirse con los trabajos que comienzan el día de hoy.
Con el propósito, ya señalado por la doctora Celia Palacios, de conseguir una desviación siempre mínima al 15 por ciento respecto de la media poblacional a nivel distrital que ha sido considerada técnicamente como óptima para poder orientar los trabajos de distritación.
En el INE tenemos muy claro que las elecciones tienen que acompañarse de la ciencia: de observaciones objetivas, de trabajos imparciales, de datos confiables y de resultados aplicables. Por cierto, de la ciencia a secas, lo otro no es ciencia, la ciencia siempre a secas y sin adjetivos.
Hacerlo así ha contribuido a construir la confianza ciudadana y, por supuesto, la de las representaciones políticas, por ello, desde hace muchos años las decisiones técnicas fundamentales y complejas que tiene que tomar el INE han contado con el apoyo de personas expertas como ustedes que conforman los Comités Técnicos Asesores.
En este momento, de cara a la elección más grande de la historia, el INE tiene integrado el Comité Técnico Asesor del PREP, el Comité Técnico de Evaluación del Padrón Electoral, el Comité Técnico Asesor para los Conteos Rápidos, el Comité Técnico de Seguimiento a la ENCCÍVICA, el Comité Técnico de Evaluación del Fondo de Apoyo a la Observación Electoral, el Comité Técnico de Acompañamiento de la Consulta Infantil y Juvenil y ahora, con ustedes, el Comité Técnico de Distritación.
Afortunadamente, como institución, y este Comité, tanto el INE como institución, como este Comité, como decía, con todos sus integrantes, tenemos una tarea reciente y tota, el INE ya ha realizado la distritación que de 2014 mandata la Constitución tanto en el plano federal como en el local.
Actualmente todos los distritos locales y federales ya han sido delimitados por el INE en 2016 y 2017, luego de que la reforma del 2014 encomendó a esta institución de manera exclusiva todas las tareas de delimitación de los límites geográfico-electorales del país, tanto en el plano nacional como en el plano local.
Vamos, en este sentido, por primera vez en la historia de nuestro país a hacer dos distritaciones a nivel nacional en apenas siete años.
La integración de este Comité del que vale la pena señalar, por cierto, y perdónenme me sale lo Puma y no puedo obviarlo, todos sus integrantes han realizado al menos alguno de sus estudios superiores en la UNAM, es una venturosa combinación de experiencia en las áreas de geografía, demografía, matemáticas, economía y políticas públicas.
Quiero resaltar además que cumple con los dos objetivos primordiales que el INE se ha definido en esta materia.
Primero, buscar la paridad de género no como cuota, como se decía, sino como un ejercicio consciente que garantice espacios de inclusión para las mujeres, cuyo profesionalismo y calidad técnica hablan por sí solos.
Y, segundo, promover la integración de comités combinando la experiencia que proporciona el haber integrado este tipo de órganos previamente, con nuevas perspectivas que pueden aportar quienes tendrán la oportunidad de integrarlos formalmente como miembros formales, por primera vez.
Este Comité tendrá frente a sí muchos retos, uno de ellos, especialmente complejo es el derivado del actual contexto de pandemia; la distritación demanda por su propia naturaleza un intenso trabajo de campo, ello aunado al compromiso ineludible de este Instituto con las consultas que deben realizarse a los pueblos y comunidades indígenas, para garantizar la inclusión de los mismos en este proceso de decisión.
Ambos, estos desafíos, significan que tanto para las personas expertas que integran este Comité, como para el INE, debemos proponer soluciones pertinentes y creativas con las que, hasta ahora, no necesariamente nos hemos enfrentado en el pasado.
Un dato curioso, por cierto, del que no podemos, creo, que no puedo dejar de subrayar y del que no podemos dejar de enorgullecernos, es que los trabajos de la distritación que hoy arrancan, estamos frente al enésimo ejercicio de esta naturaleza, justo cuando hoy en Estados Unidos ha estado, como pocas veces antes, padeciéndose los ejercicios de una distritación políticamente sustentada: el famoso gerrymandering. En México eso lo hemos dejado atrás desde hace mucho tiempo y hoy somos un ejemplo de cómo la ciencia, la tecnología, pero también la informática acaba generando modelos que nos permiten configurar, sin ningún sesgo político, la delimitación de los procesos, de los distritos electorales y de las circunscripciones plurinominales.
Y esto, sin obviar el trabajo político que tendrá que hacerse de convencer, de incluir, de construir consensos en algo que es la piedra angular de todo proceso electoral; que la base de la geografía electoral sea fuente de certeza, de confianza, y no de disputa ni de conflicto.
Termino agradeciéndoles a todas y todos, su compromiso, su aceptación, la reiteración de participar en este ejercicio del que, como estoy seguro ocurrirá, nuevamente daremos buenas cuentas a la sociedad mexicana.
Quiero tomarme, y ofrezco una disculpa, la oportunidad también para hacer aquí entre sus amigos un sentido reconocimiento póstumo al ingeniero Miguel Ángel Rojano López, amigo de todas y todos quienes integran este Comité.
Un funcionario que acompañó los trabajos de muchos de estos comités en el pasado, que fuera nuestro director, como saben, de Cartografía Electoral, hasta hace algunas semanas, cuando lamentablemente nos dejó, cuando lamentablemente falleció.
Sin lugar a dudas habremos de echar en falta su experiencia y conocimientos, pero, sobre todo, su enorme calidad humana.
Permítanme terminar, pues, como corresponde, agradeciendo a la maestra Elisa Marcela Cheng, a la maestra Leticia Gerónimo, a la doctora Celia Palacios, al doctor Miguel Ángel Gutiérrez, al maestro Juan Manuel Herrero, y al maestro Rodrigo Morales, por haber aceptado la responsabilidad de llevar a cabo esta importantísima tarea de la que depende la recreación también de la democracia mexicana.
Cuenten con el apoyo del cuerpo de consejeras, del claustro de consejeras y consejeros electorales, de la Presidencia, perdón, Uuc-kib, permíteme hablar, hablo al final así que lo reitero, de la Presidencia de la Comisión, de los integrantes, de las integrantes de la propia Comisión, de quienes integramos el Consejo General , que al final del día tenemos que votar los trabajos que ustedes conducirán y, por supuesto de la presidencia del Consejo General y de la Dirección Ejecutiva del Registro Federal de Electores, a cargo del ingeniero René Miranda.
Muchísimas, muchísimas gracias.
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