Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Buenas tardes tengan todas y todos.
Gracias por acompañarnos.
Mi nombre es Alejandro Carrasco Sampedro, soy Consejero Electoral del Instituto Estatal Electoral del Estado de Oaxaca, y agradezco la invitación para estar esta tarde moderando la presentación editorial Conferencias Magistrales: la educación para la paz, motor para la democracia.
Este texto muy interesante, acerca de un tema de actualidad, para el cual, en primer lugar, voy a presentar a las personalidades que hoy nos acompañan.
Por supuesto, nos acompaña el Doctor Pablo Romo, para comentar acerca de la misma.
Brevemente para presentar al Doctor Pablo Romo, mencionar que es especialista en derechos humanos, construcción de paz y transformación de conflictos; es Doctor en Derechos Humanos por la UNED España; Maestro en Teología por la Universidad de Friburgo Suiza; y Licenciado en Filosofía.
Presidió el Consejo Consultivo de Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas; es autor de libros y artículos sobre derechos humanos y construcción de paz, publicados por editoriales académicas como Tirant Lo blanch.
Participó como asesor en procesos de diálogo vinculados a EZLN y formó parte de la Comisión Nacional de Intermediación.
Bienvenido, Doctor Pablo Romo.
Conferencista, Pablo Romo Cedano: Muchísimas gracias; muchas gracias.
En primer lugar, quiero agradecer al INE y a quienes han hecho posible la publicación de este volumen, es un volumen que aún está virtual, por eso lo traigo aquí, este porque lo diseñó para que lo puedan ver, seguramente va a haber un QR para que lo puedan bajar en su debido momento, viene en camino el impreso, parece que se detuvo por ahí en alguno de los bloqueos.
Antes que nada, quisiera empezar mi presentación haciendo un homenaje a una querida amiga y luchadora, defensora de los derechos humanos y buscadora de la paz, buscando a los familiares de los desaparecidos, me refiero a Blanca Martínez Bustillo, que falleció hace unos cuantos días y que está muy presente en la lucha por la verdad, por la justicia.
Quiero que nos pongamos un momento de pie en honor a Blanca Martínez.
Muchísimas gracias.
Creo que la memoria construye, nos construye paz también y la memoria de personas, en este caso una mujer que ha luchado por la justicia, por los derechos humanos y por la paz, es fundamental mantenerla viva y presente.
Presentamos el día de hoy un libro pequeño, un pequeño libro sobre educación para la paz. Este libro contiene de una manera muy sencilla pensado, lo escribí pensando en personas que están poco familiarizadas con el tema de la paz y particularmente dirigido a quienes en sus liderazgos locales necesitan herramientas para poder reflexionar y hacer posible la paz.
En primer lugar, hago una reflexión sobre lo que significa el concepto de paz y hago una breve evolución de este caminar de la paz, la paz como un anhelo, como un horizonte, como parte de una agenda política, como parte de una agenda social y como un camino a alcanzar más que una meta lograda.
En este sentido voy presentando diferentes autoras y autores quienes han luchado y trabajado por la paz, quienes desde diferentes ámbitos van acercándose a tratar de pergeñar lo que va a significar el concepto y sobre todo el anhelo de paz.
Ahí vamos a ver nosotros luchadoras como por ejemplo Bertha Von Suttner, quien es una de las pioneras en el desarme, trabajando contra la proliferación de armas. Estamos hablando de finales del siglo XIX, principios del XX. Esto me parece fundamental cuando vemos a Ebrard hoy luchando en Estados Unidos para detener el tráfico de armas, pues hay antecedentes fundamentales de este pequeño aspecto de la construcción de la paz.
Paso y repaso diferentes autores, uno de mis favoritos es Thoreau, (fallas de transmisión) Rehusarse a participar en la guerra de intervención en México. Hoy al borde de intervencionismos como el que estamos viendo en Venezuela, hoy es significativo ver a Thoreau, lo meten a la cárcel, es un tipo extraordinario que con acciones no violentas busca transformar situaciones de grandes violencias.
¿Por qué es pertinente hoy hablar de educación para la paz? Este es un componente, este componente de educación para la paz es uno de los componentes de la construcción de un camino de paz mucho más amplio y cuando hago referencia en mi libro sobre esto, estoy haciendo referencia particularmente recuperando la intuición que tiene Federico Mayor sobre el tema de educación para la paz en la UNESCO y ahí desarrollo y seguramente van a comentarlo algo que son especialistas en el tema, 10 pequeños puntos sobre lo que va a significar la construcción de paz, la construcción de búsqueda de consensos.
Y me quedo con algo de la sesión pasada. En las acciones afirmativas decía el Consejero Arturo, quien decía algo muy interesante: “No se puede construir democracia en la desigualdad”.
Es muy interesante esto, la igualdad es fundamento sine qua non, se construye democracia y decía: “Uno de los grandes temas a tratar en la desigualdad no es solamente las poblaciones vulnerables indígenas, de la comunidad LGBTI, etcétera”. Él decía algo que me dejó perplejo, dice: “Es la pobreza”.
Es decir, en el fondo no podemos nosotros construir democracia y por tanto paz, si no podemos nosotros descubrir en la igualdad, en la otredad, en esta otredad que me da respuesta a mí, pero al mismo tiempo me genera una relación de igual a igual, un proceso de paz.
No podemos nosotros construir este camino y estos escalones que van a ir conduciéndonos a la paz de no ser por, ir eliminando este tipo de acciones, este tipo que nos hacen diferentes, que afirman las cuestiones de las diferencias más que de acercarnos y aproximarnos.
Quiero concluir simplemente para que invitarlos a que lean este libro, no porque es mío, claro que sí, ¿verdad? por qué no, pero fundamentalmente, por qué no Martín, pero y además va a ser gratis y es accesible para todos por aquí al menos, sino fundamentalmente porque creo que es un punto de partida para reflexiones más amplias sobre cómo construir paz hoy.
Este documento, este pequeño documento, es una cosa muy pequeña, puede ser un buen pretexto para ir generando discusiones más amplias en un país que se cae a pedazos, un país que está en una, fragilizado profundamente y herido por las violencias y particularmente por este tipo de expresiones desesperadas de violencia que va eliminando a las personas, que va desapareciendo, como lo que hacíamos nosotros al conmemorar y recordar aquí a Blanca, a Blanquita Martínez, que da su vida junto con las familias de los desaparecidos porque aparezcan los desaparecidos.
No quiero extenderme demasiado, simplemente decir, invitarles a que lean y seguramente habrá reflexiones mucho más profundas y más serias que nos permitan ir dando pasos hacia acciones específicas y concretas para construir la paz.
Muchísimas gracias.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias, gracias, Doctor Romo.
Sin duda, muy importante reflexionar sobre la paz y creo que este texto nos puede ayudar mucho a ello, es un texto que se escribió de manera muy clara, muy precisa, de una lectura muy fácil y ahí está el QR para que lo puedan conocer, todo el catálogo que tiene el INE para que lo puedan descargar.
Vamos a presentar ahora, vamos a empezar con las personas que hoy nos acompañan para comentar sobre esta obra.
Y bueno, voy a presentar a nuestra primera comentarista. Nuestra primera comentarista es la Doctora Roselia Bustillo Marín, Magistrada Presidenta de la Sala Regional Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, abogada por la Universidad de las Américas Puebla.
Cuenta con un doctorado en Derecho Electoral por la Escuela Judicial Electoral Convención Magna cum laude, además de estudios de posgrado en Antropología Jurídica, Género y Derechos Humanos en México y España.
Ha sido Subsecretaria General de Acuerdos en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, así como profesora investigadora del Centro de Capacitación Judicial Electoral; especialista en Derechos de Pueblos Indígenas y Justicia Intercultural.
Su carrera destaca por vincular la práctica jurisdiccional con el compromiso por una democracia incluyente y parlamentaria.
Tiene 12 libros publicados.
Bienvenida, Doctora Roselia.
Por favor, adelante.
Magistrada Presidenta de la Sala Regional Xalapa, Roselia Bustillos Marín: Buenas tardes a todas, todos, todes.
Es un gusto estar aquí en el Instituto Nacional Electoral. Un gusto saludar a quienes me acompañan aquí en la mesa, al autor de este libro, a Pablo Romo, un gusto.
También al Consejero Martín Faz, un gusto también estar aquí con usted aquí en la mesa.
También con Alejandro Carrasco, mi paisano de Oaxaca, un gusto también estar aquí.
Y con Luis Rafael Montes de Oca, también un gusto.
Bueno, la verdad es que desde que me invitaron a hablar sobre este tema para mí, la educación para la paz, motor de la democracia, me parece que es un libro que tiene una raíz profunda respecto a la protección, reconocimiento de los derechos humanos de todas las personas.
Me llamó mucho la atención su libro, en el sentido que retoma ideas de los estructuralistas, los filósofos estructuralistas de finales del siglo pasado, como Emmanuel Levinas, y de ahí que viene acarreando a Foucault y Derrida también.
Y por eso quería yo empezar con eso, porque para mí fue, dije: wow, es algo que me ha apasionado desde lo que ellos han escrito y desde donde se entiende a la democracia, a la otredad, al reconocimiento de la igualdad, a todas las otras personas que tenemos que vernos de iguales y cómo viene, podríamos decir, esta democracia a la que ellos creen, a partir de estas igualdades y el reconocimiento del otro, a partir de sus propias identidades, a partir de su propia diversidad, de las diferencias culturales, cómo la democracia actualmente tiene esa, podríamos decir, una deformación en la cuestión en donde no estamos viendo eso.
Y la democracia necesita reconfigurar a partir de entender esa parte que aquí mencionas y que por eso a mí me encantó la parte en donde hablas de esas desigualdades, pero sobre todo donde citas a Emmanuel Levinas, de esa otredad, de entender que todos somos iguales y de la alteridad de esa rostredad, que él llama en su libro de la huella del otro, en donde la rostredad nos dice: es que cómo nos miramos hacia afuera, cómo nos miramos hacia el otro, y eso tiene mucho que ver con la desigualdad.
Y la cuestión que acabas de mencionar, efectivamente, esa desigualdad me parece que viene generándose desde raíz, y es lo que viene de alguna manera no pensando en una democracia, en la democracia que se viene desconfigurando en lo que tenemos actualmente.
Las violencias, el no entender, me parece, y me voy a esta cuestión de los sentimientos, porque pues al final lo que ellos escriben, porque muchos de estos estructuralistas vienen de que no eran parte del lugar de donde ellos estaban, ellos venían de, pues eran judíos muchos de ellos, de esa otredad que no fue reconocida desde sus orígenes, que muchas veces viene siendo también aquí en el Estado mexicano, la falta de reconocimiento de los orígenes de los diferentes pueblos de México, pero también de las desigualdades que se han mantenido durante varios años y el siglo pasado, podríamos decirlo, desde que se reconoce el México democrático hasta nuestras fechas, en donde este México democrático sigue sin mirar, me parece, a los sentimientos de aquellas personas o grupos de circunstancias y no solamente aquellas personas que vienen desde una circunstancia de desigualdad por su cuestión de vulnerabilidad o desventaja, por las acciones afirmativas que se hablaban ¿no? No solamente es eso, sino también las pobrezas, pero esas pobrezas no miradas hacia atrás.
Y esas pobrezas se vienen a reflejar en las violencias, en que no hemos vuelto, no hemos volteado a ver esas violencias desde su raíz, por qué las generamos en el Estado, por qué hemos, como visto, podría decirlo en un melting pot, como decían anteriormente, en esa multiculturalidad, no solamente en las culturas, sino también en que la sociedad está conformada por personas que vienen también de diferentes ámbitos de su circunstancia de vida, en su educación de diferentes formas.
La educación en México también es una desigualdad y que esa desigualdad se refleja en las violencias y esa violencia se refleja en una democracia que no refleja esa paz. ¿Por qué? Porque hay educación en México en donde las escuelas, desde los lugares más paupérrimos, que te pueden reflejar, que tienen el mismo nivel de, podríamos decir, de educación que la África subsahariana, ¿no? En donde la educación viene dada en una misma escuela, que no tienen las mismas infraestructuras que una escuela privada, por ejemplo, la Ciudad de México, y que esa escuela viene dada a partir de, en la misma aula están tomando clases niñas y niños que tienen clases de segundo grado, cuarto grado, sexto grado, con el mismo maestro en el mismo lugar.
Y eso también se está reflejando en las desigualdades, no solamente los padres salen, las madres salen, muchos padres ya no están, están ausentes, muchos migrando hacia, si hablamos del sureste, hacia el norte del país, y muchos otros al otro lado del país, dejan familias ausentes con solo madres que tienen que mantener a las familias, a sus hijos, a sus hijas, y eso va generando también que en la sociedad hemos reflejado, que hemos perdido que el ser personas con estos reconocimientos, con este respeto, no solo tolerancia, que también lo tomas aquí, sino también el respeto y reconocimiento que es un nivel mucho más allá que la tolerancia, que veamos que ya no valemos desde pequeños y desde pequeñas por el hecho de ser personas, sino valemos por lo que tenemos y esa cuestión de que valemos por lo que tenemos, el tener que, el querer tener lo que tenemos rápidamente genera las violencias.
Se viene esa raíz de tener, tener lo que tenemos rápidamente genera las violencias y esas violencias, no solamente violencia intrafamiliar, la violencia política de género que en Sala Xalapa la estamos viendo y es la Sala que más recibe casos de violencia política de género por el sureste, y ahora sobre todo porque tenemos elecciones sobre sistemas normativos indígenas en Oaxaca y que nos están llegando, la mayoría son por violencia política de género; no solamente ese tipo de violencia, sino la violencia política a secas.
Cuántas mujeres y cuántos hombres han sido violentados y asesinados en las elecciones pasadas también, en Oaxaca también, Michoacán no se diga y en otros más, en donde… También Guerrero, entonces también eso se viene, podríamos decir, cotidianizando, que ya no estamos volteándolo a ver, porque (Falla de transmisión) falta de educación, esa educación que no hemos volteado a ver hacia dónde está generando las violencias.
Y a mí me parece que este libro tendría que hacerse más choncho, así, tendría que decir muchísimas más cosas, porque realmente aquí hay una parte en donde cómo llegar a ésta, y no me voy a ir mucho más del tiempo que tengo, pero esta educación para la paz cómo generarla, si esos contextos se están dando.
Yo diría dos, tres cosas para poder terminar, la primera es reconocer que en México tenemos una desigualdad que ya todo mundo lo sabe y siempre nos lo repetimos en los discursos, pero si nos vamos a la realidad, esa desigualdad viene desde las escuelas, viene desde esa educación, tenemos que educar para la paz, pero no solamente decirlo así, sino que tenemos que voltear a ver la infraestructura, las maestras y los maestros, las condiciones en que las niñas y los niños lo están haciendo.
Es que desde ahí viene la educación cívica que se convertirá en esa democracia de entender que todos somos iguales y que todos podemos tener todo, pero a partir del respeto y el reconocimiento de todas y todos.
La segunda es parte de lo que dice aquí el autor, también es el perdón y la reconciliación como un medio capaz de sanar rencores, pero es que esos rencores vienen desde esa desigualdad en donde no todavía, y me parece y con mi personal opinión, todavía no logramos aterrizar cómo lograrla en este país, no logramos todavía aterrizarla y decir cómo y de qué forma podemos ver las realidades que se dan desde lo más profundo, como dijera Bonfil Batalla, lo más profundo del México profundo.
Y también, por otra parte a las autoridades, pues el INE, reconozco al INE por este libro y a quienes nos corresponde desde donde estamos, voltear a ver cómo no solamente desde las sentencias o las autoridades administrativas, sino cómo puede ser éste un motor de la democracia, no solamente en las elecciones, sino cómo impulsar esa reconciliación a partir de la educación cívica, de esa educación en donde todas y todas las personas podamos decidir, podamos decir no solamente ya desde una parte adulta, sino desde las niñas y los niños, porque eso viene desde allá.
Y esa educación para la paz, con esto termino, viene desde quienes creemos en los derechos humanos, en las defensoras y en los defensores de los derechos humanos, quienes han dado su vida, porque esa creencia hay que voltearla a ver desde las instituciones.
No podemos voltear no a ver a las instituciones, porque tenemos que ser aliadas de las defensoras y los defensores que sí creen en esa reconciliación para la paz, y quienes hemos crecido en buscar el reconocimiento de las otras personas desde una igualdad, nos toca esa tarea desde las instituciones entender que quienes vienen hacia nosotros, tenemos que verlas, como esas otredades que nos han escrito esos estructuralistas, por eso lo dije al principio, que nos han dejado entender que tenemos que deconstruirnos y entender que hay otras realidades que tenemos que voltear a ver.
Muchas gracias, gracias.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias, Maestra Roselia.
Bueno, la Maestra Roselia nos habló un poco acerca de la otredad, de los estructuralistas que se cita también en el libro, en esta publicación, y obviamente del impacto que tiene, que no se consolide una educación para la paz, y que, por ejemplo, en el caso del estado Oaxaca sí llega a alcanzar estos fenómenos lamentables de los casos de violencia política contra las mujeres en razón de género.
En Oaxaca tenemos 418 municipios de sistemas normativos indígenas y 152 del sistema de partidos políticos, y obviamente por eso muchos de los casos que llegan a la Sala Xalapa también tienen que ver con este fenómeno.
Y a partir de este texto podemos también resignificar, decía, el sistema para construir una democracia, que tiene que ver con una educación para la paz.
Bien, vamos a presentar ahora a nuestro siguiente comentarista, que es el Doctor Luis Rafael Montes de Oca Valadez, es abogado por la Universidad de Guadalajara, especialista en Derecho Administrativo y especialista en derecho del desarrollo urbano y turístico por la Universidad Panamericana; Maestro en Derecho Público por la Universidad Panamericana; Maestro en Derecho Electoral por el Instituto Prisciliano Sánchez del Tribunal Electoral del Poder Judicial del estado de Jalisco y Doctor en Derecho Electoral por el Instituto de Investigaciones y Capacitación Electoral.
En el ámbito del servicio público, principalmente en la materia electoral, con una trayectoria de más de 20 años, fue abogado, director jurídico, director general y secretario ejecutivo del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Jalisco.
Actualmente es Director y Profesor investigador del Instituto de Investigaciones y Capacitación Electoral del Tribunal Electoral del estado de Jalisco; es Director de la revista especializada en derecho electoral: Justicia y Sufragio; y es profesor en el TEC de Monterrey.
Bienvenido, Doctor, y, por favor adelante con el comentario sobre esta publicación.
Director y Profesor investigador del Instituto de Investigaciones y Capacitación Electoral del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco, Luis Rafael Montes de Oca Valadez: Muchas gracias, primero que nada, agradezco mucho la invitación al Instituto Nacional Electoral.
Para mí es un gusto compartir este espacio con los compañeros que me han antecedido y los que acompañamos en esta mesa.
Y es un honor, de alguna manera, participar en esta presentación de libro, donde en este stand del Instituto Nacional Electoral, que es una institución que ha entendido que la democracia no solo se protege en las urnas, sino que también es parte de la función que se tiene que hacer, que es la cultura de la educación y la construcción cotidiana de la paz.
En este evento, este libro de alguna manera o a través de este libro también el Instituto hace una apuesta estratégica, igual que el autor, que es fortalecer la cultura cívica que no sea meramente procedimental sino que asuma la paz, la dignidad, la igualdad y los derechos humanos como condiciones indispensables para una vida democrática.
Y bueno, quisiera compartir algunas reflexiones de este gran libro que creo que es indispensable conocerlo y que plantea algunos elementos que son de suma importancia para lo que es la democracia y las instituciones como tal.
El libro, el autor abre en su trabajo recordándonos algunos datos de la UNESCO para empezar, incluso, con la frase pues de que “las guerras, así como la paz, se construye desde la mente de las personas” y esa afirmación marca el sentido principal del libro. La violencia no solo es un fenómeno penal o militar, sino que también es cultural, estructural, simbólica y política.
México vive una situación de violencia que todos conocemos que se ha vuelto, como lo decía la Magistrada, pues un horizonte cotidiano ya en el día a día.
Las cifras que se manifiestan incluso en la presentación del libro son contundentes. Cuando nos dice que en 2021 el 70 por ciento de las mujeres de 15 años o más han sufrido algún tipo de violencia. En 2023 donde se registraron más de 30 mil 500 homicidios y 170 asesinatos de actores políticos. Son números alarmantes.
Y bueno, pues estos datos importan no solo por la gravedad para las personas sino también porque la violencia es incompatible con la democracia tal cual, como lo han dicho ya también en los comentarios, una sociedad donde la vida es amenazada constantemente, donde la impunidad es la regla, pues donde el miedo cotidiano a la participación pues es una sociedad en la que la democracia se erosiona paulatinamente.
Y bueno, pues por ello la gran importancia de este libro y de lo que ahí se plasma, de recordarnos que la educación para la paz no es un lujo ni un tema accesorio sino es una política pública o debe de ser una política pública estructural que afecta directamente la posibilidad de una democracia viva, deliberativa y plural.
Y, bueno, pues el libro pues como lo dijo también hace rato el autor pues ofrece un recorrido histórico, muy valioso, de la evolución de la educación para la paz desde sus inicios hasta llegar a un concepto que es la paz positiva, donde ya aborda no sólo la ausencia de guerra sino la acción, una acción transformadora de cambios estructurales en este concepto y la vida cotidiana en muchos sectores.
Y, bueno, esta distinción que el autor Romo expone con claridad pues es fundamental para comprender que la democracia necesita más que elecciones, necesita igualdad, necesita justicia y necesita una ciudadanía crítica e informada para eso y, bueno, y eso no solo se construye desde procesos educativos prolongados, se construye desde procesos educativos prolongados, sostenidos y además interinstitucionales.
El corazón del libro, desde mi opinión, se encuentra en un capítulo donde el autor presenta 10 elementos sustantivos, indispensables para lo que fuera un programa nacional de educación para la paz, de los cuales me voy a referir solamente a algunos, para ser breve también la exposición.
El primero que destaca, y que creo que también es de suma relevancia, es la necesidad de una formación en la gestión pacífica de los conflictos; una gestión, una formación que se genere en las instituciones educativas, principalmente de enseñar a los niños desde la más temprana edad que el conflicto es parte de la vida humana.
En sociedad obviamente habrá cuestiones que no estemos de acuerdo y es parte natural del ser humano también el conflicto. Y eso no tiene nada de malo, sino que, al contrario, el tema es entenderlo así y aprender que hay herramientas para resolver esa parte natural del ser humano, para resolver esos conflictos de la forma pacífica.
Y ésa incluso es la base de algunas de las figuras que han nacido, como son los mecanismos alternos de solución de conflictos ya en la actualidad.
Y, bueno, al final, otro de los puntos indispensables que se destacan es la centralidad de este concepto en los derechos humanos.
Como ustedes lo saben, a partir de 2011 una reforma constitucional que puso a los derechos humanos como la piedra angular de todo el sistema político y jurídico y, por consecuencia, como personas, como seres humanos en sociedad, pues de la sociedad también.
Y eso hay que entenderlo, es necesario educar, difundir, como son parte de los deberes y obligaciones del Estado mexicano, en cualquier tipo de autoridades que formen parte del Estado mexicano, dar a conocer cuáles son los derechos humanos, que comprenda la ciudadanía en qué consisten esos derechos, cuáles son sus alcances, cuáles son las instituciones y las herramientas jurídicas para resolver cualquier violación de derechos fundamentales.
Eso también es indispensable y lo destaca el autor con mucha claridad en este libro.
Un tercer punto que también es de relevancia es hablar de una educación para la paz, incluyente y de equidad. Y parte también de números, donde nos dice que la riqueza en nuestro país está concentrada en el uno por ciento de la población.
Y eso es algo que nosotros sabemos, pero que evidencia desigualdades sustantivas que tenemos en nuestra sociedad; además de las que ya comentaron, como son las que por educación, además de cuestiones económicas, por educación, por cuestiones de las comunidades indígenas, que al mismo tiempo sufren varios de esos aspectos de esa discriminación o desigualdad que tiene nuestra sociedad para con estas culturas, que son parte de nosotros, son parte de la ciudadanía mexicana, pero también para muchos otros sectores de la sociedad.
Entender que hay desigualdades, pero que tenemos un derecho a la igualdad en la consideración de derechos y libertades, como parte también de los derechos humanos, es esencial hacerla entender.
Y con base en eso, generar programas de educación para la paz, pero con esa perspectiva incluyente y basados en ese principio de igualdad y de no discriminación que tiene nuestra misma Carta Magna, que es el punto de partida de todo el sistema democrático de nuestro país.
Un cuarto punto que también es de destacar desde mi perspectiva, todos son destacables, pero creo que vale la pena hacer énfasis en éstos, es que es necesario empoderar a las comunidades y a los aspectos locales; esto es, que las mismas comunidades tengan los elementos, conozcan las herramientas para resolver por sí mismos, desde ahí mismo, sus conflictos. Eso es indispensable y es una propuesta que a mí me encanta.
Creo que, si las mismas comunidades pudieran tener estos elementos y pudieran resolver, en consecuencia, sus diferencias, definitivamente ahorrarían mucho de lo que es el engranaje y el accionar de herramientas jurídicas, deteniéndolas desde un punto de vista de construcción de la paz directamente.
Y eso también es indispensable.
Hay muchos más elementos que destacan, son 10 los puntos centrales en los que basa la propuesta de este libro, pero creo que el punto de partida es la educación. La educación es transformadora y si nosotros entendemos que la educación es una herramienta de transformación y que una comunidad, una sociedad educada, implica una sociedad informada y preparada para entender cómo funciona la misma sociedad, cómo funciona el Estado y cómo resolver de mejor manera sus conflictos.
Son elementos de verdad a destacar y que aplaudo que el Instituto Nacional Electoral promueva estas ediciones de una obra sustantiva, que sí debe de decir muchas cosas y creo que tendría que generarse alguna nueva propuesta de continuidad de este libro, pero a mí me gusta que este libro en pocas páginas diga tantas cosas, y eso también es un reconocimiento que hay que destacar.
Bueno, agradezco mucho a todas y todos su atención. Gracias.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias, Maestro Montes de Oca, por estos comentarios que complementan acerca de esta publicación y que se mencionaba, es de muy fácil lectura y eso también implica un gran desafío hacer esta síntesis.
Y mencionaba también acerca del corazón de esta publicación, que es esta serie de propuestas que hace el Doctor Romo, para conseguirlo, y que creo que son muy importantes en los tiempos que mencionaba, tomando en cuenta el dato de violencia e impunidad que es generalizado.
Entonces, es muy importante hacer estas discusiones, y hace una invitación también a que puedan conocer esta publicación que es gratuita y que está publicada por el Instituto Nacional Electoral, insisto, tienen el QR para la descarga, pero también en el portal del INE lo pueden hacer.
Bien, vamos a presentar ahora a nuestro último comentarista, es el Maestro Martín Faz Mora, Consejero Electoral del Instituto Nacional Electoral desde 2020, es Licenciado en Filosofía con Maestría en Derechos Humanos y Democracia por FLACSO México; fue fundador del Centro Potosino de Derechos Humanos y primer Secretario Técnico de la Red Nacional Todos los Derechos para Todas y Todos.
En el ámbito electoral ha sido Consejero Local del IFE y Consejero Electoral en el OPL de San Luis Potosí.
Actualmente preside la Comisión de Organización Electoral del INE.
Su trayectoria combina activismo por los derechos humanos, formación académica y compromiso institucional con la equidad y la legalidad electoral.
Maestro Martín, por favor. Bienvenido.
Consejero del INE, José Martín Fernando Faz Mora: Qué tal. Buenas tardes. Bienvenidos, bienvenidas al stand del Instituto Nacional Electoral.
Es para mí un gusto estar en esta presentación, tanto por la temática como también por su autor, Pablo Romo, a quien tengo el gusto de conocer de hace muchos años, y también por compartirlo con quienes estamos integrando la mesa.
El libro existe físicamente también, pero hubo un problema de logística, el libro está por llegar, es probable que quizás para cuando terminemos este espacio no esté todavía, porque se atoró en que se mandó, la línea aérea creo que lo mandó a otro lado, entonces bueno, son las cosas que pasan. Confío en que hoy que hay venta nocturna en la FIL y que va a estar abierto hasta las 12 de la noche, quizás hacia alrededor de las 8 de la noche ya tengamos el libro en físico, esperemos, esperemos que así sea. Si no, es verdad y es cierto, como ya lo han dicho, el libro se puede consultar de manera digital, pero físicamente esperemos tenerlo por un problema de logística fue que no lo tuvimos ahora.
Este libro nace de una conferencia, de hecho tenemos una serie, de las distintas colecciones del sello editorial INE hay una que tiene que ver con conferencias, a donde invitamos a especialistas para diversos temas vinculados con la democracia y es justo el caso, es precisamente por eso que el libro tiene ese tono tan coloquial, porque de hecho es un libro que nace de una conferencia y todas nuestras conferencias luego se convierten en un texto y eso le da esa enorme ventaja de ser algo justo coloquial, que permite que no sea un texto pesado, sin embargo, eso no significa que no sea un texto sólido, porque como efectivamente ya lo han dicho quienes me han antecedido en el uso de la voz, de hecho durante el libro se hace un recorrido amplio sobre lo que es la cultura de la paz y cuál es su desarrollo histórico y también sus fundamentos filosóficos, entre otros.
Yo creo que una de las cosas –mis anotaciones las traigo aquí, no crean que estoy chateando– una de las conclusiones a las que uno llega al leer este libro, es como una especie de conclusión, creo yo, inevitable, aunque no esté expresamente dicha en el libro, es que la democracia no puede entenderse sin la erradicación de las violencias y que una democracia que no ayude o pueda prevenir y erradicar las violencias, no es una democracia genuina, auténtica y plena, es una de las conclusiones a las que uno llega cuando ¿qué relación tiene la cultura de la paz con la democracia? pues esa, que las democracias tienen que ser capaces de prevenir y erradicar las violencias, y digo las democracias y no solo los procesos electorales, porque uno podría decir “bueno, entonces el INE es a lo que se dedica, a hacer procesos electorales”, pues sí, fundamentalmente esa es la misión que tiene el INE, pero por fortuna la democracia es mucho más que los procesos electorales.
Evidentemente, sin procesos electorales genuinos y auténticos, pues no hay democracia, es la puerta de entrada, pero así como una de las conclusiones a las que uno llega con la lectura de este libro es que si la democracia no ayuda a la prevención y a la erradicación de las violencias.
Otra de las reflexiones también a las que nos puede llevar es, peor aún, si las violencias delinean por la vía electoral los procesos democráticos, entonces estamos perdidos y desafortunadamente tenemos datos que apuntan hacia allá; es decir, no se trata sólo de que la democracia y las instituciones democráticas, cada quien desde su espacio (Falla de transmisión) la prevención y la erradicación de las distintas violencias, sino que también tenemos que estar bien atentos a que no sean esas violencias las que configuren las democracias, que creo que no podrían llamarse democracias si son configuradas por la violencia.
Pero el hecho real es que, en muchas ocasiones, y ya lo hemos vivido en nuestro país, que la violencia condiciona incluso los procesos electorales.
El asesinato de candidaturas te condiciona el proceso electoral, el asesinato de precandidatos, precandidatas te condiciona el proceso electoral, o bien ciertas formas de violencia, por ejemplo, en la elección judicial, para no irnos tan lejos, en el estado de Chiapas, por ejemplo, tuvimos algunos fenómenos, no de violencia de que quitaran la casilla y eso, sino de presiones sobre algunas autoridades electorales, particularmente consejos distritales, para que se tomaran en cuenta boletas que, por ejemplo, no habían sido dobladas, lo que se conoce como las boletas planchadas, es decir, boletas que fueron llenadas por alguien y que las metieron de manera irregular en las casillas y, sin embargo, había una presión que se estaba ejerciendo sobre quienes estaban realizando los cómputos, que eran las consejerías distritales, para que se consideraran ese tipo de boletas.
Entonces también es importante reflexionar porque, como lo han dicho, nuestro país está cruzado por infinidad de violencias, de todo tipo, y no son violencias menores.
Y el término, porque no es violencia nada más, sino son las violencias. Hay muchas formas de violencias y, sin embargo, cuando se habla de paz, pues sí se habla sólo de un elemento, que es la paz.
Las violencias, en cambio, son muchas. Y es por eso que la educación para la paz tiene que tener también mucha claridad respecto del diagnóstico de las violencias. Y es algo en lo que también el libro lo señala.
Si bien, dada la naturaleza del mismo y que es resultado de una conferencia y que es de manera coloquial, no hace todo un diagnóstico de las distintas violencias, pero sí habla de los distintos tipos de violencias específicas que asolan a nuestro país.
Y un elemento fundamental, que creo yo que el libro también nos conduce, es que la clave hermenéutica de la paz, pero también de los derechos humanos y de las democracias, deben ser las víctimas de las violencias, particularmente las de las violencias criminales, y como centro, muy particularmente, el de las personas desaparecidas, porque lo que no se nombra, se invisibiliza.
Y hoy tenemos una invisibilización de un montón de violencias, de muchísimas violencias, que no se nombran, que no se dicen, que no están en las narrativas, en las narrativas de los actores, porque en la realidad están y en la realidad se sufren, y están las madres buscadoras: sin embargo, no tienen espacios suficientes, no se hacen los actores institucionales y los actores políticos ecos de esas voces.
Y este elemento de considerar a las víctimas como la clave hermenéutica, no solamente para la cultura de la paz, sino también para la democracia, creo que es fundamental.
Como digo, la democracia no solo son los procesos electorales, los procesos electorales tienen un cierto carácter procedimental, procedimientos específicos para que sea a través de procesos electorales donde se manifiesta la voluntad ciudadana, para que quienes lleguen al poder representen realmente a la ciudadanía.
Sin embargo, la democracia es más que los procesos electorales; sin embargo, atravesamos tiempos en los que las violencias no solamente se han afincado de manera profunda en la cultura, en las diversas culturas en nuestro país, sino que incluso también la violencia puede tener un papel o juega ya un papel incluso en esos procesos electorales, que no están exentos de ser influenciados de manera directísima por las violencias.
Por ello, la pertinencia de que sea el Instituto Nacional Electoral el que ponga sobre la mesa el tema de la cultura de paz, porque una de las funciones que el Instituto Nacional Electoral tiene es fomentar la educación cívica, que también lo es, aunque todo mundo cuando se habla del INE, lo primero que, cuando dice uno: INE, es la credencial, traes tu INE, todo mundo lo que identifica primero es la credencial, y evidentemente la credencial tiene relación con el proceso electoral.
Pero otra atribución del Instituto Nacional Electoral es la capacitación cívica, no solo la capacitación electoral la que se le da a los funcionarios de casilla para que sepan recibir boletas, contarlas, valorar el voto para ver si es nulo o no, la educación cívica que, si no es una educación cívica para la construcción de la paz, no es educación cívica, porque la educación para la paz es un elemento fundamental en la educación cívica.
Es cierto que las capacidades que el Instituto Nacional Electoral tiene para incidir en la educación cívica tienen límites, si las escuelas, si las universidades, si las organizaciones de la sociedad civil, si las iglesias, si todos los actores sociales y, por supuesto, los políticos no participan en la construcción de una cultura de paz, será imposible alcanzarla, porque la cultura de la paz no se construye de un día para otro y menos todavía en un país en que las violencias están generando fenómenos estructurales y violencias estructurales de todo tipo, desde las violencias feminicidas, la violencia patriarcal, las violencias laborales, la violencia del crimen organizado, infinidades de violencias.
En tal sentido, gracias, Pablo, por este libro que permite esta reflexión y analizar qué hace este binomio de la educación y la cultura de la paz con la democracia.
Entonces, como les digo, el libro va a llegar retrasadito, pero va a llegar, saben que todas nuestras publicaciones son publicaciones gratuitas, no tienen ningún costo, pero además también por supuesto las pueden ver de manera digital a través de nuestra página web o también de los QR que aparecen aquí, pero el libro va a llegar va a llegar en el transcurso de la noche con la fortuna de que hoy venta nocturna, que hoy es venta nocturna, así que si se dan una vueltecita en un ratito más seguramente encontrarán el libro.
Y de nueva cuenta, Pablo, muchísimas gracias por esta reflexión y por colocar sobre la mesa este tema de la paz tan fundamental.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias, gracias Consejero Martín,
Bien, dijo muchas cosas, pero algunas de ellas tienen que ver con que la democracia tiene que generar condiciones para la educación para la paz, pero también que la violencia no debe de incidir por ejemplo en los procesos electorales y es cierto, en los procesos electorales en los que hay lamentablemente actos violentos como por ejemplo asesinatos o quema de instalaciones o de bodegas cambian el ambiente de un proceso electoral a situaciones en las que no lo hay.
Y también la necesidad de que hay muchas violencias que no están siendo nombradas por los distintos actores, pero que están sucediendo, en ese sentido reflexionar que es muy importante poner en el centro de la discusión una educación para la paz y obviamente con estas propuestas que vienen en esta publicación del Doctor Romo.
Vamos a abrir ahora un espacio para preguntas y respuestas del público, por favor, adelante, nos dicen y les acercamos el micrófono.
Pregunta: ¿Realmente nuestros políticos están conscientes de esto, profesor, la situación que estamos pasando con tanta violencia? o el INE ¿en qué parte nos ayuda precisamente? La gente mayor lo entendemos, pero a mí me inquieta mucho, perdón, la juventud que es la que está llevándose, la violencia se los está llevando para allá.
Partimos de la educación, yo lo sé, pero es una pregunta, ¿el INE en qué nos ayuda a esto? ¿qué tenemos que trabajar para crear la cultura de la paz desde la casa hasta políticamente nuestros representantes sabrán esto?
Consejero del INE, José Martín Fernando Faz Mora: Pues, bueno, ¿éste se escucha bien o se escucha mal?
Bueno, yo creo que los políticos saben perfectamente de las violencias y ¿por qué lo sé? Porque están (fallas de transmisión) entonces, pues claro que saben que hay violencias, ¿qué tan conscientes o qué tan intencionadamente quieren intervenir en estas violencias? Bueno, pues ahí sí ya no podría decir nada. Desafortunadamente sí creo que incluso hay políticos que se benefician de la violencia, eso no tengo ninguna duda.
¿El INE qué es lo que hace? Pues el INE tiene desplegado toda una Estrategia Nacional de Cultura Cívica que viene realizando desde hace muchos años y esa Estrategia Nacional de Cultura Cívica tiene entre sus elementos justo la educación para la paz.
Esta Estrategia Nacional de Cultura Cívica se concretiza con una serie de aliados, universidades, organizaciones de la sociedad civil y se dan talleres, se dan cursos, pero desde luego es limitado; es limitado, tan así decir que, por ejemplo, este libro estuvo a punto, no sólo este libro, sino todos los libros de las conferencias estuvieron a punto de no publicarse este año por el recorte presupuestal que le hicieron al INE el año pasado, que fue del 33.3 por ciento y además había elecciones del Poder Judicial, entonces fue una locura.
Y sacando ahorritos de aquí, sacando ahorritos de allá, fue que pudimos finalmente publicar algunas de las conferencias, pero no pudimos publicar otros libros, pero existe una estrategia nacional de cultura cívica que el INE despliega a lo largo y ancho de nuestras oficinas.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias.
Ah, sí, por favor, adelante, Doctor Rafael.
Director y Profesor investigador del Instituto de Investigaciones y Capacitación Electoral del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco, Luis Rafael Montes de Oca Valadez: …un punto donde creo que también es importante decirlo, que participan tanto las instituciones electorales administrativas, que son los institutos electorales que organizan los procesos electorales, como los tribunales electorales, es lo relativo a la violencia política contra las mujeres en razón de género, a través de un régimen administrativo sancionador electoral, que tiene un procedimiento especial sancionador, donde la parte primaria es la recepción de la denuncia, la integración del expediente, el desahogo de las probanzas las desarrolla el Instituto Electoral o los institutos electorales, depende el ámbito de competencia, nacional o locales y, a su vez, hay un Tribunal Electoral que resuelve con base en el expediente que se integra en esa institución.
Y eso también es importante decirlo, porque son elementos, facultades, que tienen tanto las autoridades administrativas como las judiciales, las jurisdiccionales, para abordar y contrarrestar y sancionar este tipo de violencia, que es una de las violencias que también se reflejan específicamente en la materia electoral, y que eso también sería tal vez una muy buena propuesta para un segundo ejercicio del libro, cómo al final ese tipo de violencia o cómo erradicarlo a través de la educación para la paz, que es elemental.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: ¿Alguien más desea hacer alguna…?
Pregunta: Hola, buenas tardes.
Duda, ¿cómo estas violencias que vivimos en nuestra sociedad se están reflejando y amplificando ahora en las redes sociales?
El tema de la violencia digital contra las mujeres que también está siendo un reflejo realmente de lo que estamos sufriendo de manera estructural las mujeres en nuestra sociedad.
¿Cómo empezar a combatir esas violencias, que ya no sólo es la violencia política y razón de género, la violencia digital con otro tipo de violencias que tienen que ver principalmente con el tema de las mujeres?
Gracias.
Conferencista, Pablo Romo Cedano: Rápidamente te contesto, por tiempo.
Hay otro librito que me pidieron que escribiera para la SEP y la UNESCO, y está en CONALITEG, es de la SEP, busca Pablo Romo y lo vas a encontrar; ahí vas a encontrar algunas cuestiones sobre ciberacoso, todas las cuestiones que estamos viendo como un fenómeno muy, muy cercano, sobre todo para las infancias, las adolescencias.
Yo creo que lo que está haciendo Australia es fantástico, ¿verdad?, de estar recortando el acceso a las redes, a las infancias y adolescencias.
Me parece que es interesante que se pongan a jugar mejor con las canicas o con otras cosas. Yo creo que va por ahí la cosa.
Ahí hay un librito que puedes encontrar que la SEP, hace ya tiempo, hace como unos cinco años, publiqué con UNESCO, pero creo que también el INE en la presentación de hace dos horas, se presentó justamente este tipo de temas, de grandes temas, el problema de la posverdad, estamos delante de problemas gravísimos sobre hay que creerle, a quién hay que creerle.
Y yo creo que lo que el consejero Martín está señalando, que yo pongo en mi librito es: la llave hermenéutica para poder comprender la realidad es desde el dolor y desde el sufrimiento de la víctima,
Bartolomé de las Casas hablaba del inocente, por qué sufre el inocente, y yo creo que esta es la clave fundamental con la cual, más que decir: este TikTok es verdadero o es falso, es escuchar en in situ, como dicen, en el lugar de los hechos y escuchar y acompañar a la víctima, y así la verdad, las verdades de las redes se desploman, y no por no hablar de Televisión Azteca, sino de las verdades de todas las redes en su conjunto, se van a ir desplomando en tanto vamos descubriendo: esto no puede ser verdad, esto no puede ser verdad, que estamos saliendo de la pobreza o que los niños comen bien, por Dios, eso cuando estamos cerca de ellos decimos: eso no es cierto, y es lo que nos ayuda a decir: se desploman estas fake verdades y empiezan a surgir, tú tienes llaves hermenéuticas que te van a abrir verdades fundamentales.
La gente muere antes de tiempo, decía Bartolomé de las Casas, y eso lo estamos viendo, pero está invisibilizado, visibilizar es darle realidad, por eso me parece que es importante, y generar democracia es justamente eso, hablar de las cosas invisibilizadas.
Gracias.
Magistrada Presidenta de la Sala Regional Xalapa, Roselia Bustillos Marín: Yo algo muy rápido, por las dos cuestiones que acaban de decir, respecto a la violencia política de género, la violencia digital.
A ver, me quedo con esta cuestión, cada vez hay más visibilidad de la violencia política de género y de otras violencias en la democracia, pero creo que también nos corresponde tanto a quienes estamos, quienes están en la política como quienes estamos del lado del funcionariado, visibilizar lo que realmente hay como la posverdad dentro de las redes sociales.
¿Por qué? Porque también hay que tomar en cuenta que las violencias, en el caso del derecho electoral, también están siendo utilizadas en favor de quienes quieren ganar elecciones, y creo que eso también es importante, también verlo desde el otro lado; es decir, desde dónde realmente hay una violencia a las víctimas reales y quiénes no lo son y solamente eso se puede ver, a ir al terreno y ver, al menos en los casos de las mujeres indígenas que están reportando mucha violencia política de género, ir a los lugares, pero también están llegando casos de nulidad de elección por violencia digital, por violencia política de género, y entonces nos toca a nosotros realmente creer o ver que esas redes quiénes las están poniendo y quiénes son los que están publicitando; a veces no sabemos quiénes son los que están ahí, a veces no sabemos quiénes son los que están publicitando.
Entonces, también nos toca analizarlo con lupa, analizar en el terreno, analizar quiénes son y nos tenemos un gran trabajo realmente para ver esas cuestiones.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias, Doctora.
Por cuestiones de tiempo, ¿alguna pregunta más?
Por favor.
Pregunta: Sí, gracias.
Escuchándole sobre toda esta parte de lo que no se nombra, no existe, si ya estamos conscientes de las vivencias y estamos inmersos en un sistema legal que está enfocado en el punitivismo a más no poder, ¿no es entonces momento de empezar a transitar de ese punitivismo a la construcción de instituciones y de leyes a partir de la cultura de la paz? Y si es así, ¿cómo lograrlo? Porque el consejero decía algo muy importante. ¿Pueden ser conscientes de que hay violencia? Sí, traen sus guaruras. Pero pues aquí no traemos guaruras.
Entonces, ¿cómo transitar ese esquema a un esquema en el cual ya se pueda incidir para que la construcción de una ley, una política pública, sea a partir de que existe un contexto de violencia y que ese contexto de violencia necesita pacificación? Y por más que yo quiera decir que las autoridades electorales lo pueden hacer, pues tienen, como también comentó el consejero, un margen muy acotado. Entonces, ¿cómo lograr esa transición?
Gracias.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Gracias.
Autor, Pablo Romo Cedano: Perdón, pero este se oye mejor, ¿verdad? Ah, ¿verdad? Y lo tiene el moderador, por algo será.
No, no es cierto.
Es a través de… Me parece que ciertamente hay que cambiar el paradigma de la justicia, el concepto de justicia que tenemos de la cabeza es terrible. Y es importante pasar a una justicia, una justicia que genere otro tipo de conceptos de reparación de la falta de verdad, reconstrucción del tejido social y esto es a través de mecanismos alternativos de resolución de controversias que ya existen y todo aquello que es esta justicia transicional, todo lo que llamamos en su conjunto, justicia transicional.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: ¿Alguien más?
Magistrada Presidenta de la Sala Regional Xalapa, Roselia Bustillos Marín: Algo muy… Este es el que suena, el que no… Ah, ya nos lo bajaron. Ya, ya nos vamos. Esperen dos minutos nomás.
No, es que lo que dice es que realmente es… Lo vemos en las sentencias. Las sanciones que se imponen a quienes son infractores de violencia política de género son imposibles muchas veces de cumplir. Y entonces ahí es donde estamos viendo que hay que dejar el punitivismo y hay que irnos a otro tipo de cuestiones. Y los medios alternativos de solución son un mecanismo que están ahí y que tenemos desde hace muchos años, ya está planteado para el derecho electoral, para la justicia electoral y los hemos dejado de lado.
Me parece que es importantísimo volverlos a retomar, porque sí hay que ir a la raíz, porque sancionar a alguien que ha cometido violencia política de género, eso no hace que cambie su formación, lo que trae de los roles de género desde que fue educada o educado. Y creo que esa es la parte de la raíz que tenemos que ir hacia allá para esa reconstrucción, podríamos decir, como dice Pablo, a la democracia de la paz.
Director y Profesor investigador del Instituto de Investigaciones y Capacitación Electoral del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco, Luis Rafael Montes de Oca Valadez: Creo que lo que usted comenta es completamente importante, pero creo que además esa es la propuesta del libro.
Yo de este libro incluso podría decir que salen algunas conclusiones. Una es que la educación por la paz debe ser entendida como una política de Estado, no como un proyecto de sexenio o de una administración, sino como una actividad permanente, ya como parte de la función íntegra de naturaleza del Estado.
Y que además esto tiene que ser en un ecosistema donde todas las instituciones: Instituto Nacional Electoral, los OPL, los tribunales locales y el tribunal federal, por lo menos en lo que respecta a la materia electoral, tendrían que trabajar juntos generando proyectos en conjunto y no de manera aislada, para cambiar esa perspectiva de cómo surge el tema, por ejemplo, de la educación, de la cultura cívica, democrática y entenderlo desde esa perspectiva como un proyecto en general.
Y al final, ¿la paz es posible? Claro, es posible, pero por sí sola no. Tiene que haber acciones y estas acciones son parte de lo que propone como un primer inicio que es a partir de la educación por la paz.
Consejero Presidente Provisional del IEEPCO, Alejandro Carrasco Sampedro: Bien, pues muchas gracias.
Quisiera ir cerrando este espacio, agradeciendo el honor de compartir esta mesa con el Doctor Pablo Romo Cedano, la Doctora Roselia Bustillo Marín, el Maestro Martín Faz Mora y el Doctor Luis Rafael Montes de Oca, para quienes les pido, por favor, un aplauso.
Asimismo, recordarles que más tarde llegará la versión impresa de esta publicación y que también lo pueden descargar de manera digital.
Agradecer también a ustedes el tiempo dedicado para escuchar esta importante reflexión sobre esta obra y desearles muy buena noche, a nombre del Instituto Nacional Electoral.
Muchas gracias.
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