En cumplimiento al artículo 431 del Reglamento de Elecciones, cuyo propósito es atender el principio de definitividad que rige los procesos electorales y, por tanto, difundir la realización y conclusión de los actos y actividades trascendentes de este Órgano Electoral, esta Secretaría pone a su consideración el Tercer Informe de definitividad en torno al Proceso Electoral 2017-2018, que considera el periodo que va del 29 de marzo al 1º de julio de este año.
Como es de su conocimiento este proceso comprende cuatro grandes etapas: preparación de la elección; Jornada Electoral, resultados y declaración, validez de las elecciones, y finalmente dictamen y declaración de validez de la elección y Presidente electo.
En este informe damos cuenta de la fase final de la primera etapa, la de preparación de la elección, así como del desarrollo de la segunda, la Jornada Electoral.
Han transcurrido 10 meses desde que inició formalmente el proceso electoral más complejo en la historia de México. Decimos que fue el más complejo por la gran cantidad de cargos a elegir, la concurrencia de 30 elecciones locales, el tener que implementar la reforma electoral en una elección presidencial, entre muchos otros retos que fuimos enfrentando y resolviendo día a día.
Durante el periodo que se reporta el Consejo General avaló la conformación de tres coaliciones que postularon candidatos presidenciales, se aplicó la normativa para candidaturas independientes y celebró sesión especial para el registro de candidaturas para las elecciones federales.
Luego, a lo largo de los tres meses siguientes, los partidos políticos sustituyeron más de 400 de las candidaturas originalmente aprobadas, las campañas se desarrollaron en normalidad y el INE cumplió en tiempo y forma con dos de sus responsabilidades más relevantes para generar condiciones de equidad, pues como se ha dado cuenta en este informe y en informes anteriores, se otorgaron las prerrogativas previstas en la ley, de manera que los partidos políticos y candidatos contaron en todo momento con financiamiento para el ejercicio de sus actividades y con tiempo en radio y televisión para la difusión de sus mensajes, para mencionar las prerrogativas más significativas.
Este Consejo General declaró válidos y definitivos, tanto el Padrón Electoral, como la Lista Nominal de Electores para ser utilizados en la Jornada Electoral del 1º de julio pasado, tanto en elecciones federales como locales, lo cual permitió que poco más de 89 millones de ciudadanas y ciudadanos estuvieran en condiciones de emitir su voto.
Además, fue posible afinar los procedimientos para que los 300 consejos distritales aprobaran la instalación de 156 mil 807 casillas.
El voto foráneo también tuvo su complejidad, producto de las innovaciones de la reforma electoral, por primera vez los ciudadanos mexicanos residentes en el extranjero pudieron solicitar y tramitar su Credencial para Votar desde otro país, lo que posibilitó entregar y activar medio millón de credenciales; asimismo, se puedo votar por primera vez desde el extranjero por senadores.
Si bien, no fue posible avanzar hacia la modalidad electrónica, lo cierto es que se tuvo un importante alcance de cobertura a través del voto postal. En esta ocasión la Lista Nominal de Residentes en el Extranjero contó con poco más de 181 mil ciudadanas y ciudadanos provenientes de más de 120 países.
La realización, conclusión y, por supuesto, definitividad de las actividades reportadas a lo largo de tres meses, hizo posible dar paso a la segunda etapa del proceso electoral, la Jornada.
En términos generales, podemos asegurar que se trató de una Jornada ejemplar, el INE generó las condiciones propicias para su buen desarrollo y acudieron a las urnas 63.42 por ciento del total de los potenciales electores; se pudieron instalar 156 mil 792 casillas, es decir el 99.99 por ciento de las aprobadas por los consejos distritales, en donde se recibieron más de 56 millones de votos, mismos que después fueron contados por cerca de un millón de ciudadanos, que fungieron efectivamente como funcionarios de casilla.
En las 253 mesas de escrutinio y cómputo dispuestas para contar los 98 mil 854 sobres voto recibidos desde el extranjero, más de mil ciudadanos participaron como funcionaros de casilla.
En esta Jornada Electoral, fue inevitable que sucedieran diversos incidentes. El Sistema de Información sobre el Desarrollo de la Jornada Electoral, contabilizó cuatro mil 153 incidentes de diversas categorías, la gran mayoría resueltos o atendidos. Y hay que destacar que, tan solo en 33 casos, los incidentes implicaron la suspensión definitiva de la votación.
21 de dichos casos se registraron en el estado de Puebla, ya que tal y como lo informé el mismo día de la Jornada, en esta entidad se suscitaron diversas situaciones de violencia que fueron reportadas de manera inmediata a las autoridades competentes.
No obstante, y pese a esos incidentes, la Jornada Electoral se mantuvo como un ejemplo de civilidad y participación ciudadana.
Señoras y señores consejeros y representantes, en un proceso electoral tan complejo como el que está por concluir, no sólo por el desafío institucional que implicó la organización de tres elecciones federales, a la par de 30 elecciones locales, sino por las complicadas condiciones políticas y sociales que atraviesa nuestro país, ha resultado indispensable respetar, procurar y proteger el principio de definitividad que dota de certeza a nuestros procesos electorales.
Esa certeza tan necesaria, absolutamente irremplazable para la vida electoral mexicana y que nos ha permitido transitar hacia la alternancia pacíficamente, y así sustituir los poderes de manera legal e irrefutable.
Esta certeza que dota de definitividad los actos y decisiones de la autoridad electoral es lo que busca documentar el informe que está a su consideración.
Es cuanto señor Presidente.
Versión estenográfica de la intervención del Secretario Ejecutivo, Edmundo Jacobo, en el punto 6 de la Sesión Ordinaria del 18 de julio de 2018, relativo al tercer informe en atención al principio de definitividad que rige los Procesos Electorales, la realización y conclusión de las etapas, actos y actividades trascendentes de los Órganos Electorales del Instituto
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