VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DEL CONSEJERO PRESIDENTE DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL (INE), LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, EN EL PUNTO 24 DE LA SESIÓN EXTRAORDINARIA, POR EL QUE SE APRUEBA EL PROYECTO DE LA DEMARCACIÓN TERRITORIAL DE LOS TRESCIENTOS DISTRITOS ELECTORALES FEDERALES UNINOMINALES EN QUE SE DIVIDE EL PAÍS Y SUS RESPECTIVAS CABECERAS DISTRITALES, A PROPUESTA DE LA JUNTA GENERAL EJECUTIVA
Por segunda vez, en poco más de 5 años esta autoridad electoral ha tenido que desplegar toda su experiencia técnica, su talento estadístico e informático, sus conocimiento de campo sobre la geografía electoral y la capacidad pedagógica adquirida en más de 3 décadas de organizar elecciones para llevar a cabo la re-delimitación de los 300 distritos electorales uninominales federales en que, de acuerdo con el mandato constitucional que dividirse el territorio nacional.
La primera vez que el INE trazo los perímetros de estos distritos federales ya como INE, fue allá en marzo de 2017 para garantizar el necesario equilibrio poblacional que deben tener los distritos uninominales con base en los datos del Censo General de Población y Vivienda de 2010.
Con el marco geográfico electoral y vigente, entonces, con el marco geográfico electoral aprobado en 2017 se realizaron las últimas dos contiendas federales, la de 2018 y 2021.
En esta segunda ocasión en la que el INE tiene que realizar esta tarea ya como Instituto Nacional, el marco geográfico que hoy aprobaremos se utilizará en los siguientes tres comicios federales ordinarios, los de 2024, 2027 y 2030.
Esa es la importancia que para el futuro organizativo de las elecciones tiene la distritación federal que está a nuestra consideración.
Hemos dicho que actualizar la geografía electoral del país mediante el trazo de los distritos electorales uninominales es una atribución constitucional exclusiva del Instituto Nacional Electoral aplicable, tanto para las elecciones federales, como para las que se realizan en cada una de las 32 entidades federativas y fue objeto, justamente, en su último bloque de aprobación hace algunas, un par de horas.
También hemos explicado ampliamente que esta atribución debe realizarse periódicamente por mandato constitucional con base en los resultados definitivos del Censo General de Población y Vivienda, con la finalidad de que los movimientos demográficos que se experimentan el interior de una entidad entre entidades e, incluso, el impacto de los flujos migratorios que traspasan las fronteras de nuestro país, no afecten la calidad de la representación política.
El equilibrio poblacional entre los distritos uninominales busca que cada legislador sea elegido por una cantidad similar de habitantes o represente una cantidad similar de habitantes y cada diputado o diputada represente en consecuencia paritariamente a los mexicanos en el Congreso, dicho de otra manera, la importancia de una adecuada distritación en una democracia representativa se desprende de que el equilibrio poblacional tiene dos efectos, por una parte, garantiza mayor equidad en el valor del sufragio al momento de votar, que garantiza que el voto sea igual al de los demás, que una persona sea igual a la de las demás, no solamente al momento de ser emitidos, sino también, al momento de ser representado y por otra contribuye en consecuencia equilibrar el valor relativo de cada representante en los órganos legislativos, es decir, que cada legislador represente un número similar de personas.
Esa es la trascendencia del proyecto de re-delimitación de los 300 distritos electorales uninominales federales que está en nuestra consideración y que fue elaborado con base en la aplicación de diversas metodologías de sofisticadas herramientas informáticas con la activa participación de los partidos políticos nacionales y de un novedoso proceso de consulta entre las comunidades y pueblos indígenas, que involucro a 6 mil 823 participantes y contó con las opiniones de 5 mil 640 autoridades indígenas o afro mexicanas, debo subrayar que la re distritación federal de 2022 logró corregir la desviación poblacional de los 38 distritos como ya mencionaba el consejero Murayama, que producto de la dinámica poblacional se encuentran actualmente hasta hoy fuera del rango aceptado de más o menos 15 por ciento.
En términos electorales esto significa que la población de 38 distritos hoy, con base en la previa estaba o subrepresentada en la Cámara de Diputados como producto de esa dinámica demográfica experimentada entre 2010 y 2020.
Permítanme poner unos datos esenciales sobre el proceso de configuración distrital que hoy llega a su fin: Primero, los 300 distritos uninominales incluidos en el proyecto de acuerdo que estamos conociendo cumplen invariablemente con los criterios establecidos en la Constitución y con los criterios técnicos aprobados, en consecuencia, lo primero por este Consejo General.
Segundo, los trazos distritales garantizan el equilibrio poblacional, cumplen con los principios de compacidad, continuidad geográfica y se analizaron, corresponden al análisis cuidadoso de la integridad indígena y municipal al interior de los distritos.
Tercero, para fortalecer el carácter incluyente y reflejar los origines pluriculturales en la representación legislativa, se realizaron 219 reuniones considerando, tanto a las informativas, como las de consulta entre la población de las distintas comunidades y pueblos originarios de todo el país.
Cuarto, de esa retro alimentación, se tiene como producto que el número de distritos indígenas incrementó de 28 a 44.
Quinto, el conocimiento de campo que tienen las representaciones técnicas de los partidos políticos en las comisiones de vigilancia, nacional, locales y distritales, permitió que el trazo de 22 distritos fuera aprobado por el consenso de todas las fuerzas políticas y que otros 10 distritos fueran aprobados por mayoría.
En síntesis desde mi perspectiva, la distritación de 2022, constituye el proyecto de delimitación distrital uninominal federal más incluyente y con el mayor consenso político que haya implicado una distritación en la historia de nuestra democracia.
Este proyecto de reconfiguración de los perímetros distritales, fue posible tanto por las herramientas técnicas e informáticas utilizadas como por la colaboración de las representaciones de todos los partidos políticos, y por el profundo conocimiento de campo que tienen nuestros vocales locales y distritales en nuestro país, como hemos venido insistiendo.
Sin esa colaboración y sin esos conocimientos de campo, que solo son posibles por el andar casi cotidiano de un extremo a otro de todas las secciones electorales que integran cada distrito, el proyecto de distritación que está a nuestra consideración sería un mero ejercicio de gabinete, alejado de la realidad, y éste no es así.
Por ello, desde aquí, desde esta mesa del Consejo General, hago público mi reconocimiento a todo el personal que labora en el Instituto Nacional Electoral y todo el personal que integra las tareas registrales.
Y lo hago hoy porque estamos, como se sabe, en vísperas de una discusión legislativa que plantea un profundo redimensionamiento, una profunda redefinición de esta autoridad.
Concluyo reiterando mi agradecimiento a la Comisión de Registro Federal de Electores, al personal de la Dirección Ejecutiva del Registro Federal de Electores, y a los integrantes del Comité Técnico para el Seguimiento y Evaluación de los Trabajos de Distritación, por su cuidado y profesionalismo.
De la misma forma, agradezco a nuestras vocalías locales y distritales, a los partidos políticos representado en las distintas comisiones de Vigilancia, y a los representantes y líderes de pueblos y comunidades indígenas que participaron en estos trabajos, por su compromiso con el diseño de una geografía electoral más incluyente para nuestra vida democrática.
Gracias a todas y todos, y gracias también a la UNAM, como decía, otro órgano orgullosamente autónomo del Estado mexicano, que reitera con la colaboración en este ejercicio, una vez más, la alianza estratégica que entre el INE y nuestra máxima casa de estudios se ha forjado.
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