Temí por un momento que Marco me echara a perder la broma que, a la que provocatoriamente nos convocó Lulú a partir de lo de la elección.
Yo agregaría, así que y le agradezco a Marco que lo haya planteado como lo planteó porque me permite, de manera complementaria decir que sí, que en efecto, como dice Marco, tenemos el firme propósito de sobrevivir.
Probablemente a estas elecciones, probablemente acabemos medio muertos, y espero que también eso sea metafórico como suele ocurrir para las autoridades electorales al cabo de la elección. Va a ser metafórico.
Y el hecho de que aquí estén las representaciones de los partidos políticos en, que agradezco mucho, y en particular la de Luis que en estos temas provocatoriamente siempre acude y manda saludos a los, como seguramente lo hizo a los presidentes y las presidentas de los demás partidos políticos, porque es muy importante, finalmente los partidos son los actores protagónicos, no los únicos, pero uno de los actores protagónicos de la vida democrática.
Y el compromiso en estos temas que son transversales, más allá de las diferencias ideológicas, programáticas que a veces, digamos, en el contexto de las elecciones que cuando creo deberían más robustecerse, tienden por la propia, digámoslo así, por la propia, por el pragmatismo electoral que tampoco se les puede reclamar a veces a diluirse, pero yo creo que es importantísimo el compromiso que es, insisto, no de cara a las elecciones, sino transversal a ellas, de los propios partidos políticos su presencia y acompañamiento.
Su apropiación, diría Edmundo, y creo que eso es importante, de una estrategia que no es una estrategia para los órganos electorales, como ya también decía nuestro Secretario Ejecutivo, sino que, algo que desde los propios organismos electorales hemos planteado provocatoriamente para que dicha apropiación ocurra, en primera instancia por la ciudadanía, pero no sólo, sino por todas las instituciones democráticas.
Finalmente a construcción de una cultura cívica no es responsabilidad de un único actor de la vida pública, no es responsabilidad de los gobiernos sólo, no hay responsabilidad de las autoridades electorales sólo; no es una responsabilidad de los partidos políticos sólo; de los medios de comunicación sólo; no es una responsabilidad de las universidades, de los sistemas de educación, de las instancias del sistema educativo nacional, sólo; es una, también, responsabilidad de las y los ciudadanos en lo individual y en lo colectivo. Es decir, a través de las distintas formas en la que los mismos se organizan.
Yo diría que, más allá de la buena llegada a puerto y que hemos concretado, digamos, esto que estaba planteado desde el momento inicial y que nos hemos tardado, en efecto, en poder concretar, pero que resultas importante, como decía en la inauguración hace un rato. No sólo hacer un corte de caja, ver dónde estamos, retroalimentarnos, identificar buenas prácticas, multiplicarlas, cuestionarnos respecto de las mismas, identificarlas en los esfuerzos que no fueron tan exitosos o que de plano fueron fallidos en la lógica de replantearnos hacia adelante las tareas a desarrollar.
Creo que además, tiene la enorme virtud de poder, pues a nada, a 19 qué son 10 y 14 días del arranque, 15 días del arranque de las campañas electorales. Que ojalá y se conviertan en un momento privilegiado para desarrollar la cultura democrática, las campañas electorales, yo siempre lo he dicho, tienen que ser, hay que pedirles, lo que debemos pedirles, las campañas electorales son los espacios de confrontación natural de las distintas fuerzas políticas y de todos aquellos que buscan el voto público, que disputan el poder, nunca antes hemos tenido una disputa por el poder tan grande como la que vamos a ver. Así que las campañas que estén tan ríspidas e intensas como sea necesario, pero ojalá tan, digamos propositivas y exigentes como sea posible.
Los problemas del país, lo he dicho, los conocemos, la ponderación de cada uno de estos problemas por las distintas fuerzas políticas es como debe de ser, eventualmente distinto, para eso tenemos, para eso es el pluralismo, para que los diagnósticos, las soluciones, la identificación misma de los problemas goza, digámoslo así, de este abanico que el espectro político de una sociedad supone. Pero el dos de julio esos problemas van a estar ahí.
El dos de julio tenemos un desafío como sociedad, porque ese día las empresas van a abrir, las fuentes de trabajo van a abrir, los mercados van a abrir. Por cierto, por eso, entre otras cosas, porque la paz pública y ese es el gran desafío que tenemos todos los que organizamos elecciones, los que hacen las elecciones, los que son los protagonistas de las elecciones, tenemos como compromiso democrático; es decir, que la paz pública esté ahí el día después de las elecciones.
Las elecciones no son la ausencia de conflictos, ya que anda muy teórico el Secretario Ejecutivo, me dejó la vara alta, ya no sabía me decía si, bueno salió Hobbesiano, pero salió Churchiliano. Bueno, permítanme ahora Popperiano, no.
Las elecciones no significan ausencia de conflictos, es natural que una sociedad plural tenga los conflictos y las diferencias y opiniones que el propio pluralismo político trae consigo. De lo que se trata, lo que hace democráticas las elecciones, es que estas se conviertan en el cauce legal e institucional para procesar pacíficamente los conflictos, y recrear sin derramamientos de sangres, el poder político. Ese es el desafío que todos tenemos como corresponsables de la conducción democrática.
Y el día siguiente, tenemos la obligación de que la paz pública perdure, porque nuestros problemas, los grandes problemas nacionales van a estar ahí, van a seguir estando ahí. Y no le toca ni a los académicos, ni a los funcionarios públicos hacer futurismo ni previsiones.
Pero si uno atiende a lo que ha ocurrido en los últimos 20 años, es muy probable que quien gane, y en una contienda como la que tenemos hoy enfrente, por cierto, eso de ganar es algo relativo, porque en una democracia nadie gana todo, ni nadie pierde todo, y ello no ocurre de una vez y para siempre.
Quien gane seguramente quien gane la Presidencia pues, quien gane las gubernaturas que están en disputa, quien gane las presidencias municipales que estarán en juego seguramente carecerá de mayorías, no lo sé, eso lo definirán los ciudadanos, pero en los últimos 20 años si algo ha caracterizado el panorama político mexicano es que ninguna fuerza política ha contado a priori con mayorías.
Y el desafío que va a tener quien gane, es convivir con esa pluralidad y gobernar construyendo mayorías. Que ojalá sean tan amplias como sea posible y tan estables como se pueda.
Pero esa es la realidad del país y de eso depende que se resuelvan y que se atiendan los problemas nacionales. Y de eso depende que la desafección con los gobiernos democráticos, que no es un fenómeno mexicano sino global, efectivamente pueda disminuirse.
El problema de nuestra democracia no es, creo yo, un problema tanto de la recreación democrática del poder, sino de la efectividad de los gobiernos emanados de la democracia, así en plural, para resolver los grandes problemas nacionales.
Dicho eso, yo creo que la ENCCÍVICA, y este es un buen momento para plantearlo hacia futuro, ya no es, este es el momento ya no de decir qué hemos hecho y cómo lo hemos hecho, ya lo hicimos, sino de cómo nos planteamos hacia delante.
Creo que la ENCCÍVICA no tiene que estar siendo pensada solamente de aquí a 25 años o hasta que se acabe la cobertura y eventualmente sea renovada en 2023, sino que tiene que ser pensada también en la lógica de que los largos plazos están llenos de pequeños, de medianos y cortos plazos.
Y tenemos un corto plazo que también es una ventana de oportunidad inédita, que son justamente los meses por venir, las semanas por venir, y que estarán marcadas por las contiendas electorales.
No hemos querido insertarlo, aunque forma parte de la propia ENCCÍVICA, y esto lo hemos comentado con el propio comité, pero creo que a estas alturas ya está suficientemente maduro para mencionar, para anunciar que el próximo mes hemos logrado con la convergencia con distintas universidades la realización de una serie de foros de diálogo, de diagnóstico.
Aprovecho a la representación de los partidos para que de una vez lo vayan comentando con los presidentes de los mismos, aquí está Luis.
Primero en el ámbito de la Universidad Nacional, en donde a lo largo de tres días estaremos desarrollando INE y UNAM tres jornadas de análisis sobre seis grandes ejes temáticos, en donde la idea es que las coaliciones electorales, eventualmente los representantes de la, o los, o el candidato independiente que eventualmente esté en la boleta presidencial, puedan discutir con la academia las plataformas electorales.
Y ayer justamente tuve una reunión con la ANUIES en donde la ANUIES detonará en los días posteriores, siempre en el mes de abril, análisis temáticos también de contraste de las plataformas electorales en el ámbito de sus seis sedes regionales, universitarias, por supuesto, más la sede de Nuevo León.
Y la invitación a ustedes titulares de los organismos públicos locales electorales es que, en coordinación con nuestras delegaciones se sumen a ese análisis, debate y discusión, que no busca otra cosa sino complementar el diálogo, para utilizar términos de la ENCCÍVICA, que tienen que existir durante las campañas electorales, y que es complementario a los mensajes breves, marcados muchas veces por una dinámica distinta que no de la propuesta, digámoslo así, orgánica, para decirlo de alguna manera, que son los spots, que son complementarios a los debates que estaremos organizando las distintas autoridades electorales, y eventualmente universidades y medios de comunicación y que tiene que ver con la discusión programática.
Tenemos una ventana de oportunidad en el marco de la ENCCÍVICA de que estos tres meses de campañas electorales, unos más, unos menos, en el ámbito local en todo caso, se convierta en un espacio privilegiado de discusión programática y no solamente de confrontación de candidatos, lemas, jingles, o lo que sea, mensajes breves.
Creo que es la mejor contribución que podemos hacer en el marco de la ENCCÍVICA en el corto plazo a un proyecto de largo aliento. Tenemos una oportunidad todos, partidos y autoridades electorales, y ahora universidades, para revertir esa idea, que en ocasiones yo mismo he sostenido, de que por desgracia la lógica pragmática, y que vuelvo a insistir, no se puede obviar, es natural que exista, pero que en ocasiones prevalece en las contiendas electorales; haga de las plataformas electorales prácticamente un requisito del que depende la postulación de candidatos.
Quien no presente plataforma electoral no puede registrar candidatos y tenemos la oportunidad de reivindicar el contenido de las propias plataformas, que quien las vea podrá constatar a través de ellas la inmensa y rica pluralidad ideológica y política que existe en nuestro sistema de partidos, frente al lugar común de que todos son lo mismo.
Y creo que esa es la mejor manera, insisto, que en el marco de la ENCCÍVICA podemos, digámoslo así, reivindicar y fortalecer el proceso democrático que nos viene encima y del que vamos a sobrevivir, pero para sobrevivir hay que asumirlo éste, el desafío de las elecciones, como una tarea colectiva, y que implica responsabilidades de todos. Responsabilidades que hay en ciertos temas, como éstos que mencionamos, convergencia, y creo que eso es lo que hay que enfatizar.
Muchísimas gracias a todas y todos.
Versión estenográfica de la intervención del Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, en la Clausura de la Reunión el Seguimiento y la Gobernanza de la ENCCÍVICA
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