Número: 388
- Concluye foro internacional Debates Electorales: El reto hacia 2018
- Los periodistas Sergio Sarmiento, Pascal Beltrán del Río y Gabriela Warkentin participan en la mesa “¿Qué debate queremos?”
Al clausurar el foro internacional Debates Electorales: El reto hacia 2018, el consejero Marco Antonio Baños afirmó que el Instituto Nacional Electoral (INE) pondrá en práctica las conclusiones de este ejercicio para la realización de verdaderos ejercicios de deliberación y discusión entre las y los candidatos.
Refrendó que “los debates no están prohibidos”, por lo que es necesario encontrar mecanismos para que estos sean organizados por universidades, medios de comunicación y estructuras ciudadanas.
Marco Baños, señaló que a partir de este foro internacional, se han planteado algunos retos que el Instituto y la Comisión Temporal de Debates tendrán que resolver, entre los que destacó: superar los formatos acartonados y alcanzar un papel más activo de los moderadores sin ocupar un rol protagónico.
Además de involucrar a la sociedad y a los medios de comunicación en la organización de debates ciudadanos no necesariamente organizados por el INE, potenciar su difusión para que sean accesibles a una mayor población, generar interacción entre la ciudadanía y los candidatos que debaten, así como generar formatos en los que exista el tiempo suficiente para exponer las ideas de todos los participantes.
El consejero Baños agradeció a las y los participantes, así como al Instituto Nacional Demócrata y la Comisión de Debates Presidenciales de Estados Unidos su intervención en la organización del foro. “Su participación no se quedará sin consecuencias, vamos a tomar lo que aquí se dijo y promoveremos más y mejores debates”.
Durante la última mesa del foro titulada ¿Qué debate queremos?, el periodista Sergio Sarmiento consideró que los debates son “absolutamente indispensables, pero no son una panacea” para conocer las cualidades de un político, ni tampoco para resolver los problemas políticos del país.
El conductor de la Red de Radio Red y de La Entrevista sugirió la realización de debates más sencillos, “tener reglas excesivas no garantiza la equidad, pero sí que tengamos malos debates”; absoluta libertad para hacer tantos como sea necesario y que no necesariamente tengan como participantes a todos los candidatos, ya que “cuando hay más de tres candidatos son caóticos”.
El también columnista y colaborador de medios internacionales dejó en claro que “los debates no van a resolver los problemas que aquejan al sistema electoral mexicano, pero sin debates este sistema no hará más que seguir perdiendo credibilidad y sobre todo eficacia para permitir a los ciudadanos conocer las ideas de los candidatos”.
Pascal Beltrán del Río, periodista de Grupo Imagen, señaló que la sociedad mexicana “no tiene una cultura del debate”, al prevalecer la concepción de que son aburridos y acartonados, y que de ellos difícilmente se puede obtener una idea formada de lo que plantean los candidatos.
Celebró que el INE realice este tipo de foros antes del inicio del periodo de las campañas electorales, con la finalidad de proponer formatos más dinámicos “en los que se pongan a prueba los conocimientos y habilidades de los candidatos, mediante una mayor interacción entre los mismos. Un debate sin interrupciones no es debate”, planteó Beltrán del Río al señalar que los medios de comunicación deberían convocar a debates adicionales, con formatos novedosos, para brindar a la sociedad más información de los candidatos y de sus propuestas de gobierno.
Enseguida, la directora de W Radio y Televisa Radio, Gabriela Warkentin, consideró que no se deben poner plazos fatales, sino metas realistas y alcanzables para la transformación del debate, pero –advirtió- sería un fracaso absoluto si no pasa nada y siguen iguales.
“Si para el próximo año no logramos el debate ideal, pero sí avanzamos en otros formatos, en aligerar lo acartonado, en que el moderador tenga un papel activo, en que intervengan las nuevas tecnologías y si podemos sacarlo en otros espacios y públicos, se habrá logrado un avance”, dijo.
La también académica del CIDE delineó tres intereses para la organización de debates: forman parte de la cultura política de la democracia mexicana; son vistos como un espectáculo para los ciudadanos y deben tener un interés pedagógico “el que podamos empezar a ver que forman parte de nuestra normalidad e ir construyendo una sociedad política de manera conjunta”.
En suma, agregó, entender que el debate es parte de una transformación cultural de cómo se entiende la sociedad mexicana.