VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DEL CONSEJERO PRESIDENTE DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL (INE), LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, EN EL PUNTO 14 DE LA SESIÓN EXTRAORDINARIA, POR EL QUE SE APRUEBAN LAS MODALIDADES DE VOTACIÓN POSTAL Y ELECTRÓNICA POR INTERNET, RESPECTIVAMENTE; LOS LINEAMIENTOS PARA LA ORGANIZACIÓN DEL VOTO POSTAL DE LAS CIUDADANAS Y LOS CIUDADANOS MEXICANOS RESIDENTES EN EL EXTRANJERO; LOS LINEAMIENTOS PARA LA ORGANIZACIÓN Y OPERACIÓN DEL VOTO ELECTRÓNICO POR INTERNET PARA LAS Y LOS MEXICANOS RESIDENTES EN EL EXTRANJERO, AMBOS PARA LOS PROCESOS ELECTORALES LOCALES 2020-2021; ASÍ COMO LA PRESENTACIÓN DE LOS DICTÁMENES DE AUDITORÍA AL SISTEMA DE VOTO ELECTRÓNICO POR INTERNET PARA LAS Y LOS MEXICANOS RESIDENTES EN EL EXTRANJERO, A PROPUESTA DE LA JUNTA GENERAL EJECUTIVA
El proyecto de acuerdo que estamos por discutir y votar es muy importante de cara a las elecciones del próximo año y trascendente, muy trascendente en el contexto social e histórico en que se desarrollarán dichos comicios.
El acuerdo para la instrumentación del voto de las mexicanas y los mexicanos residentes en el extranjero, bajo las modalidades postal y electrónica por Internet para los Procesos Electorales Locales 2020-2021, es, si se quiere ver así, una incursión del sistema electoral en un futuro que hoy se nos ha vuelto inminente.
Vivimos un momento inédito en el que la humanidad ha tenido que acelerar muchos de los procesos de trabajo a distancia que se venían desarrollando a un ritmo paulatino y relativamente lento antes de la pandemia de COVID-19.
La crisis sanitaria, obligó al confinamiento y el confinamiento precipitó la adaptación de nuevas actividades cotidianas y nuevos procesos tecnológicos productivos a través de esquemas virtuales como, justamente, esta sesión es prueba de ello.
Ese es el marco en el que diversas áreas técnicas del Instituto Nacional Electoral elaboraron los Lineamientos para la organización del Voto Postal y los Lineamientos para la organización y operación del Voto Electrónico por Internet para las y los Mexicanos Residentes en el Extranjero que hoy se someten a consideración de este Consejo.
Como todas y todos ustedes saben, en las elecciones del próximo año, nuestros compatriotas residentes fuera del territorio nacional podrán votar para las gubernaturas de Baja California Sur, Chihuahua, Colima, Guerrero, Michoacán Nayarit, Querétaro, San Luis Potosí, Zacatecas, además de la diputación migrante en la Ciudad de México y una diputación de representación proporcional en el estado de Jalisco.
Para ello, este Consejo aprobó dos modalidades de votación a distancia: la tradicional vía postal, en la que el INE tiene ya una larga y acreditada experiencia y la que quizás resulta más novedosa para la institución y para la sociedad mexicana, que es la del voto electrónico por internet.
Y permítanme una remembranza.
En octubre de 2018, al finalizar el proceso electoral de ese año, celebramos un seminario de evaluación del voto de las mexicanas y los mexicanos residentes en el extranjero y ahí advertimos que si bien este proceso de duplicó, en ese proceso se duplicó la participación de nuestros compatriotas respecto a lo ocurrido en 2012, el mecanismo seguía siendo muy complejo, costoso y propició que, finalmente, participará apenas el 54 por ciento de las 181 mil personas que se inscribieron en la lista nominal de residentes en el extranjero, a las que se les envió un paquete postal para emitir su sufragio.
Desde entonces, decidimos que la Comisión del Voto de Mexicanos en el Extranjero, se dedicaran a analizar condiciones de votación que nos permitieran ampliar el alcance y la posibilidad de que las y los mexicanos fuera del país pudieran participar en las decisiones políticas y por eso avanzamos en el análisis, desarrollo de la modalidad de voto electrónico por internet tomando en cuenta lo que ha ocurrido en muchas otras experiencias a nivel global y también a nivel nacional. La Consejera Ravel lo sabe perfectamente, ha habido ya antecedentes en el ámbito local del voto por internet.
Al respecto, es importante recordar que la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales en su régimen transitorio prevé que esta modalidad de voto siempre y cuando se garantice cuatro condiciones: Uno, que quien emita el voto sea la o el ciudadano mexicano residente en el extranjero que tiene derecho a hacerlo; dos, que el votante desde el extranjero no puede emitir más de un voto por la vía electrónico u otras de las previstas en la ley; tres, que el sufragio sea libre y secreto; y, cuatro, la efectiva emisión, transmisión, recepción y cómputo del voto recibido.
Para tal efecto, la ley ordena que al INE contar con el dictamen de, al menos, dos empresas de prestigio internacional que certifiquen la funcionalidad del sistema, lo cual ocurrió en los últimos meses y, de hecho, en este mismo acuerdo que vamos a votar se tienen por presentados los dictámenes de dichas auditorías, una de ellas realizada por la UNAM y otra por la empresa Deloitte.
Las auditorías permiten concluir que el Sistema de Voto Electrónico por Internet para residentes en el extranjero cuenta con los elementos necesarios para llevar a cabo los procesos con un nivel de seguridad adecuado, se acreditó que la funcionalidad instrumentada en el código fuente del sistema es acorde a su arquitectura y se pudo dar cuenta, de que la información se procesa de manera íntegra en los diversos flujos del sistema.
Para validar lo anterior, se llevaron a cabo dos simulacros, uno del 24 al 27 de marzo y uno más del 10 al 14 de agosto pasados.
En ambos, se pudo corroborar la estabilidad del sistema y las garantías de efectividad, secrecía y certeza, exigidas en la LGIPE.
Los lineamientos de voto electrónico por internet que se ponen a consideración del Consejo General también sentarán las bases de los convenios de coordinación y colaboración que celebrará el INE con los Organismos Públicos Locales Electorales de las entidades antes mencionadas en las que las leyes locales prevén esta modalidad de voto.
Se busca, que para el 1º de mayo del 2021 esté integrada la lista nominal de electores residentes en el extranjero para generar las respectivas cuentas de acceso y contraseñas, además, del diseño y envío de materiales.
Se prevé también, que el periodo de votación se abra el 22 de mayo de 2021 y se cierre el 6 de junio del próximo año a las 18:00 horas.
Como decía, este acuerdo es una inclusión en el futuro previsible de nuestra democracia.
Si se quiere una discreta incursión todavía, pero que será de gran utilidad para imaginar, planear, pero, sobre todo, para construir la certeza que hoy tiene y que debemos preservar en el futuro de nuestro sistema electoral.
Lo dijimos desde 2018, y vale la pena reiterarlo hoy que enfrentamos una situación inédita, que desafía nuestras instituciones, nuestras normas y nuestra antigua normalidad.
La ruta está marcada y la ruta es el voto electrónico.
Corresponderá a los legisladores, desde luego, después del Proceso Electoral 2020-2021, discutir la manera de hacer viable esta modalidad de voto, también dentro del territorio nacional, aprovechando la experiencia, pero, sobre todo, los que estamos seguros, buenos resultados que arrojará este ejercicio, sin perder ni poner en jaque los actos estándares de confiabilidad y certeza que hemos construido hasta ahora.
La experiencia del proceso que instrumentaremos a partir de los lineamientos que están a nuestra consideración será, sin duda, de gran utilidad para la deliberación.
Una consideración adicional respecto de las auditorías que hoy también se presentan al Consejo, son auditorías que, como decía, avalan la pertinencia, a la seguridad, la adecuada conformación de la arquitectura del sistema de votación, y también generan una serie de sugerencias que serán atendidas puntualmente de cara a los resultados finales y a principios del próximo año, ambas empresas entregarán.
La auditoría sirve no solamente para validar, estamos por la ruta correcta, sino también para mejorar en distintos aspectos técnicos el propio sistema de cara a su utilización en las elecciones constitucionales del próximo año.
A solo 10 días de que inicie formalmente el proceso electoral más grande de nuestra historia, hoy seguimos dando pasos para la preparación de esos comicios que tendrán que ser, al mismo tiempo, los mejor organizados y con los más altos estándares de certeza para los actores políticos y para la ciudadanía.
Está a su consideración, por supuesto, el proyecto.
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