El presupuesto del INE para 2019

Escrito por: Redacción INE
Tema: Presupuesto INE 2019

Por: Dagoberto Santos Trigo, Vocal Ejecutivo del INE en Guerrero 

A raíz de la tersa alternancia en el poder, mediante el veredicto de las urnas (depositario de la voluntad soberana de la nación), la organización de comicios limpios, transparentes y participativos cobró una importancia sin precedentes en la historia de la competencia electoral en nuestro país.

Por primera vez, en muchos años, la ciudadanía entendió que su voto cuenta, que su sufragio sirvió para “algo”; que el esfuerzo por asistir a votar tuvo consecuencias gratificantes para beneficio de sus intereses.

Las y los ciudadanos sintieron que su voz estaba asegurada. El árbitro de las elecciones no cejó en aportar todo su talento material, humano y financiero para que los actores políticos respetaran, a cabalidad, las reglas del juego democrático.

Esa voluntad de la autoridad electoral nacional por hacer respetar los principios constitucionales de libertad, secrecía y autenticidad de los comicios fue fundamental para que las y los electorales plasmaran sus preferencias sin restricciones.

En este sentido, reconozco el liderazgo auténtico, decidido y confiable que desplegó el Doctor Lorenzo Córdova Vianello en los meses pasados, pero en especial, en esta hora cero, en este tiempo crucial para nuestra Institución, en la defensa de un presupuesto adecuado para el INE en este 2019.

El INE, como autoridad del Estado mexicano, debe velar por el cumplimiento de sus obligaciones constitucionales, entre las que se encuentran:

  1. Organizar las elecciones.
  2. Fortalecer el régimen de partidos políticos.
  3. Garantizar los derechos político-electorales de la ciudadanía, entre ellos, la expedición de la credencial para votar; identificación con enorme legitimidad entre todos los entes públicos y privados de México.
  4. La fiscalización de los recursos de los partidos políticos a lo largo y ancho de la república.

El proceso de aprobación del anteproyecto de presupuesto se hizo de manera responsable, apegado a los principios de eficiencia y eficacia de las leyes correspondientes. Inclusive hubo una disminución, en términos reales, del monto final respecto a lo aprobado en 2016, año en que es posible la comparación.

Sin embargo, la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión no lo percibió así. Las medidas de austeridad se aplicaron conforme al contexto de responsabilidad social imperante y, al parecer, la autoridad presupuestaria, lo consideró insuficiente.

Es visible que se lacera la autonomía del INE. Algunas otras tareas y acciones corren el riesgo de no ser implementadas en detrimento de nuestros proyectos estratégicos.

No obstante, existe un entramado que siempre renueva sus bríos ante las adversidades: las y los integrantes del Servicio Profesional Electoral Nacional y el personal administrativo. Ellos son el pilar de la Institución en momentos de sosiego y en periodos de turbulencia como los que ahora se presentan. En ellos recae la organización de las elecciones bajo estándares de calidad y profesionalismo.

Y para preservar lo alcanzado se necesita suficiencia presupuestaria con el fin de contar con materiales y documentación electoral, listas nominales de electores, credenciales para votar, procedimientos para integrar las Mesas Directivas de Casilla, monitoreo de los medios de comunicación, etc. Todo lo anterior para hacer frente a las obligaciones actuales y comenzar con la planeación de nuestra siguiente justa cívica.

Mención especial merecen nuestras actividades de Educación Cívica para la construcción de una ciudadanía crítica. Las nuevas generaciones se merecen un espacio deliberativo para la acción y, sobre todo, para la comprensión del porqué de la necesidad de edificar una sociedad plural, tolerante y diversa.

No puede esta responsabilidad ponerse en vilo. Nuestro guía, el Doctor Córdova Vianello, nos sigue inculcando ese anhelo.

La sociedad mexicana requiere un organismo capaz de enfrentar los nuevos retos de la democracia, sin ningún tipo de presión económica o aún partidista. Las contingencias se resuelven con persuasión sólida y con argumentos lógicos. Aristóteles lo dijo, tajante: “la democracia ha surgido de la idea de que, si los hombres son iguales en cualquier respecto, lo son en todos”.