Versión estenográfica de la reunión con mujeres indígenas, para la recepción de su propuesta, a ser entregada a la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral y al Poder Legislativo

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Audio de la recepción de propuestas de mujeres indígenas para la Reforma Electoral

Presentadora: Sean todas y todos bienvenidos a la reunión con mujeres indígenas para la recepción de su propuesta para ser entregada a la Comisión Presidencial de la reforma electoral y al Poder Legislativo. 

Preside en este evento la Secretaria Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, Doctora Claudia Arlett Espino. 

Por parte de las mujeres indígenas se encuentran presentes ciudadana Karemi Calleja Aguilar, ciudadana Martha Ramírez Galeana, ciudadana Antonia Ramírez Marcelino, ciudadana Catalina Apolinar Santiago, ciudadana Diodira Pantaleón.

Agradecemos la presencia en este evento de las y los integrantes de la Junta General Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, las y los vocales ejecutivos locales que nos acompañan de manera virtual y, de igual manera, a las mujeres indígenas que se encuentran presentes en este evento.

Para dar inicio escucharemos la intervención de la ciudadana Karemi Calleja Aguilar. 

Karemi Sayuri Calleja Aguilar: Buenas tardes a todas, a todos, a todes.

Mi nombre es Karemi Sayuri Calleja Aguilar, yo soy de Chilpancingo, Guerrero. Soy parte de la representación del pueblo afromexicano del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado de Guerrero. 

Soy una mujer orgullosamente afromexicana y mi intervención de esta tarde versa sobre la representación de los pueblos originarios y la representación afromexicana ante el Consejo General y Consejos Distritales Locales del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana considerados indígenas y afromexicanos. 

Primero, quiero hacer una remembranza de cómo surgió dentro de nuestro Instituto Electoral del Estado de Guerrero, diciéndoles que se solicitó al Instituto Electoral local que se incorporara la figura de las representaciones indígenas y afromexicanas.

Sin embargo, el Instituto Electoral Local, respetando el principio de legalidad mediante el Acuerdo 060-SE-1410/2020, manifestó la imposibilidad legal y material para incluir estas figuras en su estructura. 

En ese sentido, recurrimos ante el Tribunal Electoral Local a través del Juicio Electoral Ciudadano mediante sentencia TEE-JC-042/2020 y TEE-JC-043/2020 y acumulados. Confirmó ese acuerdo continuando con cadena impugnativa.

Recurrimos a esta resolución ante la Sala Regional de la Ciudad de México, instancia que mediante sentencia emitida en la sentencia SCM-JDC-274/2020 y acumulado, la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación revocó la resolución del Tribunal local, así como el Acuerdo 060/SE/1410/2020.

Por lo que, entre otros efectos derivados de la sentencia ya citada, el Instituto Electoral Local implementó la consulta a los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas a fin de incorporar la figura de la representación de los pueblos originarios y la representación del pueblo afromexicano ante el Consejo General del Instituto Electoral Local, como en los consejos también distritales locales con el 40 por ciento o más de la población indígena o afromexicana.

Es importante mencionar que los lineamientos y para la propia designación se realizó un calendario de actividades detallándose cada una de estas etapas implementadas para el desarrollo de las consultas de los pueblos originarios y afromexicano.

Fue así como se lograron estas representaciones que coadyuvaron y acompañaron en el ejercicio de los derechos políticos y electorales de la ciudadanía de los pueblos originarios y el pueblo afromexicano durante el Proceso Electoral Local 2023-2024.

Al respecto, ante esta gran oportunidad del diálogo con ustedes como autoridades electorales federales, consejeras y secretaría ejecutiva, a las que les reconocemos su sensibilidad, para darnos este espacio de diálogo y de incidencia en los trabajos de la Reforma Electoral Federal, las mujeres indígenas y afromexicanas nos sumamos y consideramos que la legislación federal debe incorporar los mecanismos y figuras que hagan efectivo la libre determinación y autonomía de los pueblos indígenas y el pueblo afromexicano, además de ser sujetos de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio, por lo que nosotros este día proponemos la incorporación de la representación de los pueblos y comunidades indígenas y la representación del pueblo afromexicano ante el Consejo General del INE y ante los consejos locales y distritales de este Instituto Nacional Electoral.

De manera permanente, a fin de que acompañe los trabajos con la finalidad de salvaguardar los derechos políticos electorales de la ciudadanía de los pueblos indígenas y del pueblo afromexicano.

En concordancia con esta solicitud es relevante la creación de una unidad o coordinación de sistemas normativos pluriculturales al interior del INE, que acompañe al Consejo General con un perfil idóneo y conocimiento de lo que es la cosmovisión de los pueblos indígenas y la sociología del pueblo afromexicano, esto podrá permitir hacer efectivo el derecho de la información que a través de convenios se apoye de traductores e intérpretes de las lenguas originarias, preferentemente de las variantes existentes en nuestro país, esto para generar material informativo que fortalezca la comunicación efectiva con información culturalmente adecuada.

Compañeras y compañeros indígenas y afromexicanos, nuestra voz cuenta y nuestra historia importa.

Muchas gracias.

Presentadora: Muchísimas gracias.

A continuación, cedemos el uso de la voz a la Ciudadana Martha Ramírez Galeana. 

Martha Ramírez Galeana: (Intervención en lengua indígena) 

Saludarles a todas y a todos, en especial a la Doctora Claudia Arlett Espino por abrir este espacio y esta plataforma a las mujeres indígenas de este México profundo.

Nos sentimos enormemente orgullosas de estar en este espacio y poder ser voz de nuestras abuelas, aquellas abuelas que murieron sin haber ejercido el derecho al voto, aquellas abuelas que fueron oprimidas por no poder ejercer ese derecho pleno y libre. 

En memoria de esas abuelas, hoy compartimos en esta plataforma la importancia de la auto adscripción calificada.

El ser indígena pareciera que es una tendencia y una moda a nivel nacional y a nivel América Latina.

El ser indígena no solamente es el serlo, postarlo, portar una prenda ancestral, es también sentirlo, es hablarlo, es sentirlo en el corazón, es pensarlo, es la forma de actuar, de mirar el mundo, de mirar la transición entre la vida y la muerte y más allá de la muerte. 

Esa es la representación y sobre todo las mujeres indígenas quienes hacemos pueblo, quienes damos pueblo y siempre me gusta compartir esta experiencia de que somos las mujeres indígenas quienes damos pueblo y hacemos pueblo.

En memoria de eso me permito, con el permiso de usted y sobre todo de mis abuelas, mi nombre es Martha Ramírez Galeana, soy originaria de una comunidad indígena Me’phaa en la montaña de Guerrero, mi pueblo se llama X’cuapi porque ese es un nombre original en la lengua materna.

Se le puso un nombre que no le pertenecía a mi pueblo, ella, mi comunidad, porque es mujer mi pueblo, ella se llama X’cuapi, Natania Humingui y con el permiso de ustedes voy a compartir el siguiente texto y expresión colectiva que hoy presentes mis compañeras de la montaña de Guerrero y de la costa chica de Guerrero refuerzan y unimos en una sola voz y en un solo mensaje:

“Como mujeres integrantes del pueblo indígena se nos presentan diferentes obstáculos para participar en la vida política desde un cargo comunitario cuando somos comisarias o delegadas o cuando nunca nos permiten llegar a esos espacios en nuestras comunidades; aún más en los cargos de elección popular, locales y federales. 

Parece ser necesario ir acreditando cada uno de estos espacios políticos a diferencia de los hombres, más aún cuando no sabemos hablar español y no entendemos las expresiones culturales del mestizaje. 

Para acceder al sistema de cargos comunitarios como son mayordomías, topiles, comandantes en seguridad comunitaria, comisarias ejidales, comisarias comunales o presidentas municipales, delegadas y otros cargos comunitarios resulta hasta imposible en la mayoría de las comunidades de nuestros pueblos indígenas de Guerrero.

Lo anterior debido a que la mujer se le asigna desde que es pequeña, desde que somos pequeñas a roles que no siempre tienen que pertenecernos a nosotras; únicamente las labores del hogar, la tierra, la preparación de los alimentos, la preparación de los alimentos en las festividades y asambleas en la comunidad la cual muchas de nosotras no participamos, apoyar en las actividades y mantenimiento de la iglesia o actividades religiosas, realizar funciones de partería en la medicina tradicional, actividades y mantenimiento de acciones que pida la comunidad cuando no haya un hombre que nos represente.

Es decir, las mujeres no nos permiten realizar funciones que no son tomadas en cuenta como relevantes o principales. Somos orilladas a pesar de ser en beneficio común para la colectividad de nuestras comunidades.

En razón de lo anterior, es necesario que a través de estas funciones que realizamos históricamente las mujeres indígenas de este México profundo cuenten como parte del sistema de cargos comunitarios de las mujeres que aspiramos a ocupar un cargo comunitario a nivel municipal, estatal y federal de forma legítima. 

Que estas aportaciones sean tomadas en cuenta para acreditar el vínculo comunitario que se requiere para acreditarse como indígena o como afromexicana, porque muchas y muchos personajes han pasado en nuestros territorios usurpando una identidad a la cual no les pertenece. 

Por otro lado, es importante compartir que el Instituto Electoral Local en Guerrero emitió los lineamientos para el registro de candidaturas para el Proceso Electoral Ordinario de diputaciones locales y ayuntamientos 2023-2024, en el que estableció la auto adscripción calificada por parte de las candidatas y candidatos indígenas o afromexicanos y los medios probatorios del vínculo comunitario, mismo que a través de la Dirección Ejecutiva del Sistema Normativos Pluriculturales se calificó y emitió el dictamen para el registro correspondiente.

Aunado a que, al contar con representaciones indígenas y afromexicanas en los órganos distritales y central del Instituto Electoral local, éstas verifican el cumplimiento de la auto adscripción calificada de las personas que solicitan su registro como candidatura indígena o afromexicana conforme a los requisitos legales a fin de evitar la usurpación en la solicitud de registro a los cargos a elegir en los distritos o municipios indígenas o afromexicanos. 

Por ello, en el ámbito electoral federal se propone la auto adscripción calificada y un catálogo de los documentos que acrediten el vínculo comunitario y las autoridades que podrán emitirla con base al artículo 2º constitucional emitido el 30 de septiembre del 2024, este podrá ser enunciativo más no limitativo.

Es necesario que este catálogo sea resultado de una consulta a las comunidades y pueblos originarios y afromexicanos, mismo que establezca requisitos y actividades de quien se auto adscribe indígena o afromexicana. 

Esta constancia que emite la autoridad comunitaria será para precisamente dar cuenta del vínculo comunitario al participar en las actividades enfocadas en la colectividad. 

Es importante aterrizar esta propuesta en la legislación electoral federal para garantizar el ejercicio pleno de los derechos políticos electorales de las mujeres indígenas de México, con certeza y con seguridad jurídica, principalmente de nosotras las mujeres.

En un país libre y soberano como México, las mujeres indígenas existimos y, por lo tanto, sabemos gobernar nuestros territorios, nuestro cuerpo sagrado, que es nuestro primer territorio, y ni decir, gobernar nuestro país también. 

Enhorabuena, muchas gracias y gracias por su atención. 

Presentadora: Muchas gracias.

Escucharemos ahora a la ciudadana Antonia Ramírez Marcelino.

Antonia Ramírez Marcelino: (Intervención en lengua indígena) 

Muy buenas tardes. Me da mucho gusto, y estoy muy contenta de estar aquí con ustedes y ser la portavoz de ustedes como mujeres que venimos desde la montaña de Guerrero. 

Quiero expresar y compartir con ustedes esto, que ninguna mujer en México, ni en el mundo le tiemblen las piernas cuando decida libremente ejercer su derecho al voto. 

Como me ocurrió el 2 de enero del 2022 en mi comunidad de Ocotequila, cuando con otras ocho mujeres fuimos a pedir que nos permitan votar para elegir a nuestra autoridad tradicional.

Muy buenas tardes. Mi nombre es Antonia Ramírez Marcelino, soy originaria de Ocotequila, municipio de Copanatoyac, de allá de la región de la montaña de Guerrero, hablante del pueblo náhuatl. 

Me correspondió hacer activismo político para que por primera vez las mujeres de mi comunidad, Ocotequila, en la montaña de Guerrero, participaran en la elección para ocupar el cargo de comisaría municipal, cargo por el que únicamente participaban hombres y no permitían que las mujeres ni siquiera aspiráramos a ese cargo, por lo que fue necesario acudir ante las instancias judiciales electorales para llevarlo a cabo.

Se logró participar para ocupar el cargo; sin embargo, no se logró ganar la elección, pero sí se logró que más de 500 mujeres acudieran a ejercer su voto, siendo que tampoco se les permitía ni siquiera votar.

En esa elección, las planillas participantes eran las constituidas por hombres únicamente, una planilla era constituida por mujeres, sobra decir que ganó una planilla única de hombres, y al jactarse de su triunfo también la persona quien ganó como comisario municipal dijo que, aunque pongan a competirlo con mujeres, él siempre va a ganar, porque los hombres siempre ganan, menospreciando a todas las mujeres de la comunidad. 

En relación a lo anterior, en este momento propicio, les propongo que se establezcan distritos electorales federales y locales también, donde solo sean mujeres que compitan por el cargo a cargos de elección que corresponda, debido a que así, al ganar una mujer en sí, ganaría el género y se fortalecería la confianza entre las mujeres. 

En ese sentido, es necesario también fortalecer los liderazgos políticos de las mujeres que existen en el interior de los partidos políticos, por lo que el financiamiento que se le otorga a las entidades, que es el 3 por ciento, sea mayor y que sea fijo, que la aportación no quede a decisión del partido político, además que se quiera que estos, para que anualmente presenten un plan de trabajo a mediano, a corto y largo plazo para fortalecer los liderazgos femeninos, acciones enfocadas a la capacitación, investigación, divulgación mediante talleres, mesas de trabajo, edición de publicaciones, conferencias, seminarios, encuentros estatales y nacionales.

En ese tenor, es necesario establecer mecanismos eficientes y eficaces para auditar a los partidos políticos quienes deben acreditar que están cumpliendo con la ejecución de su plan de trabajo, asimismo que este Instituto Nacional Electoral debe establecer sanciones económicas de inhabilitación de la dirigencia para los partidos políticos que no cumplan, además que también sea motivo de una denuncia por delito electoral por razón de género.

Es importante que el financiamiento destinado se ejerza, que los partidos políticos no lo devuelvan, en su caso sea objeto de sanciones económicas, inhabilitación o incluso una denuncia por delito electoral en razón de género. 

Que nunca más un Guerrero, un México sin nosotras como mujeres, como mujeres indígenas y como mujeres afromexicanas. 

¡Vivan las mujeres indígenas y vivan las mujeres afromexicanas!

Gracias. 

Presentadora:  Muchísimas gracias. 

Damos paso a la intervención de la Ciudadana Catalina Apolinar Santiago.

Catalina Apolinar Santiago: (Intervención en lengua indígena)

Buenas tardes a todas y a todos los presentes. 

Catalina Apolinar Santiago. 

Consejera Presidenta, consejeras y consejeros, Secretaria Ejecutiva y demás personas de este instituto electoral que nos reciben hoy.

Un día memorable para nosotras y que se quedarán nuestras memorias como un evento relevante, como parte de nuestro activismo, de nuestras luchas. Somos mujeres indígenas, Me’phaa, Nahua, Mixteco y afromexicanas de diferentes regiones del estado de Guerrero. 

Agradecida por abrirnos las puertas de este máximo recinto de la democracia nacional.

En nuestra experiencia como activista de los derechos humanos de las niñas y mujeres guerrerenses, hemos estado cara en cara con las necesidades que apremian este sector, sabemos que la unión de las mujeres en esta lucha es primordial.

(Intervención en lengua indígena)

Y si es así como cuando nos encontramos una comunicación y nosotras tratamos de comprender lo que las otras personas dicen en español. 

Decirles la última palabra que dije: en los partidos políticos las mujeres indígenas nos dejan en un territorio donde no vamos a ganar, donde nos ponen una persona de mucho dinero para competir. Lo digo por experiencia.

En el marco del compromiso del Estado mexicano con la igualdad sustantiva y la democracia inclusiva, resulta indispensable reconocer que la exclusión y marginación histórica de los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas en los asuntos políticos ha sido limitado en el ejercicio pleno de sus derechos políticos-electorales. 

En esta realidad se refleja la escasa representación de los espacios de toma de decisiones, la cual perpetúa brechas estructurales y desigualdades que deben ser atendidas de manera decidida e integral. 

Por ello, es necesario avanzar hacia el fortalecimiento de acciones afirmativas que garanticen la ocupación de cargos de elección popular en los distritos electorales con preponderante población indígena y afromexicana.

Dicha medida debe asegurar no solo la participación, sino también la representación efectiva de los pueblos bajo principios de justicia, inclusión, respeto y a la libre determinación. 

De igual manera, debe contemplarse la paridad de género en la postulación y ocupación a cargos de elección popular en todos los niveles federal, local, municipal. 

Las mujeres indígenas y afromexicanas son sujetas a plena de derechos políticos y electorales y el Estado mexicano tiene la obligación de generar los mecanismos institucionales y presupuestales que les permita ejercerlo en condiciones de igualdad, libre de discriminación y de violencia política.

Asimismo, se debe garantizar la auto adscripción calificada como requisito legítimo y respetuoso de la identidad cultural de quienes se postulen a cargo de elección, postular el distrito de la población indígena o afromexicana. 

Este reconocimiento constituye un avance al respeto, a la diversidad y a la afirmación de derechos de pueblos a decidir los que representan.

En este sentido, propongo incrementar el presupuesto destinado a la capacitación y formación en liderazgo político de mujeres indígenas y afromexicanas como una medida afirmativa, concreta para impulsar su participación y fortalecer su presencia en los espacios del poder. La democracia se fortalece cuando los incluyentes y plurales.

Por ello, este Consejo General debe seguir impulsando políticas institucionales que reconozcan la diversidad cultural y promuevan la participación efectiva de todos los sectores y que integran a la nación mexicana. 

Garantizar la representación de los pueblos indígenas y afromexicanas no es solo es un acto de justicia, sino es un paso indispensable para consolidar un Estado verdaderamente democrático e intercultural. 

Muchas gracias. (Intervención en lengua indígena)

Presentadora: Muchísimas gracias. Cedemos el micrófono a la ciudadana Diodira Pantaleón. 

Diodira Pantaleón Pérez: (Intervención en lengua indígena) 

Muy buenas tardes, querida Presidenta, consejera del Instituto Nacional Electoral y autoridades de la misma; mujeres y hombres indígenas y afrodescendientes de la región de la montaña alta y costa chica del estado de Guerrero. 

Mi nombre es Diodira Pantaleón Pérez, mujer indígena, hablante de la lengua náhuatl, soy montañera.

Pues bien, hoy en el marco de la reforma electoral quiero decir lo siguiente, aún las mujeres indígenas seguimos oprimidas y sometidas al hombre, y esto es un claro ejemplo de que nos cuentan y nos dan las actividades que, según ellos, las más sencillas: que cuide la iglesia, que cuide los santos, que haga el aseo, que limpie, pero nunca nos dan la llave para abrir la puerta. 

Espera al fiscal hasta que llegue, y si es que se emborrachó, estate esperando ahí, porque son leyes que tienes que esperarlo, porque si te quitas de la Iglesia ya es una falta, porque dicen: no, no cumpliste. 

En la escuela realizamos las funciones que nos dan, realizamos las presidentas de la asociación de padres de familia, la de emergencia, la escuela es nuestra, la de salud, entre otras, y hacer el aseo del aula.

También en la comisaría eso es lo más común que existe: preparar el mole, hacer el pozole, hacer el atole, ahora ya terminaste, sírvales a los hombres, primero los hombres, a los fiscales, a los tlatoani, al comisario, tata, y ya, las mujeres al último van a comer, si es que sobró, bien atendidos, nada que alguien esté sentada, una mujer, y que no haga nada. 

Entonces, compañeras, la mera verdad estas actividades los hombres lo toman como algo insignificante, que son sencillas, que para ellos es fácil de realizarlo, pero más sin embargo son actividades arduas, que requieren de mucha paciencia y mucha organización, ¿y por qué lo digo? Porque muchos dicen que nosotras como mujeres no podemos trabajar juntas. 

No es cierto, eso es mentira, yo he trabajado, yo he hecho comunalidad y sí se puede, en ese mismo ratito distribuimos rapidito las actividades: “pica la cebolla, tráete las aguas, rapidito, ya viene el comisario, ya viene la banda, rápido, ponle las flores, a ver tú, señorita”, y rapidito hacemos los quehaceres: “Ah, la que hace las tortillas, rapidito”.

Entonces sí podemos ejercer cargos, compañeras y compañeros, y no tenemos nada en contra de los hombres, son nuestros aliados, son nuestros amigos, son nuestros camaradas que día con día nos cruzamos en las calles.

Y hoy queremos venir a decir que sí nos permitan de que haya un catálogo, un catálogo enunciativo y no limitativo, ¿y qué quiere decir esto? Pues que nos tomen en cuenta las actividades que realizamos en nuestras comunidades, en nuestros pueblos, porque no es posible que nos los dejen nada más así y digan: “no, pues no puedes hacerlo, que tú no has pasado por ser comisaria, que por ser fiscal”. 

Lamentablemente no nos permiten llegar a esos cargos, es por ello que pedimos al INE que tome cartas en el asunto, porque de otra manera no puede haber paridad de género, siempre vamos a estar a un lado y siempre van a tener ventaja los hombres. 

Y también quiero poner de ejemplo el quinto distrito que pertenece a la federación, el quinto distrito siempre ha ocupado el cargo un hombre durante muchos años y ese lugar le pertenece a un indígena, ¿y qué pasa? Siempre le han asignado a un hombre mestizo. Y hoy vengo a decir que ese lugar le corresponde a las mujeres, ya es hora y ya es tiempo.

¿Y quién va a poner la armonía y la paz? El INE. 

Mujeres unidas y organizados somos más fuertes. 

Muchas gracias.

Presentadora: Gracias por sus participaciones.

Y en este momento hará uso de la palabra la Secretaria Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, Doctora Claudia Arlett Espino…

Secretaria Ejecutiva del INE, Claudia Arlett Espino: (Intervención en lengua indígena) 

Les saludo mujeres indígenas y afrodescendientes, más de 50 mujeres que hoy nos vistan en este Instituto Nacional Electoral. 

Es un orgullo para mí desde mi origen rarámuri de la Sierra Tarahumara de Chihuahua recibirles y obtener su confianza para que estuvieran aquí. 

Saludo, por supuesto, también a quien nos acompaña del Instituto Nacional Electoral, a la Junta General Ejecutiva, a las y los delegados de las 32 entidades de la República.

Y le saludo especialmente a nombre de la señora Presidenta, la Licenciada Guadalupe Taddei, quien por el cargo de sus funciones, no ha podido acompañarles, pero que me ha pedido de manera encarecida que les dirija un mensaje, un mensaje que ella escribe desde la conciencia y desde el agradecimiento de que por primera vez tengamos a un grupo tan numeroso de mujeres indígenas en este auditorio.

Y dice así: “Les saludo con profundo respeto y reconocimiento a quienes hoy nos honran con su presencia en este Instituto Nacional Electoral, el INE las recibe con las puertas abiertas.

Nos encontramos hoy en un acto de diálogo franco constructivo y, sobre todo, profundamente democrático”.

En su calidad de Consejera Presidenta de esta institución las recibe con la mayor seriedad y compromiso institucional con las reflexiones y las propuestas que se nos están confiando en el marco de la discusión de una eventual propuesta de reforma electoral”.

Dice ella: “Quiero ser muy clara, este documento que hoy tendremos en nuestras manos no es simplemente un conjunto de ideas, es la materialización de la voz, de la visión y de la experiencia acumulada de las mujeres indígenas y afrodescendientes del estado de Guerrero, ¿para qué?, para el fortalecimiento de nuestra democracia.

Es el eco de justas demandas que buscan fortalecer la participación y la representación en el sistema democrático de nuestro país. Por muchos años, desafortunadamente, la voz de los pueblos originarios fue sistematizadamente invisibilizada en la construcción del andamiaje legal y en los grandes debates nacionales sobre nuestro sistema electoral, no se diga de las mujeres indígenas y de las mujeres afrodescendientes.

La democracia mexicana por mucho tiempo tuvo una deuda pendiente con sus pueblos originarios y, por supuesto, de nueva cuenta con las mujeres indígenas y afrodescendientes.

Sin embargo, revertir esa inercia y saldar esa deuda ha sido una misión permanente y constante que esta autoridad electoral ha asumido con absoluta convicción.

Para el Instituto Nacional Electoral la inclusión no es un discurso. es un mandato constitucional y una obligación permanente. La lucha por el reconocimiento de sus derechos político-electorales ha sido larga y esta autoridad ha buscado estar a la altura de ese desafío.

Hemos avanzado en el diseño de distritos electorales con criterios de población indígena, garantizando que la geografía electoral refleje la composición pluricultural de México, con acciones afirmativas a favor de las mujeres que, por cierto, dichas acciones han nacido en uno de los estados de los que hoy tenemos la presencia: en Guerrero.

Se ha implementado y defendido acciones afirmativas que, si bien son un piso mínimo, han permitido una creciente de representantes indígenas en los espacios de decisión. Guerrero de nueva cuenta es un ejemplo de ello, hoy se cuenta con representantes ante el Consejo General del Órgano Público Local Electoral de indígenas y de afrodescendientes. 

Y de manera crucial, este instituto ha robustecido el derecho a la consulta previa, libre e informada como una herramienta vinculante para las decisiones que les afectan, no con tropiezos, no con perfección, pero sí con mucho ánimo y voluntad. Pero también sabemos, con humildad y autocrítica, que nos falta camino por recorrer. 

La democracia es una obra en permanente construcción.

Hoy México vive un momento de profunda deliberación sobre el futuro de su sistema democrático. En el marco de la discusión de una eventual reforma electoral, la participación de las mujeres indígenas y afrodescendientes es muy valiosa. Es más, es indispensable.

Una reforma que no escuche, que no incorpore la visión y las necesidades de las mujeres indígenas y afrodescendientes sería una reforma incompleta. Por ello, este Instituto asume con total seriedad el compromiso que hoy nos solicitan, ser un puente institucional. 

Recibimos sus propuestas con el propósito claro de presentarlas formalmente ante la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral y ante el Poder Legislativo.

Lo hacemos en un ejercicio de colaboración institucional, convencidos y convencidas de que el fortalecimiento de nuestra democracia pasa necesariamente por escuchar y atender las perspectivas de todos los sectores de la sociedad, especialmente de aquellos y aquellas que han labrado la identidad más profunda de este país. 

El México del siglo XXI no puede ni debe entenderse sin la vitalidad, la fuerza y la sabiduría de sus pueblos originarios y comunidades indígenas y de sus mujeres. 

Este acto de diálogo refrenda el carácter del INE como una institución de puertas abiertas.

Somos el árbitro electoral, pero también somos el punto de encuentro de la pluralidad nacional. 

Les aseguro que sus propuestas serán tratadas con la seriedad y el respeto que merecen. Serán un insumo fundamental para la deliberación nacional que está en marcha.

Que este encuentro sea un paso firme hacia la consolidación de una democracia verdaderamente incluyente, intercultural y paritaria. 

A quienes hoy me acompañan y acompaño en este presídium, a la diputada local Catalina, a quien ya tuvimos oportunidad de escuchar, a Martha, a Karemi, a Antonia que, como lo sabemos quiénes estamos aquí, fue promovente de aquella sentencia emblemática en el estado de Guerrero, cuando no las dejaron votar, y que tuvo a bien el Tribunal Local Electoral a revertir esta situación. 

Agradezco, por supuesto, la presencia, así como a Diodira.

Es Catalina, Martha, Karemi, Antonia, Diodira, solamente una representación de quienes también se encuentran en el público, pero también una representatividad de todas aquellas mujeres indígenas y afrodescendientes que viven realidades y que exigen sus derechos político-electorales a lo largo y ancho de nuestro país. 

No quiero terminar este mensaje que la señora Presidenta ha dispuesto para ustedes sin darles el agradecimiento a nombre de ella, y también manifestarles que en su tramo de Presidenta del Organismo Público Local Electoral en su natal Sonora, su responsabilidad pasó también por la convivencia y por el tratamiento de los derechos político-electorales de los pueblos indígenas de la hermana comunidad Yaqui, que ha sido también una de las comunidades de los pueblos originarios que han marcado antecedentes para las acciones afirmativas en este país. 

Así que siéntanse bienvenidas a nombre de la Presidenta, la Licenciada Guadalupe Taddei, por supuesto del mío propio, de la propia Junta General Ejecutiva que nos acompaña en este momento y que además se encuentra trabajando justamente en la propuesta técnico-operativa que saldrá del Instituto Nacional Electoral, además de estos trabajos de estar recibiendo de todos los grupos y asociaciones que se acercan al INE para compilar las propuestas. 

Sin duda es un día histórico, así como fue un día histórico para este Instituto dar un acta de mayoría al primer ministro de esta era, porque ya lo habíamos tenido, Ministro Presidente a un hombre de origen indígena, también es un día histórico para este Instituto Nacional Electoral el recibir a tantas mujeres indígenas y afrodescendientes.

Muchas gracias por su presencia. 

Presentadora: Se procede a realizar la recepción de propuesta que presentan las mujeres indígenas de México, por ello solicitamos a la Secretaria Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, Doctora Claudia Arlett Espino, dé lectura al documento y posteriormente se llamará a cada una de las personas que conforman el presídium para que pasen a firmar. 

Claudia Arlett Espino: Gracias.

El Instituto Nacional Electoral recibe propuestas temáticas para la reforma electoral con el propósito de presentarles ante la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral y el Poder Legislativo en un ejercicio de colaboración institucional orientado al fortalecimiento del sistema democrático.

Reciben la Presidenta, la Consejera Presidenta del Instituto Nacional Electoral, la Licenciada Guadalupe Taddei Zavala y una servidora, Secretaria Ejecutiva Claudia Arlett Espino. 

Presentadora: Comenzamos la firma en esta ocasión con la Ciudadana Karemi Calleja Aguilar.

En este momento están haciendo entrega del documento, lo recibe la Secretaria Ejecutiva, Doctora Claudia Arlett Espino.

Pasan a firmar el documento. 

Ciudadana Karemi Calleja Aguilar. 

Continuamos con Martha Ramírez Galeana.

Continuamos con Antonia Ramírez Marcelino.

La siguiente firma es de la ciudadana Catalina Apolinar Santiago.

Continuamos con Diodira Pantaleón. 

Y en este momento hace la firma la Secretaria Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral, Doctora Claudia Arlett Espino.

Les pedimos por favor vuelvan a tomar sus lugares en el presídium que se llevará a cabo la toma fotográfica oficial. Esta es la fotografía oficial del evento. 

El Instituto Nacional Electoral agradece la participación y el diálogo abierto con las mujeres indígenas que hoy nos acompañan.

Es así como concluimos este encuentro, que tengan muy buenas tardes.

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