Versión estenográfica del evento, Difusión del estudio muestral de participación ciudadana. FIL Guadalajara 2025

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Audio del evento, Difusión del estudio muestral de participación ciudadana. FIL Guadalajara 2025

Presentador: Buenas tardes, tengan todas y todos ustedes.

Bienvenidas, bienvenidos al stand del Instituto Nacional Electoral en el marco de la Feria Internacional del Libro de aquí de Guadalajara.

Estamos ante la posibilidad de presenciar el análisis acerca del Estudio Muestral de Participación Ciudadana Proceso Electoral Concurrente 2023-2024 pasado.

Nos acompañan en el panel la Maestra Beatriz Claudia Zavala Pérez que actuará como moderadora, Consejera Electoral del Consejo General del Instituto Nacional Electoral. Bienvenida consejera.

Nos acompaña la Maestra Brenda Judith Serafín Morfin, Magistrada del Tribunal Electoral del estado de Jalisco. Bienvenida, gracias por estar aquí.

El Maestro José Martín Fernando Faz Mora, Consejero Electoral del Consejo General del Instituto Nacional Electoral. Bienvenido, consejero.

Y nos acompaña en esta ocasión también como participante de la interacción es el Doctor Javier Hurtado González, quien todas y todos reconocemos, admiramos. Bienvenido, Doctor, por estar hoy con nosotros como el espléndido analista que es usted.

El objetivo del análisis de la mesa de participación de este momento del Estudio Muestral tiene como objetivo conocer el perfil de la ciudadanía que sufragó y también de quienes no lo hicieron en este proceso electoral concurrente 2023-2024 a través de las variables como sexo, edad y tipo de sección electoral entre otras, así como identificar patrones de comportamiento del electorado respecto de las elecciones federales mencionadas.

Conocer la proporción de las personas que votaron y las que no lo hicieron según condición de sexo, edad, tipo de sección urbana o no urbana a nivel nacional, así como por entidad federativa y distrito electoral federal.

Realizar el análisis descriptivo comparativo entre las entidades federativas y por distrito electoral federal por grupos de edad y sexo es otro de los grandes contenidos que tiene esta valoración.

En síntesis, analizar el comportamiento histórico de la participación ciudadana en las últimas elecciones electorales.

Bienvenidas, bienvenidos y les cedemos el uso de la palabra a la compañera Consejera Electoral Beatriz Zavala.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Gracias, Doctor Luis Zamora.

Muchas gracias por ser anfitrión aquí en esta gran Feria del Libro.

Gracias a todas y todos ustedes quienes están presentes, quienes son de casa, quienes están y fueron de casa y quienes están en la vía virtual, muchas gracias; y, sobre todo, para mí es un honor estar aquí moderando a personas que han sido compañeras de la institución y también de la vida en el ejercicio profesional y que ahorita nos acompañan aquí.

Me refiero, por supuesto, a quienes van a ser nuestros comentaristas, que está Brenda Judith que ya tenemos una larga data en la que nos hemos conocido y el Doctor Javier Hurtado que siempre ha sido un muy buen aliado de la institución.

Y, por supuesto, estar con mi compañero el Consejero Martín Faz que ahora preside los trabajos de esta Comisión, pues es un gran placer para mí.

Voy a ser muy breve porque tendré el tiempo, tengo la encomienda de presentarles a quienes van a ser nuestros comentaristas y hemos acordado que será una presentación muy breve porque queremos escuchar más y también escucharles a ustedes para retroalimentarnos a través de las preguntas, así que desde este momento si ustedes cuando vayan surgiendo vayan haciendo sus preguntas para que podamos hacerlo.

El Consejero Martín Faz va a ser una presentación y después lo van a comentar y desde ahí pueden empezar ustedes con sus inquietudes.

Permítanme presentar muy brevemente a nuestra Maestra Brenda Judith Serafín Morfín, ella es Abogada por la Universidad de Guadalajara y Maestra en Derecho Electoral por la Escuela Judicial del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Es integrante de varias organizaciones electorales porque ha estado de un lado y del otro, como consejera y como magistrada, ahora es Magistrada en el Tribunal Electoral como ustedes lo vieron, pero también está ahí en la AMMEL, que es la Asociación de Magistradas y Magistrados Electorales; está en la AMCEE, que es la de Consejeras y Consejeros Electorales y está en RENACEDI que es también una asociación de consejeras y consejeros electorales que es una red nacional de ciudadanía y como red cívica.

Y actualmente, es Magistrada del Tribunal aquí en Jalisco.

Nuestro Doctor Javier Hurtado es Abogado y Doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Guadalajara, su especialidad es en Derecho en Herramientas Constitucionales para las Crisis de las Democracias Contemporáneas.

Él es miembro del Sistema Nacional de Investigadores Nivel 3 y se desempeña también como profesor investigador titular de tiempo completo en el Colegio de Jalisco donde ha consolidado una gran trayectoria de más de 30 años o tres décadas en la investigación, docencia y análisis y quiero decirles que es un gran amigo de nuestra institución.

Y está el Consejero Martín Faz que actualmente integra al Consejo General y coordina los trabajos de organización.

Sin más preámbulos y ya que han ustedes escuchado quiénes van a estar aquí, nuestro anfitrión es el Doctor Luis Zamora, Vocal aquí Ejecutivo en Jalisco.

Les voy a conceder el uso de la voz al Consejero Martín, a nuestros panelistas, un promedio de 10 minutos después para sus comentarios después de que el Consejero Martín presente, y a ustedes para que de una vez vayan arrancándose con sus preguntas.

Muchas gracias.

Consejero del INE, José Martín Fernando Faz Mora: Buenas tardes.

Es un gusto estar con ustedes, en este marco impresionante que siempre es la FIL y que finalmente logramos estar en la FIL este año, a pesar de dificultades presupuestales de toda índole.

El objetivo de esta exposición es presentar el estudio muestral de participación ciudadana y lo que queremos es hacer un recorrido de lo general a lo particular, primero revisar el comportamiento de la participación a nivel nacional y después detenernos en lo que ocurre en la Primera Circunscripción, es decir, en Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Nayarit, Sinaloa, Sonora y, por supuesto, Jalisco que es justo donde estamos.

Ahora, la idea es que al terminar tengamos no sólo una fotografía de quienes acudieron a las urnas y quienes no, sino también algunas pistas para orientar el trabajo institucional en materia de organización, de capacitación y, particularmente, de educación cívica que realiza tanto el Instituto como los Organismos Electorales en su conjunto.

Para situar el estudio muestral de participación ciudadana 2024 es ante todo una medición estadística rigurosa que parte de la Lista Nominal de Electores, es un diseño probabilístico, estadístico, estratificado, con muestras independientes en los 300 distritos electorales; se seleccionaron 20 mil 160 casillas y, finalmente, se recuperó información del 99.5 de ellas, lo que habla de un operativo de campo muy sólido.

A partir de las Listas Nominales utilizadas el día de la jornada electoral se verificó registro por registro si la persona votó o no votó.

Con esta información y con ponderadores calculados por la Dirección Ejecutiva del Registro Federal de Electores se generan estimaciones representativas a nivel nacional, por entidad federativa y por distrito con niveles de confianza del 95 por ciento y márgenes de error muy acotados, aproximadamente de un punto porcentual a nivel estatal y de alrededor de dos puntos por Distrito.

Antes de hablar de participación, conviene recordar de qué tamaño es y cómo estuvo compuesta la Lista Nominal de Electores.

Para el proceso electoral concurrente 2023-2024 la Lista Nominal de Electores se integró por 98.3 millones de personas; 51.1 millones de mujeres, que representa el 52 por ciento; y 47.2 millones de hombres, es decir, el 48 por ciento; y un grupo de 105 personas registradas como no binarias, es decir, llegamos a la elección con una lista prácticamente paritaria desde el punto de vista de sexo, con una ligera mayoría de mujeres.

Este dato de arranque es importante porque, como veremos más adelante, la paridad en el listado no se traduce en el comportamiento idéntico en las urnas. De hecho, una de las constantes del estudio es que las mujeres participan más, mucho más que los hombres.

En esta lámina se muestra la distribución relativa de la Lista Nominal por grupos de edad y sexo.

Sin detenernos en cada porcentaje, lo que interesa subrayar es que ya no estamos frente a una pirámide joven clásica, sino ante una estructura donde las (Falla de transmisión) 30 a 59 años concentran una parte muy relevante del electorado, mientras que los grupos de 18 a 19 años y de 85 y más tienen un peso relativo menor.

Esto tiene implicaciones directas para la participación, si los segmentos que más pesan en la estructura son también los que más votan, cualquier variación en su comportamiento impacta de manera muy visible en el porcentaje nacional.

En la siguiente diapositiva vemos el listado nominal a lo largo del tiempo de 1991 a 2024. Lo que la gráfica nos recuerda es el crecimiento sostenido del Padrón y de la Lista Nominal a lo largo de tres décadas. En pocas palabras, cada elección federal se organiza para una ciudadanía más numerosa, más urbana y más compleja.

El sistema electoral ha tenido que acompañar ese crecimiento con nuevas distritaciones, más casillas, más funcionariado y una logística cada vez más sofisticada.

Cuando más adelante hablemos de diferencias relativamente pequeñas en puntos porcentuales, conviene tener en mente que un punto sobre una base de casi 100 millones de personas implica un millar de ciudadanos adicionales o ausentes en las urnas.

Entrando ya a la participación a nivel nacional, el estudio confirma que en la elección presidencial de 2024 votó el 59.8 por ciento de la ciudadanía inscrita en la lista nominal.

Si miramos la serie histórica de elecciones presidenciales, la gráfica muestra que en 1994 se tuvo un 77.2 por ciento de participación; en 2000, 64 por ciento; en 2006, 58.6 por ciento; en 2012, 63.1 por ciento; en 2018, 63.4 por ciento y ahora fue del 59.8 por ciento en el 2024.

Estamos, por tanto, ante una participación menor a la de las dos elecciones presidenciales inmediatas anteriores, aunque claramente por encima de las intermedias.

El mensaje principal es doble. Por un lado, la ciudadanía sigue acudiendo en mayor medida cuando está en juego la presidencia. Por otro, tenemos un margen de recuperación si aspiramos a regresar a niveles cercanos a los del 2012 o del 2018.

Esta lámina desagrega precisamente la participación según el tipo de elección federal.

Al comparar elecciones intermedias y presidenciales se confirma la brecha. Históricamente, la asistencia a las urnas es mayor cuando se elige a la presidencia de la República que en las elecciones en las que sólo se renuevan diputaciones. En cuanto a las diferencias por sexo, el estudio ofrece datos muy claros.

En 2018, la participación de los hombres fue del 58.1 por ciento y la de las mujeres del 62.2 por ciento. En 2024, ambos porcentajes disminuyen, pero la brecha se ensancha. Los hombres pasan a 54.8 por ciento y las mujeres a 64.3 por ciento, es decir, en 2024 las mujeres votaron 9.5 puntos porcentuales más que los hombres.

Esto confirma la hipótesis de que son ellas quienes sostienen la participación electoral y obliga a pensar acciones específicas para los hombres, particularmente jóvenes, que aparecen sistemáticamente como el grupo con mayor ausentismo.

En la siguiente lámina, se comparan los porcentajes de participación por grupos de edad para 2018 y 2024. El patrón general es el siguiente: los niveles más bajos de participación, que no alcanzan el 50 por ciento, se concentran en los grupos de 20 a 29 años y en el de 85 y más. En contraste, los niveles más altos se ubican en los segmentos de 40 a 79 años.

Para 2024 se observa un incremento importante en la participación de las personas de 60 años y más, por ejemplo, en los grupos de 60 a 79, las tasas de participación se encuentran por arriba del 70 por ciento, dicho de otro modo, las personas mayores siguen siendo el núcleo de la participación electoral, mientras que los retos están en la incorporación de las y los más jóvenes que mantienen sus niveles más bajos de asistencia en las urnas.

Si cruzamos edad y sexo, la gráfica muestra una historia todavía más interesante; en prácticamente todos los grupos de edad hasta los 64 años, las mujeres participan más que los hombres, con brechas que, en algunos segmentos, como el de 30 y a 34, superan los 10 puntos porcentuales.

A partir del grupo de 65 y 69, la brecha comienza a cerrarse y en los tramos de mayor edad, la participación masculina tiende a acercarse o ligeramente a superar la femenina, aunque nunca con el margen que ellas muestran en la juventud y la adultez media.

Este cruce confirma dos ideas claves.

Por un lado, que la participación es un fenómeno fuertemente generacional.

Por otro, que la contribución de las mujeres es particularmente decisiva entre los 25 y 49 años, justo en una etapa de la vida donde se combinan trabajo, cuidados y múltiples responsabilidades.

Al analizar la participación según el tipo de sección, urbana y no urbana, y compararla a lo largo del tiempo, el estudio muestra que históricamente las secciones no urbanas han tenido una ligera ventaja sobre las urbanas, sin embargo, en 2024 esta brecha prácticamente desaparece.

Los porcentajes de participación en secciones urbanas y no urbanas se sitúan alrededor del 60 por ciento y la diferencia entre una y otra es mínima. Esto sugiere que, si bien siguen existiendo particularidades territoriales, el diferencial urbano-rural ya no explica por sí solo las variaciones más importantes en la participación.

El foco se desplaza hacia otros factores, grupos de edad, condiciones socioeconómicas, tipo de elección y, como veremos, diferencias entre entidades y distritos.

En estas láminas se presenta la participación ciudadana por entidad federativa, visualmente, es muy claro que no existe un solo nivel de participación, sino un abanico de realidades estatales.

Si pensamos la participación como una media nacional de 59.8 por ciento, hay entidades que se ubican significativamente por arriba de ese valor y otras muy por debajo.

El estudio utiliza además una desviación estándar de alrededor de 5.7 puntos porcentuales para distinguir estados de alta participación por encima de aproximadamente 65.5 por ciento y estados de baja participación por debajo del 54.1 por ciento.

Lo relevante para efectos de política pública es que estas diferencias no son aleatorias, se relacionan con historias políticas locales, con la concurrencia de elecciones y con patrones regionales que enseguida veremos.

Aquí en las siguientes diapositivas se muestran las diferencias en participación entre las elecciones presidenciales de 2028 y 2024 por entidad.

A nivel nacional, ya lo vimos, hay una disminución de casi cuatro puntos, pero la gráfica deja ver que no todas las entidades se comportaron igual, algunas lograron mantener o incluso incrementar su participación, mientras que otras presentaron descensos más marcados.

Un hallazgo importante del estudio es que en promedio las entidades que tuvieron elecciones concurrentes con gubernatura registraron mayores niveles de participación que aquellas en las que sólo se eligieron cargos federales o locales de menor visibilidad.

Esta información es muy útil para la Primera Circunscripción, donde coexisten estados con procesos concurrentes de alto perfil y otros donde la elección federal es el evento principal.

En la siguiente lámina se observan las diferencias de participación por sexo, también por entidad federativa. El patrón general es que en todas las entidades la participación de las mujeres es superior a la de los hombres, lo que varía es la magnitud de la brecha.

En algunas entidades la diferencia supera los 15 puntos porcentuales, en otras se acerca más a los 5 puntos. Esto refuerza la idea de que no basta con hablar de participación ciudadana así en abstracto, es necesario pensar en estrategias diferenciadas por sexo, edad y territorio, especialmente para involucrar a los hombres jóvenes y de mediana edad en contextos donde su participación es sensiblemente menor.

Pasando a nivel distrital, se presenta primero el mapa de participación por distrito electoral federal y luego la distribución de distritos por grado de participación.

El estudio clasifica a los distritos en cinco grupos: participación muy alta, mayor a 68 por ciento; alta, de 62.1 al 68 por ciento; media, de 57.1 a 62.1 por ciento; baja, de 51.2 a 57.1; y muy baja, menor a 51.2 por ciento.

En 36 distritos, alrededor del 12 por ciento, la participación fue muy alta, concentrado sobre todo en entidades como Ciudad de México, Estado de México, Tlaxcala y Yucatán.

En el otro extremo, el grupo de distritos con participación muy baja se localiza principalmente en entidades del norte del país, destacando Baja California, Chihuahua y Nuevo León.

Para la Primera Circunscripción esto es crucial, nos habla de territorios donde dentro de la propia región la participación está consistentemente por debajo del 51 por ciento y que requieren intervenciones muy focalizadas.

La siguiente lámina reúne a los distritos con mayor y menor participación desagregados por sexo. La diferencia entre el distrito con mayor participación y el de menor participación es de 38.3 puntos porcentuales, lo cual ilustra la enorme desigualdad territorial en la asistencia a las urnas.

A partir del cuadro y de la narrativa de estudios sabemos, por ejemplo, que en el extremo superior se ubica el Distrito 02 de Progreso, en Yucatán, con una participación superior al 80 por ciento, mientras que en el extremo inferior está el Distrito 02 de Juárez, en Chihuahua, con 42.5 por ciento, es decir, 17.3 puntos por debajo del promedio nacional.

De nuevo, aquí aparece la Primera Circunscripción. Chihuahua contribuye tanto a los casos de muy alta como de muy baja participación distrital, lo que nos recuerda que al interior de las entidades conviven realidades muy contrastantes.

En la siguiente gráfica se compara los porcentajes de participación en los distritos federales para 2018 y 2024 por sexo.

Lo que sugiere la nube de puntos es que en la mayoría de los distritos la participación de las mujeres se sitúa por encima de la nacional y por encima de la de los hombres, tanto en 2018 como en 2024.

Los puntos por debajo de la línea de referencia nacional concentran de nueva cuenta a los distritos del norte y a varios distritos urbanos densamente poblados.

Para la Primera Circunscripción, esto abre preguntas muy concretas, ¿qué están haciendo bien aquellos distritos del occidente y del norte que logran mantenerse en la banda alta de participación ciudadana? ¿Y qué factores están limitando la participación, sobre todo de hombres jóvenes, en distritos urbanos de Baja California o Chihuahua?

La siguiente lámina se centra en los distritos con mayor y menor participación, pero ahora observando su comportamiento por grupos de edad.

La comparación de estos dos extremos confirma la hipótesis generacional. En los distritos de muy alta participación, los niveles de voto de los grupos jóvenes tienden a ser más altos que el promedio nacional, mientras que en los distritos de muy baja participación los grupos de 20 a 39 años se sitúan claramente por debajo del 50 por ciento.

En otras palabras, cuando logramos atraer a la población joven a las urnas, no solo sube la participación de ese segmento, sino que se eleva el nivel general del distrito.

Esto es una clave estratégica para pensar en intervenciones en los distritos de la Primera Circunscripción con participación baja o muy baja.

En la siguiente diapositiva se muestra el porcentaje de distritos según su grado de participación, desagregado por tipo de sección: urbana, no urbana o mixta. La evidencia indica que hay distritos con participación alta y baja tanto en contextos urbanos como rurales.

Es decir, el tipo de sección por sí solo no determina el éxito o el fracaso en términos de participación. Lo que sí se observa es que en los distritos urbanos la participación suele ser predominantemente media o alta.

Las dos últimas láminas de este bloque se concentran en la participación de las mujeres y su contexto.

El dato central ya lo mencionamos. En 2024 la participación de las mujeres fue de 64.3 por ciento, 4.6 puntos por encima del porcentaje total y 9.5 puntos por encima de la participación de los hombres.

Cuando se observa esta cifra por entidad federativa, se advierte que en ningún estado las mujeres participan menos que los hombres. En todos, se verifica la hipótesis de que ellas sostienen las urnas.

La brecha más amplia se presenta en entidades como Chiapas, Oaxaca, Coahuila y Ciudad de México, donde las mujeres superan a los hombres en más de 10 puntos porcentuales.

Además, el estudio explora la relación entre la participación de las mujeres y distintos indicadores de contexto: salud, educación, empleo, seguridad, violencia, ocupación de cargos de decisión, y encuentra que, si bien hay asociaciones interesantes, no se observa una relación lineal simple. Alta participación femenina no siempre coincide con las mejores condiciones en todos los indicadores y viceversa.

Esto refuerza la idea de que la participación es un fenómeno complejo, arraigado tanto en estructuras de oportunidad como en historias políticas concretas.

Hasta aquí hemos visto el panorama nacional.

A partir de esta lámina nos centraremos en la Primera Circunscripción Plurinominal, que agrupa a Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Nayarit, Sinaloa, Sonora y Jalisco.

Se trata de una región estratégicamente clave, combina fronteras terrestres y marítimas, corredores industriales y turísticos y grandes concentraciones urbanas como Tijuana y Guadalajara y extensas zonas rurales dispersas.

Es una circunscripción donde conviven altos niveles de movilidad, economías muy variadas y, como veremos, también contrastes importantes en términos de participación ciudadana.

En esta lámina aparece la distribución relativa de la lista nominal de la Primera Circunscripción por entidad federativa. Actualmente se aprecia que Jalisco es el estado con mayor peso en la Circunscripción, lo cual es consistente con su tamaño poblacional y con el hecho de que concentra alrededor del 6.7 por ciento de la Lista Nominal nacional, le siguen en magnitud entidades como Chihuahua, Baja California, Sonora y Sinaloa, mientras que Durango, Nayarit y Baja California Sur aportan proporciones menores.

Esto significa que el comportamiento de la participación en Jalisco y en los estados fronterizos del norte tiene un efecto muy relevante sobre el promedio de la circunscripción, pero también que los estados más pequeños aunque muevan menos el promedio pueden mostrar patrones muy particulares que vale la pena mirar con detalle.

La siguiente gráfica muestra la distribución relativa de la lista nominal por sexo en cada una de las entidades de la circunscripción, en general se replica el patrón nacional, en todos los estados las mujeres representan ligeramente más de la mitad de la lista nominal con variaciones pequeñas entre entidades, dicho de otra forma no es que en algún estado falte población femenina en el estado, la diferencia en participación que veremos más adelante no se explica por la composición de la lista sino por el comportamiento efectivo el día de la jornada electoral.

Esta constatación abre la puerta a pensar estrategias más finas que no se queden en la paridad numérica, sino que consideren las condiciones para que esta mayoría relativa de mujeres pueda seguir ejerciendo su propio voto en contextos de violencia, sobrecarga de cuidados o precariedad laboral.

En la siguiente lámina se presentan los porcentajes de participación ciudadana por entidad federativa dentro de la primera circunscripción, aunque cada barra tiene su valor específico, lo que interesa subrayar son dos cosas:

Primero, la variación interna, aún dentro de una misma región hay estados que se ubican claramente por arriba del promedio nacional y otros por debajo, el estudio calcula para este conjunto una desviación estándar de 5.7 puntos, lo que nos permite distinguir estados con participación alta por encima de aproximadamente 65.5 por ciento y estados con participación baja por debajo del 54.1 por ciento.

Segundo, los comentarios finales del estudio señalan expresamente que es importante concentrar esfuerzos para impulsar una mayor asistencia a las urnas en Baja California y Sonora, debido a sus bajos porcentajes de participación tanto en 2018 como en 2024, es decir, dentro de la Primera Circunscripción ya hay identificados, por decirlo así, focos rojos persistentes en materia de participación ciudadana que no se explican por una sola elección, sino que representan una tendencia.

En la siguiente diapositiva se muestra la participación de las mujeres en las elecciones federales de 2024 por entidad federativa también para la Primera Circunscripción, aún sin entrar en cada cifra podemos afirmar que el Patrón nacional se reproduce, en los ocho estados las mujeres muestran porcentajes de participación superiores a los de los hombres, lo que cambia de un estado a otro es el tamaño de la brecha, para el trabajo institucional en la circunscripción esto sugiere una doble prioridad, sostener el compromiso de las mujeres que ya están votando más y al mismo tiempo diseñar intervenciones específicas para los segmentos masculinos con mayor abstencionismo particularmente en contextos urbanos fronterizos y en zonas con alta movilidad laboral.

La siguiente lámina presenta las diferencias entre los porcentajes de participación según el tipo de sección, urbana y no urbana, por entidad federativa dentro de la primera circunscripción.

Lo que se observa es que no hay una regla única, en algunos estados la participación es ligeramente mayor en secciones urbanas, en otros las secciones no urbanas siguen presentando mejores niveles; sin embargo, las diferencias tienden a ser menores que en procesos electorales anteriores, lo cual coincide con el hallazgo nacional de que la brecha urbano-no urbano se ha reducido.

Para la Primera Circunscripción esto es relevante, porque su composición territorial es muy heterogénea, tenemos zonas metropolitanas como Guadalajara o Tijuana, pero también extensas áreas rurales en Durango, Nayarit o la Sierra de Chihuahua.

El mensaje es que no basta con asumir que lo rural participa más, hay que mirar entidad por entidad y dentro de ellas Distrito por Distrito.

De esta lámina se presenta un acercamiento específico al caso de Jalisco. El estado es particularmente relevante por dos razones: por su peso en la Lista Nominal de la Primera Circunscripción y porque al haber tenido elección concurrente de gubernatura se ubica dentro del grupo de entidades donde la participación tiende a ser mayor.

Si leemos la gráfica vemos que Jalisco concentra un volumen muy importante de votantes con tasas de participación cercanas o superiores al promedio nacional y que al interior del estado persisten las mismas regularidades que ya hemos descrito: las mujeres votan más que los hombres, los grupos de 40 a 74 años concentran los niveles más altos de participación y las diferencias urbano-no urbano existen, pero no son tan pronunciadas como en otros momentos de la historia electoral.

Este zoom a Jalisco puede servir como referencia para comparar el comportamiento de otros estados de la circunscripción, en especial aquellos que no tuvieron elección de gubernatura y que muestran niveles de participación más bajos.

Con estas dos últimas láminas se presentan los comentarios finales del estudio y algunas recomendaciones que dialogan directamente con la realidad de la Primera Circunscripción.

A nivel nacional subraya dos desafíos: aumentar los niveles de asistencia a las urnas de la ciudadanía en general y cerrar las brechas territoriales poniendo especial atención en las entidades del norte del país.

De manera específica el estudio recomienda analizar con mayor detalle el abstencionismo en el norte, facilitar mecanismos alternativos de votación como urna electrónica o voto por Internet y dirigir campañas de difusión y educación cívica a los grupos de edad más jóvenes, con la idea de que si logramos que voten hoy estaremos sembrando mejores niveles de participación en las siguientes generaciones.

Para la Primera Circunscripción esto se traduce en acciones muy concretas, focalizar esfuerzos en Baja California y Sonora, que han mostrado bajos niveles de participación, aprovechar los (Falla de transmisión) de éxito en distritos con participación alta (Falla de transmisión) como laboratorios de buenas prácticas y seguir construyendo estrategias con enfoque de género que reconozcan el papel central de las mujeres en la vida electoral de la región.

(Falla de transmisión)

Finalmente, después de nuestros patrocinadores; no tenemos patrocinadores, sólo somos nosotros en el INE, esta lámina incluye la referencia al micrositio o al material donde se puede consultar el estudio completo y las monografías estatales y distritales.

Es importante subrayar que lo que hoy presentamos es sólo la punta del iceberg, detrás de estas gráficas y cuadros, hay cuadros con estimaciones puntuales e intervalos de confianza que pueden ser utilizados por juntas locales y distritales, por áreas de Capacitación, por Educación Cívica y por las propias Vocalías de Organización para diseñar intervenciones específicas.

Cierro esta presentación retomando una idea central, la participación ciudadana no es un dato estadístico, es un proceso en el que podemos influir.

El estudio muestral nos dice dónde estamos, quiénes están votando, quiénes se están quedando fuera y en qué territorios se concentran los desafíos.

El reto para el INE y para las autoridades electorales locales de esta circunscripción es convertir estos hallazgos en decisiones concretas, en mejores estrategias de capacitación, en mensajes más pertinentes para las juventudes, en acciones afirmativas que faciliten el voto de mujeres que enfrentan condiciones adversas. Solo así la estadística deja de ser un documento más y se convierte en una herramienta viva para fortalecer la democracia en la región.

El estudio es amplísimo, no terminaríamos en toda la tarde en estarlo viendo y en ir viendo cada una de las partes.

Consúltenlo, pero bueno, aquí es una presentación general, particularmente para la Primera Circunscripción.

Gracias.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchas gracias, Consejero Martín.

Nuestros invitados eran para ver si estábamos atentos y atentas. A ver, la verdad es que son datos muy importantes los que tenemos y las lecturas y las conclusiones a las que podemos arribar, pero lo que sí les puedo asegurar es que en todos los datos que tenemos las mujeres participan más, como funcionarias de Mesas Directivas de Casilla, como votantes, como militantes de partidos.

Y decían que no estábamos, que no queríamos, pero bueno, hasta aquí me quedo.

Vayan por favor preparando sus preguntas para que podamos hacer esto posible. En tanto, ustedes van preparando sus preguntas, le voy a dar el uso de la voz a la maestra Brenda Judith para los comentarios.

Creo que ese micrófono se oye un poquito más.

Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco, Brenda Judith Serafín Morfín: Muchísimas gracias, Consejera. Buenas tardes a todas y a todos.

Es un gusto estar esta tarde aquí en el stand del Instituto Nacional Electoral. Qué bueno que están aquí otra vez en la Feria Internacional del Libro.

Saludo con mucho gusto a la consejera, creo que un poquito mejor, Claudia Zavala. Gracias, consejera.

Al Consejero Martín Faz, al Doctor Hurtado, al delegado, al Doctor Zamora. Muchas gracias por la invitación.

Se agradece que el Consejero Martín Faz haya hecho una presentación ejecutiva de un estudio que es bastante robusto. Cuando me aproximé al estudio era mucha información.

Celebro que la Dirección de Organización hubiera hecho este estudio con una metodología rigurosa que es incuestionable.

Hay que recordar que la fuente para esta información fueron los cuadernillos de los listados nominales que se utilizaron el día de la votación en las casillas y que corresponde a unas muestras de más de 20 mil casillas que se eligieron de forma aleatoria.

Creo que este estudio es un estudio que no tiene otro equivalente en el mundo, digo, por lo menos yo no lo conozco. Yo creo que el esfuerzo o las instituciones que organizan elecciones en otros países no han llevado hasta ese extremo, hasta ese nivel de voluntad y de esfuerzos para entender cómo se comportan las ciudadanas y los ciudadanos al momento de votar.

Considero que este no solo son cifras, sino una radiografía muy clara de cómo fuimos a votar las ciudadanas y los ciudadanos en 2024, cómo lo hicimos también.

También considero que el Instituto Nacional Electoral con este estudio se apega a la máxima publicidad porque este estudio está a disposición de todas y todos, pero además está abriendo espacios como esto para que podamos entrarle al estudio de los datos que es lo que nos tiene reunidos aquí.

Y cuando agarramos nosotros el estudio de manera natural, quienes nos dedicamos a los temas electorales, las autoridades, los estudiosos, pero también las juventudes tal vez pueden sentirse mucho interés particularmente por decir, ¿cuál fue la entidad que más votó y cuál fue la que menos votó?

La que más votó fue Yucatán, la que menos votó fue Baja California.

¿Cuál fue la participación global en este proceso electoral? Y de acuerdo a un dato que acaba de dar el Consejero Martín Faz, pues fue del 59.8, yo tenía 58.7, está bastante aproximado del Padrón Electoral, estamos igual me parece.

¿Cuál fue el grupo que más votó? Votaron los adultos mayores y en contrasentido las personas más jóvenes fueron las que menos votaron.

Y como ya lo repitieron en todo el estudio, pues ni más ni menos que las mujeres fuimos las que más acudimos a las urnas a votar.

Yo creo que este estudio abre la conversación para analizar la solidez de nuestra democracia, porque más que concentrarnos en las instituciones, en los partidos políticos, nos estamos viendo qué es lo que está sucediendo con las ilusiones de ciudadanos y su papel votando en cada elección.

Se logra una imagen muy interesante de lo que sucede en México, porque hay datos que son pues muy esperados o que son muy… sí, que todo mundo supone que van a suceder.

Por ejemplo, que las votaciones en las elecciones intermedias son menores que cuando se elige al Presidente de la República y esto está muy vinculado a que la mayoría de las personas por el presidencialismo considera que esta figura es la más importante y acude en mayor medida a votar en las urnas.

Otra tendencia común es que las personas participen más mientras más edad tenga y esto se pueda deber a que las personas… o ¿cómo es que las personas se aproximan al estado? Es decir, la relevancia y la importancia que ellos descubren al emitir su opinión y acudir a las urnas a votar.

También llama mucho la atención que, aunque dijimos que los jóvenes son los que menos votan, hay un segmento que es el de los 18 años, quienes van luego a sacar su credencial de elector, son los que más votan y pues comparto la opinión, quién cuando tuvo su credencial de elector no contaba los días para ejercer pues una primera acción, digamos, como de la adultez, un símbolo de adultez, que vayas, emitas tu voto, participas de manera formal, digamos, en las decisiones de tu país.

Ahora, ahí está la generación Z, a pesar de que la última elección presidencial había dos mujeres de edad mediana, digamos, y había un candidato hombre más joven y que se centraron las campañas, no todas, digamos, pero en otros medios, ya no tanto en Facebook, porque se considera que Facebook es para gente más como de nuestra edad, supongo, pero exploraron el TikTok, hicieron unas campañas más disruptivas y, sin embargo, parece que estos esfuerzos de los partidos políticos, incluso de algunas instituciones, porque todos lo vimos aquí particularmente en Jalisco, el Instituto Electoral desarrolló una campaña estratégica que estaba muy enfocada en las juventudes y, bueno, los resultados están a la vista.

También cayó el voto de las personas de más de 80 años, digamos más de la de 85 años, pero creo que ahí está más vinculado a los temas de la salud que tienen estas personas, entonces tal vez ahí, en ese segmento más que una promoción del voto, lo que necesitan ellos es eliminar algunas barreras para que puedan acudir a emitir su voto.

Ya el Instituto Nacional Electoral tuvo esta excelente idea de tomar el voto de las personas que se encontraban en situación de postración y creo que ahí está un buen avance para replantearse y pensar en estas personas con este segmento de edad.

Ahora, en teoría también nosotros esperaríamos que las personas con mayor nivel socioeconómico, que se vincula muchas veces con un mayor nivel educativo, acudan más a las urnas a votar y el estudio revela que esto no sucede.

El tema de género, que lo mencionó el Consejero Martín Faz, en todas las entidades votamos más las mujeres, pero hay un dato que me parece muy importante.

En la elección presidencial de 2024 hubo menos votación que la que hubo en el 2018; sin embargo, la votación que menos se decayó fue la de las mujeres, ésa se mantuvo más o menos de manera persistente.

Pero además llama la atención que las mujeres que más fueron a votar y donde más diferencia hay entre los hombres, con más de 10 puntos, es en esa generación o en esa edad como de 29 a 49, que es donde se considera que las mujeres somos más productivas o tenemos más actividades, tenemos trabajo, el cuidado de los hijos y a pesar de ello, ahí es donde se acentúa, es decir, los hombres en esa edad que también es productiva no acudieron en la misma medida a las urnas y esto es un punto relevante.

Además, los hombres votan menos, pero además votan menos en zonas urbanas, eso es otro dato importante.

Un dato que va muy bien es que la votación de las mujeres también crece muchísimo cuando las elecciones son concurrentes a gubernaturas, por ejemplo, la Presidencia de la República.

Algunas de las razones por las que la baja participación se ha incrementado es porque hay violencia, hay que decirlo, hay lugares donde la gente decide no votar por cuestiones de seguridad y me parece que es un elemento, por supuesto, súper válido, pero también que hay que tener a la vista de todas las autoridades que estamos involucrados.

Esta cantidad de datos nos permite ir formulando hipótesis justo para tratar no sólo de observar, sino de entender las tendencias que estamos observando en la participación electoral.

Si nosotros deseamos que la participación de las ciudadanas y los ciudadanos se incremente a niveles, digamos, por arriba del 70 por ciento tal vez, no sé, es una propuesta que puede ser disruptiva, puede pensarse que el voto sea obligatorio.

Pero no basta que sea obligatorio, hay lugares en América Latina donde no obstante el voto es obligatorio, tampoco hay mucha participación, pero no hay participación porque las sanciones que se dan a las personas que no votan no suelen ser bastante duras o bastante efectivas.

Entonces hay una correlación, más allá de que estemos de acuerdo o no en que sea o no obligatorio el voto, es un elemento que hay que considerar.

Yo creo que ya estoy sobre mi tiempo y hasta aquí dejaría mi participación.

Muchas gracias.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchísimas gracias, Magistrada Brenda.

Pues ahora le doy el uso de la voz, Doctor.

Por favor, Javier, adelante.

Analista, Javier Hurtado González: Muchas gracias, consejera Claudia Zavala.

Muy buenas tardes tengan todas y todos ustedes.

Me da mucho gusto saludar a muchas caras conocidas, amigos antiguos que hacía tiempo que no veía, conocidos, compañeros de hace tiempo. Mucho gusto estar con ustedes.

Quiero en principio felicitar al Instituto Nacional Electoral por este espléndido estudio, este diseño muestral para conocer el comportamiento electoral de las elecciones de 2024. Me parece a mí que es un estudio muy revelador y de la mayor importancia.

Ya el Consejero Martín Faz hizo una muy detallada y muy didáctica presentación acerca del contenido del estudio muestral.

Entonces yo me voy a referir básicamente a cuestiones muy generales bordando sobre lo mismo.

A mí me parece que el estudio contiene tres hechos o verdades incontrovertibles. Primero, que la participación ciudadana en elecciones en nuestro país va en caída libre, es decir, pasamos de los datos que se dan aquí del 77 por ciento en 1994 al 59.8 por ciento en 2024; 17.4 puntos perdidos en 30 años a razón de poquito más de medio punto por año. Me parece grave.

Incluso este resultado de la elección del 24 incluso es peor que la del 91, que fue elección intermedia, porque en el 91 fue el 66 por ciento, o sea, 6 puntos más que la del 24, y no fue presidencial.

¿Qué está pasando? No sé, enseguida voy a abordar sobre eso.

El otro hecho que me parece muy importante, digamos, ese es un dato preocupante, pero junto a ese dato preocupante hay otro también muy preocupante que ya se dijo, los jóvenes no votan.

¿Por qué no votan? Bueno, eso trataré ahorita enseguida de elucubrar acerca de eso.

Y el tercer punto que me parece importante y que es positivo y que ya se mencionó, es que las mujeres participan más que los hombres.

Bueno, ¿y por qué será que las mujeres participan más que los hombres? Bueno, vamos a tratar de encontrar la piedra filosofal de eso.

Antes que nada, quisiera mencionar, con respecto a la baja participación de los jóvenes, que creo que es un dato cuestionable, yo pienso que esto se debe a una suerte, una especie de desencanto que se refleja más en los jóvenes, pero en general entre toda la población con la democracia y eso es algo que no solamente sucede en México, sino en todo el mundo, es decir, en todos los países estamos observando esto.

Hay incluso quienes han acuñado, el politólogo español Manuel Alcántara, dice que se trata de una fatiga democrática. Yo no creo que sea el concepto adecuado, que la fatiga más bien es de las personas, no creo yo que la democracia pueda estar fatigada.

Yo creo que en todo caso la democracia sería ineficaz, en todo caso la democracia, habría un desencanto con la democracia.

¿Pero fatigada? ¿Pues cómo fatigada? ¿Qué? ¿La traías corriendo o qué?

Entonces, esa es una situación que se observa en muchas partes. Entonces, en el asunto particular de los jóvenes, insisto, creo yo que también eso tiene que ver en que ellos no se sienten representados ni identificados con los partidos políticos y sus candidatos, me refiero a los candidatos de los partidos, no de los jóvenes, porque hay un divorcio enorme.

Entonces, los jóvenes no ven nada ahí que los represente o que refleje de alguna manera sus aspiraciones y además no le encuentran sentido en ir a votar porque ellos no ven que el ir a emitir un voto pueda traducirse en un efecto positivo en su futuro, en su vida, en sus expectativas, en sus anhelos, en sus aspiraciones.

Entonces, simple y sencillamente, el joven va a los 18 años y vota, estrena su credencial y queda convidado a no volver a ir a votar al menos hasta que cumpla 25 años.

¿Por qué? Porque ya está en una edad adulta, ya es un poco más responsable, a lo mejor le dicen o lo conminan en su trabajo ir a votar o qué sé yo.

Pero entonces, a mí me parece que ese es un punto grave, crítico, yo pienso que deberíamos de poner atención en eso, definitivamente.

¿Por qué las mujeres participan más? Que eso es un punto negativo, positivo, perdón.

Bueno, hay quienes en términos demográficos han dicho, y me parece válido, bueno por una razón muy simple y elemental, porque demográficamente son más las mujeres que los hombres, tan sólo en el Padrón, en la Lista Nominal hay como cuatro millones más de mujeres que de hombres, entonces ahí tenemos un sesgo automático del cuatro por ciento.

Y el otro factor que también he visto por ahí es que dicen: “bueno, es que la esperanza de vida de las mujeres es mayor que la de los hombres, las mujeres viven entre 76 y 78 años y los hombres de 72 a 73”, entonces en consecuencia es lógico que van a ir a votar más mujeres, pero yo pienso que sumados a ambos casos ni así se llega al 9.5 por ciento de diferencia, habrían en todo caso una diferencia de un cuatro por ciento o cinco por ciento quizá, de que hay una mayor participación de las mujeres.

Y yo pienso que ahí, por ejemplo, pues vale la pena elucubrar y en principio, la verdad sinceramente felicitar a las mujeres, sinceramente, porque son más ciudadanas y tienen mayor conciencia cívica que los varones, es que esto la verdad es encomiable y ahí me parece digno de ser resaltado.

¿Por qué será que van más las mujeres? Bueno, aparte de esas razones que dije a demográficas, ¿por qué? Porque a mi modo de ver, las mujeres son el sostén no económico, el sostén moral del hogar, son las que están a cargo del hogar y son las que llevan a su cuesta el saber si el dinero que les da el esposo les alcanza o no les alcanza cuando van al mercado a comprar sus cosas.

Además, también porque las mujeres como siempre han sido relegadas y han sido discriminadas, la forma como ellas sienten que pueden ser tomadas en cuenta es yendo a votar y además también como mecanismo de protesta por la violencia que sufren cotidianamente ellas en sus diferentes formas.

Y además también una cosa positiva es que se sienten motivadas a ir a votar, pues por el asunto de la paridad total que se aprobó en 2019, entonces dicen: “bueno, si yo participo en política antes no había ninguna posibilidad de que yo llegara a ocupar un cargo público, ahora sí, entonces me voy a estrenar yendo a votar y a lo mejor después en tres, cuatro, cinco, seis años vayan y voten por mí”.

Entonces, yo creo que ahí hay una motivación y yo creo que sí es importante seguir estimulando esa participación de las mujeres, incluso utilizarlas, invitarlas para que vayan y difundan la importancia de participar en las elecciones.

Bien, concluyo con el aspecto negativo que es el asunto del descenso en la participación ciudadana, que se observa a nivel general, que yo dije esto también es parte, digamos, de una suerte de fatiga democrática.

Aquí quisiera yo aclarar lo siguiente, no todos los países en donde la gente va y participa abrumadoramente son los más democráticos, no necesariamente, pues si a esas fuéramos Cuba sería el país más democrático, no necesariamente.

Entonces, yo creo que, en todo caso, la participación ciudadana en procesos electorales es una de las expresiones que puede tomar la participación política en una sociedad democrática.

Ahora bien, en la participación ciudadana y en la participación electoral, como que hay dos tensiones, dos tendencias. Los que dicen que es recomendable que haya la mayor participación posible, un poco basados en las teorías de Rousseau; y los que dicen que no, que solamente el ciudadano se tiene que limitar a ir a votar ocasionalmente y dejar el gobierno en manos de los políticos, que el ciudadano solamente tiene que ir y votar. Y es la teoría de Schumpeter, ¿no?

Entonces yo pienso que ni la una cosa ni la otra, o como se dice coloquialmente “ni tanto que queme al santo ni tampoco que no lo alumbre”. Yo pienso que ni tan altos niveles de participación que pueden generar una sospecha de que estén obligando a los electores a ir a votar, como tampoco que las casillas y los procesos electorales estén deshabitados, desangelados y no se paren ni las moscas, como ocurrió con la elección judicial, ¿no? Entonces yo pienso que ni una cosa ni la otra.

Para resolver estos problemas ha habido países que han ensayado el voto obligatorio y hay otros que no tienen el voto obligatorio. Ustedes se sorprenderán; bueno, hay 200 países que no tienen el voto obligatorio y 24 que sí lo tienen, entre ellos uno es México.

Ustedes se van a sorprender, van a decir “bueno, ¿cómo que México tiene el voto obligatorio?” Sí, claro, pero no se aplica; no se aplica la sanción que está prevista en la Constitución, que es la pérdida de los derechos políticos (Falla de transmisión) no se aplica.

El 38 constitucional lo dice y te remite al 36, pero no se aplica. Entonces, bueno, yo lo que quiero señalar con esto es que hay países que no tienen el voto obligatorio y tienen porcentajes de participación que rondan el 85 por ciento, sí, como Dinamarca, Hungría.

Y hay otros países, como Australia y Uruguay, que tienen el voto obligatorio y superan el 90 por ciento.

México tiene el voto obligatorio, pero no lo aplica. Es uno de los pocos 11 países de América Latina, de los 20 del mundo que tienen el voto obligatorio y no lo aplica.

Bueno, y aquí dejo entre paréntesis, pues valdría la pena pensar y valorar si convendría aplicar eso para generar una mayor participación.

Concluyo, para no pasarme, ¿qué es lo que se podría hacer para revertir esta tendencia al deterioro democrático, a la erosión democrática, a la desconfianza en la eficacia y efectividad de los gobiernos democráticos?

Yo pienso que, en esto, sin duda el Instituto Nacional Electoral tiene una enorme responsabilidad, hace lo que puede con todo lo que le quitan, sí, pero creo que debería incrementar sus labores de difusión de la cultura antidemocrática y, sobre todo, coordinarla con las escuelas.

Y aquí es donde yo encuentro el por qué los jóvenes no participan. Miren, yo tengo mi experiencia como profesor, hace todavía un semestre estaba dando clases a nivel licenciatura, no digo ni que universidad ni que licenciatura, pero de cuarto semestre de Ciencias Sociales los muchachos, les pregunté: ¿cuántos diputados hay? No saben.

Les pregunté: ¿cómo se integra la Cámara de Senadores? ¿Hay Cámara de Senadores? O sea, es triste, es patético en verdad, o sea, los jóvenes no saben, y lo digo con todo respeto, nada de nada.

No saben leer, no saben hablar, no saben escribir. ¿Cómo quieren que vayan a votar?

Entonces, yo pienso que el gran error fue de las escuelas, que quitaron esos textos, no sé si a usted le tocó, consejera. Benito Solís Luna, “El Hombre y el Derecho”, un niño, yo en 1969 llevaba ese libro, sabía más de Derecho Constitucional que los estudiantes de Derecho que llevan el curso de Derecho Constitucional.

Entonces, yo pienso que, si los jóvenes no van y votan, mucho está fallando el sistema educativo y también los partidos políticos que no logran hacer los jóvenes de interés participar.

Y yo creo, para ya concluir, que también se podría facilitar mucho. Quizás los jóvenes no van y votan porque dicen que ¿por qué yo voy a perder el tiempo ahí en eso, que no me va a generar ningún beneficio?

Y además es ir a participar en un sistema con métodos arcaicos, anticuados y obsoletos, y que de hecho lo son. Es que es increíble la forma como se vota.

Estamos, en el año 1996 votando con los criterios, procedimientos de la reforma del 96. Ay, por favor, ¿en qué cabeza cabe eso de sacar una sábana afuera de las casillas? Eso es de la época del caldo, por favor.

Entonces, ¿por qué no aplican el voto electrónico? Con el voto electrónico yo les aseguro que muchos jóvenes irían a votar.

Es absurdo negarse aplicar el voto electrónico cuando tú desde tu teléfono puedes transferir la cantidad de dinero que quieras con toda seguridad.

¿Cómo no vas a poder emitir un voto, por favor, con seguridad? Que no pongan pretextos para eso.

Los partidos políticos que son los que hacen las leyes, que son los que se oponen, porque le ven desconfianza. ¿Pero cuál desconfianza? ¿Tienen desconfianza ellos cuando transfieren dinero? No, ¿verdad? Pues es lo mismo con el voto.

Bueno, ya no me extiendo más.

Felicito al Instituto Nacional Electoral por ese estudio. Creo que da para muchísimo, para pensar mucho sobre el futuro de la democracia en nuestro país.

Muchas gracias.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchísimas gracias, Doctor Javier.

Miren, yo coincido completamente, voto electrónico, participación. Pero hay algo que creo que sí nos hace clic y que debemos reforzar porque el INE nació desde la cercanía con las y los ciudadanos.

Y creo que es un momento de retomar nuestro trabajo de base, después de tener unos años recientes de ataque para el INE, en donde resistió, pero bajó un poquito la aceptación del INE y hay que remontar y hay que acercarnos a los años de educación cívica, precisamente, coincido completamente, pero hay que estar presentes.

Y aquí hay muchos de nuestros compañeros que hacen eso y que hemos estado haciendo eso y que hay que fortalecerlo.

Es la forma de conservarnos como una institución cercana a las personas, a todas las personas, no sólo a la ciudadanía.

Y creo que también, no sé si el reclamo, Doctor, sea con la democracia o con los gobiernos y los representantes.

Me parece que son los problemas, eso, la ineficacia de los gobiernos que le quieren atribuir a la democracia, pero justo lo que hay que ver con las juventudes es eso, esas diferencias.

Les comento del voto obligatorio, lo acabo de señalar yo, estamos en una sociedad en la que unos y otros y entonces yo les dije: bueno, si el pueblo es tan diverso, si se usa la palabra pueblo para decir que son unos y no los otros, entonces hagamos eficaz ese texto constitucional que nos incluye a todos, que es voto obligatorio y apliquemos la consecuencia.

Eso lo dije en la mañana de un día, en la noche llegué con mi mayor juzgadora, que es mi hija adolescente, joven, “¿cómo que estás postulando el voto obligatorio? ¡Represora!”

Y yo dije: “¿por qué no? Si está en la Constitución, ¿por qué no nos hacemos cargo todos de nuestros derechos, pero también de nuestras obligaciones?”

Yo creo que hay que trabajar ahí en un momento. 1994 fue un año que subió muchísimo la participación por ciertas condiciones sociales y no creo que tengamos que esperar ciertas condiciones sociales para plantearnos la necesidad de subir la participación, porque no fueron gratas esas condiciones sociales, porque veníamos en un boom de condiciones sociales de cambio, pero sí creo que hoy tenemos que transformar muchas cosas a partir de estos estudios.

Pues muchísimas gracias por haberlo presentado y yo vi muchas preguntas de aquel lado.

¿Quién se anima? ¿Qué quieren que conversemos aquí entre todos? Porque no me han llegado papeletas.

¿Les pasaron papeletas? ¿No? Acá están, me las pasan, por favor, porque si las tienen ustedes, aquí hay una.

Recibo esas dos y empezamos el primer bloque de conversación para que sigan haciendo sus preguntas y podamos platicar.

Verónica González nos dice: “Si el desencanto puede ser un factor que influye en una baja votación de jóvenes, ¿cómo motivar la participación electoral desde los partidos políticos, candidatos, candidatas e instituciones electorales?

Y luego Juan Francisco nos dice: “Son culpables de la no participación de los jóvenes las y los malos candidatos corruptos de todos los partidos políticos”. Esto es una afirmación.

Y Rosa María López: “¿Cómo vincular la educación con la política para que sea efectivo el resultado? Y esta va para usted, Doctor Javier”. ¿Cómo vincular la educación con la política para que sea efectivo el resultado?

¿Les parece si empezamos con la Magistrada? Si Martín quiere participar y luego ustedes dos para que se haga dinámico.

Adelante, Magistrada.

Magistrada del Tribunal Electoral de Jalisco, Brenda Judith Serafín Morfín: Gracias.

Pues yo voy a retomar las preguntas que están muy vinculadas en cuanto a la participación de las juventudes en las elecciones.

Hay contextos y hay situaciones particulares, por ejemplo, el Instituto Nacional Electoral ha llevado consultas a la niñez y a las juventudes, y ha generado una participación elevada; los niños y las niñas desean participar, hacen preguntas adecuadas a su situación, a su edad, a los contextos que tienen y (Falla de transmisión) el cumplimiento además constitucional de la educación cívica está reflejado en este esfuerzo fundamental que están haciendo.

Me parece que no hay continuidad tal vez, y no digo del Instituto, sino también no se ha recuperado a nivel escuela y cómo tomamos decisiones dentro del núcleo familiar, cómo nos relacionamos con los otros, con los vecinos.

Estamos viviendo en una sociedad donde todos estamos pegados a un celular, ciertamente las aplicaciones, lo vinculo con la votación que me parece extraordinario, pero cada vez somos personas más solitarias, más egoístas, no tenemos actividades que nos vinculen en comunidad y creo que todos estos factores pueden ayudar a que la participación se incremente, a que las juventudes además puedan interesarse en acudir a emitir una opinión, pero también es cierto que, como hemos dicho, las juventudes no encuentran en las candidaturas, no se encuentran reflejados, no ven algo que les atraiga, pero además creo que ellos sienten que su voto no va a resolver ningún problema, ellos creen que esto ya está decidido o que incluso emitiendo una opinión por una persona que los pueda representar, esto no significará que ellos tengan mejores oportunidades que las personas que tienen carencias muy (Falla de transmisión).

Entonces creo que es un trabajo conjunto, estas reuniones y deliberaciones tal vez a nosotros, ojalá tuviéramos las respuestas, tal vez si las tuviéramos estas cosas no ocurrirían, pero es muy importante escuchar a este grupo de juventudes entre los 18, los (Falla de transmisión) y cuáles son las motivaciones para no acudir.

A mí me parece que es una mala decisión no votar; pero, sin embargo, tal vez lo hablo desde mi formación, desde mi labor como magistrada en este momento, anteriormente en el tema del OPL y pues bueno, creo que estos son algunos elementos que se pueden considerar y esa es mi opinión.

Analista, Javier Hurtado González: Sí, bueno, ¿cómo vincular la educación con la política?

Bueno, a mí me parece muy sencillo, en términos pedagógicos o didácticos, pues con la enseñanza de la Constitución. La Constitución no debe de ser un texto para que sea leído en las Facultades de Derecho, la Constitución debe de ser leída por todos los mexicanos, aunque no hayan terminado la primaria.

A veces veo cuando les dicen, aquí les preguntan, aquí en la Feria Internacional del Libro a un destacado personaje, ¿cuál es el libro que más le impresionó en su vida? Y no supo contestar, pues es que la respuesta era muy sencilla, la Constitución, pero como nunca la había leído, pues no se le ocurrió; pero era la respuesta más simple del mundo.

Cuando les pregunten: ¿cuál es el libro que más ha influido en tu vida? La Constitución, punto.

Entonces llevar en la secundaria los textos de civismo que se quitaron, no sé por qué, se quitaron y fue desastroso eso, definitivamente.

Bueno, pero hay también muchas otras formas de vincular educación con la política, al interior del mismo centro escolar, en los procesos de toma de decisiones, hay diferentes formas y maneras de formar ciudadanía.

Miren, aquí está presente un destacado amigo mío que fue regidor en el ayuntamiento de Guadalajara y no me dejará mentir, había, bueno hay todavía una Asociación Internacional de Ciudades Educadoras y esa Asociación Internacional de la cual formaba parte Guadalajara, no sé si siga formando parte, tiene que ver con el hecho desde que incluso el diseño urbano de una ciudad genera ciudadanía.

Los letreros, las señales, las paradas del autobús, la forma de ceder el paso, todo eso genera ciudadanía; entonces, hay muchísimas formas de generar ciudadanía hasta en el diseño urbano. Es cosa de que se quiera y que se emprenda con voluntad política.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchas gracias, Doctor.

Tenemos otras dos preguntas, no sé si haya más preguntas para que me las pasen, las vaya concentrando, porque es la forma de generar este diálogo.

Dice: “realmente el control político más presente en el INE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ha afectado su funcionamiento e imparcialidad?”.

Gabriel nos pregunta, pero Gabriel, no entiendo muy bien, pero entiendo que nos quieres cuestionar, o a usted, Doctor, por la propuesta de obligatorio y cómo se hace, no logro entender la otra parte, ¿sancionable?

Sí, gracias, Gabriel.

Entonces, obligatorio y sancionable el voto, entonces empezamos ahora por acá, magistrada, y luego te damos el uso de la voz. Y no sé si Luis quieras participar, me dices para pasarte el micrófono también.

Vocal Ejecutivo de Junta Local, Luis Zamora Cobián: A ver, se mencionó como mecanismo viable para incrementar la participación en general, el voto electrónico.

Hoy se habla ya de análisis precisamente para poderlo utilizar, y es curioso porque la décima ocasión que el Instituto Nacional Electoral organizó la Consulta Infantil y Juvenil, es decir, hace un año en noviembre, participaron más de 10 millones 700 mil niños, niñas y jóvenes entre los 3 y los 17 años de edad.

De estos 10 millones 700 mil, el 88 por ciento, es decir, nueve millones y medio, lo hicieron por la vía de los dispositivos. Particularmente las y los jóvenes de 14 a 17, tuvieron que responder 26 consultas que se le hicieron, preguntas que se le hicieron, de un universo de 92 posibilidades de respuesta, y lo hicieron.

Entonces, claro que es viable utilizar los dispositivos o la vía electrónica, que además ya la aplicamos con el voto de las mexicanas y mexicanos residentes en el extranjero.

Esto no ayudaría solamente a la condición de la participación, las condiciones de la participación, sino que favorecería en espacios donde prevalece la inseguridad.

No estaría expuesta ni expuesto un ciudadano, una ciudadana a alguna condición si lo hiciera desde un dispositivo.

Entonces vale la pena el que este análisis que ya inició, que la verdad tenga un fin pronto, a manera de que no se vaya en picada esto y que haya la participación, ¿por qué? Porque con las y los jóvenes lo que hemos encontrado también es que necesitamos vías de comunicación con esa generación de personas.

Decían y dicen bien, o sea cuando nosotros hace dos años y medio traíamos el Facebook, llegó una jovencita al área de Comunicación y nos dijo: “esto ya no funciona; necesitamos el Instagram, necesitamos TikTok y necesitamos estas otras vías”. Y, qué bueno, porque también generacionalmente nos casamos con ciertas propuestas de comunicación tradicionales que son buenas, son favorables para todos, digo, habemos gente ya con el Inapam y demás, entonces también tenemos derecho a nuestras vías y los y las jóvenes precisamente logramos un mayor impacto.

Es cierto y muy lamentable que no haya esa conciencia del bienestar colectivo o social y el compromiso tan alto que tienen las juventudes con el país y lo que mueve a este país efectivamente lo dispone la Carta Magna, la Constitución y es básico o debiera ser básico que todas y todos al nivel que estemos conozcamos precisamente lo emanado por la constitución política de los Estados Unidos Mexicanos.

Por último, en cuestión del voto que sea obligatorio, es constitucional en México, pero me tocó en 2006 a ir a un referéndum a Bolivia y pueblos originarios, mucha gente de pueblos originarios fueron encaminados hacia los centros de votación por personal militar.

En Bolivia no se mueve un vehículo el día de la jornada electoral, ninguno excepto los que aprueba la autoridad electoral y lo que yo observé es que entraban a salones, les daban unas papeletas muy grandes, todo era texto y salían y me llamó la atención que les pintaran su dedo y ponían una cruz en lugar de una firma, entonces yo les pregunté ¿saben leer y escribir? me dijeron: “no”, les dije: “¿hay alguien que les esté orientando respecto al contenido de la boleta?”, “tampoco”.

Entonces es obligatorio, hubo una participación muy alta, pero ni siquiera sabiendo lo que realmente ellos contestaban en cuanto al contenido de la boleta, entonces el Instituto Nacional Electoral, con esto y con las observaciones internacionales que realizamos los miembros del Servicio Profesional Electoral Nacional, nos sirve también para la cuestión comparativa con otros países y poder traer a México o practicar en México mejores condiciones.

Sería cuánto.

Gracias.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Es que éste se escucha mejor.

Adelante, Doctor.

Analista, Javier Hurtado González: Gracias.

Sí, un poco en relación con lo que dijo Luis y Gabriel.

Efectivamente él decía “obligatorio y sancionable”, sí. En México; bueno, la sanción está en la pérdida de los derechos políticos por un año.

Alguien me decía hace un momento “ah, por un año, pues no pasa nada”. No, no te creas, es que muchas veces, por ejemplo, para participar en los procesos esos de designación que (Falla de transmisión) los congresos a ciertos cargos te exigen estar en pleno uso de tus derechos políticos.

Entonces sí es importante, aunque sea por un año perderlos, creo que sí pesa, ¿no?

Es cierto, Luis, me lleva la mente, es que el voto obligatorio se puede convertir en un voto de adhesión al régimen, obligatoriamente.

Entonces yo pienso que sí hay que cuidar mucho que el voto obligatorio sea voluntario, para que sea auténtico y libre. Por ejemplo, Australia, no me van a decir que existen ahí “cochupos”. Tiene el voto obligatorio, nadie me va a decir que no es una democracia y vota más del 90 por ciento de la población.

Y hay también países que no tienen el voto obligatorio, que es una cosa que debemos de cuestionarnos. Por ejemplo, decía yo, Dinamarca, Hungría, ¿por qué tienen esos porcentajes de participación del 85 por ciento? Bueno, pues es una cosa de cultura política y la verdad que eso no se cambia de la noche a la mañana, eso lleva años construirlo, decenios. Entonces no es tan fácil, pero se puede lograr.

Entonces sí hay que tener mucho cuidado en que el voto obligatorio no se convierta en un voto coactivo en favor de un partido o de un gobierno, ¿no?

Y se me pasaba decir en mi intervención primera, uno de los factores también que ha incidido mucho en este alejamiento de los jóvenes y de los ciudadanos hacia las urnas, es el problema de los partidos políticos y la falta de democracia a su interior. Ese es el problema fundamental.

Si ellos son los que monopolizan la postulación de candidaturas y lo que te presentan es lo que ellos cocinan, y si la población ve que los partidos políticos son empresas familiares, son empresas familiares de años, de decenas de años, como el del PT lleva 30 años, desde el 94, es el único Presidente que es.

El de Movimiento Ciudadano, pues todos sabemos quién es el dueño, ahora ya el PRI también ya va a tener dueño, de Morena ya sabemos quién es el dueño; o sea, eso es terrible en México, que los partidos políticos tengan dueño.

¿Dónde queda lo que dice la Constitución, que son entidades de interés público para hacer posible el acceso de los ciudadanos al ejercicio del poder público? Falso, totalmente falso.

Por eso la gente no participa en las elecciones; dicen “yo no voy a servir de comparsa para engordarles el caldo a éstos que se reparten ahí entre ellos los cargos de elección popular”.

Y yo creo que, si seguimos así, pues yo veo que va a seguir cayendo la participación, porque no hay forma como se pueda tener confianza y credibilidad en los partidos políticos.

Estuve revisando las últimas encuestas, es el 23 por ciento de la población únicamente la que confía en los partidos políticos. Están en la lona de todas las instituciones públicas, están peor que las policías municipales, con eso les digo todo; o sea, no hay peor institución en credibilidad que los partidos políticos.

Entonces, si tenemos esos partidos, ¿cómo quieren que tengamos una buena democracia? Pues no.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchas gracias, Doctor.

Magistrada.

Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco, Brenda Judith Serafín Morfín: Gracias.

Yo quiero platicar de la función, no platicar, más bien recordar cuál es la función que tiene el Instituto Nacional Electoral, pues ni más ni menos en ellos recae la organización de las elecciones a nivel federal.

Hasta ahora lo han hecho bastante bien, las decisiones las toma un órgano colegiado, donde hay diversidad de puntos de vista, justo en la propiedad de las opiniones se construyen mejor las decisiones, en el mejor de los casos nadie es perseguido por las opiniones que pueda tener dentro del colegiado.

Y en este momento, ya en el año pasado no sólo organizaron elecciones para elegir a la presidencia de la República, las diputaciones, senadores; también se enfrentaron al reto mayúsculo de organizar una elección judicial por primera vez.

Con algunas cuestiones por su primera vez seguramente, quiero pensar que se podrán corregir, que venían ya bastante complicadas.

Entonces, creo que lo que hizo el Instituto Nacional Electoral para poder echar a andar esa elección es francamente admirable, las condiciones no siempre fueron las mejores.

Y lo que se puede esperar de los Tribunales Electorales es que, ante alguna diferencia, porque las hay y porque la propia conformación política permite que todas las decisiones sean controvertibles, que ellos en el marco de la legalidad resuelvan estas controversias.

Yo sigo siendo fiel creyente en las instituciones y espero que esta correlación funcione por el bien de todas y de todos y por preservar la democracia.

Y esa sería mi participación.

Consejero del INE, José Martín Fernando Faz Mora: Quisiera colocar también sobre la mesa un dato que creo que también es relevante.

Por ejemplo, entre los observadores y observadoras, cuando se pueden inscribir las personas para observar los procesos electorales, el grupo etario que más se anota en estos procesos de observación son los jóvenes. Como funcionarios de casilla son más jóvenes quienes participan.

Es decir, en ese sentido coincido con el hecho de que no resulta tan significativo la participación electoral a los jóvenes, pero, sin embargo, cuando se abre en procesos determinados como el de la observación electoral o el de ser funcionario de casilla, porque aunque te toquen un sorteo, pues finalmente tienes que decir que sí, no te podemos llevar a fuerza, aunque en otros países sí, también es a fuerza ser funcionario de casilla.

Y son las juventudes las que más participan en ello. Tiendo a creer que cuando existe un elemento para el cual hay algo significativo, las juventudes se involucran plenamente.

Y eso también ha ocurrido, por ejemplo, cuando ha habido los sismos en la Ciudad de México, actos de solidaridad a nivel nacional y mundial, las juventudes están presentes.

Quisiera dejar muy en claro que nuestro estudio, por supuesto, habla sobre la participación electoral y por ello es que no hay más que decir que efectivamente ese grupo etario es el que menos participa en los procesos electorales.

Pero como bien señalaba el Maestro Hurtado, las democracias no son sólo los procesos electorales, por supuesto que tampoco hay democracia si no hay procesos electorales. Esa es la puerta de entrada también.

Pero creo que es también un dato importante que también nos puede dar elementos para el análisis de qué cosas son significativas.

Yo también creo que, en buena medida, la oferta política que ofrece, esa oferta política de los partidos políticos, no les es tan significativa a las juventudes en términos generales. Pero en otros procesos de otra naturaleza, las juventudes se involucran y se involucran claramente y creo que eso es importante.

Maestrada, desafortunadamente, sí ya se nos está persiguiendo por dar una opinión en el Consejo General, a la Consejera Claudia Zavala, el OIC, el organismo de la Contraloría Interna le levantó un procedimiento junto con otros dos colegas, porque votaron en cierto sentido; yo creo que eso se va a tener que corregir, porque es algo absurdo.

Sin embargo, ahí nada más se han aventado la pelotita, el OIC, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y luego se lo regresó y que ahora que el Tribunal de Justicia Administrativa y ahora se lo regresó al Órgano Interno de Control.

Es un dato preocupante, muy preocupante y mi completa solidaridad, colega, tú lo sabes. Pero sí lo quería decir porque mi pecho no es bodega, ¿quién dice eso? Ya ni me acuerdo, pero bueno, ese era otro tema nada más.

Y luego por ahí hay una pregunta de que si nosotros en el INE, pues es cosa de que chequen nuestros votos, los votos que emitimos los consejeros en el Consejo General Electoral son públicos e inclusive ahí hay un lugar en donde se puede ver el histórico de los votos que se han tenido. Entonces ahí se puede ver lo que habla por nosotros son nuestros votos.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchas gracias, Consejero Martín, por tus votos te conocerán y te sancionarán ahora.

Pero bueno, se puso buena, pero necesitamos que le activen más ustedes con las preguntas porque está muy buena esta conversación.

A ver, falta de recursos económicos, lamentablemente le ha pegado a la construcción de ciudadanía que hace el INE, ¿por qué? Porque nos dan más facultades sin recursos, menos recursos, menos recursos y más actividades.

Y parece que ese artículo de la Constitución ya no se ve como parte de nuestras atribuciones que es la educación cívica, vean ustedes precisamente la sesión de hoy a las 10:30 de la noche donde nos vamos a hacer cargo del presupuesto.

Y en esa medida es importante que veamos que ese presupuesto castiga los derechos de la ciudadanía, no porque los consejeros queramos, sino porque no hay recursos para hacer todo lo que tenemos que hacer y ahora nos quitó, no el Legislativo, el Ejecutivo recorta el presupuesto que manda el INE, llega recortado a quien es el facultado para hacerlo y todavía nos quitan mil millones más.

¿Qué es esto? Que el INE no puede cumplir a cabalidad su función constitucional para garantizar derechos cuando el Estado no da la suficiencia económica.

Y vean la elección del Poder Judicial; lo digo, lo dije en Consejo y lo diré en todas partes: no es referente para México en procesos electorales, no es referente. Declinamos a muchas cosas que nos dan trazabilidad, seguridad.

Y vean también cómo cada vez menos recursos está incidiendo en la garantía de los derechos y en la eficacia de los derechos político-electorales.

Dos, ¿por qué los partidos políticos sí se pusieron de acuerdo para el voto por internet con residentes en el exterior? ¿Por qué? Ah, no, no es cierto porque los orillamos allá, desde 2012, la Consejera Carla, ahora que está también en este Consejo General y yo, hicimos un movimiento para implementar el voto por internet, lo ganamos en el Tribunal, cuando había un Tribunal sólido que analizaba así las cosas muy bien, y vio la seguridad desde esa modalidad de voto.

La implementamos y dijimos “pues vamos a seguir y vamos a seguir para lograr esa confianza”.

La pasada sesión de Consejo General, si no mal recuerdo, fue un tema que está en el debate.

Yo estoy convencida del voto electrónico y hay que tener cuidados para que esas amenazas no se conviertan en realidad. Y hay formas de tener cuidado, la autoridad electoral lo puede hacer.

Pero también estoy convencida que tiene que ser una decisión de la clase política y de los políticos. ¿Por qué? Porque si no, se nos vuelve un problema en la democracia procedimental y no queremos más problemas en la democracia procedimental.

Pero el problema es que tenemos problemas en el sistema de partidos, en el sistema de representación, donde las juventudes que tienen mayor manejo de toda esta tecnología no llegan, se desencantan, no las dejan llegar, no las dejan incursionarse.

Bueno, pero es que no debemos quedarnos sin hacer nada, creo que tenemos que hacer algo y hay mecanismos y hay voces y hay organización, y lo único que sí les puedo decir, y aquí estamos dos consejeros, es que el INE seguirá haciendo su trabajo para garantizar los derechos de las personas, de todas, no nada más las ciudadanas, de las juventudes, de la niñez.

Esas juventudes tienen voces que nos reclaman lo rancio de nuestra forma de comportarnos, de pensar, incluso de los modelos que tenemos.

Bueno, pues sin la ciudadanía el INE no podría caminar, es una unión que tenemos y sabemos que la ciudadanía es el pilar del INE y seguimos trabajando por ellos.

Pero sí necesitamos, fíjense qué dato tan interesante presenta el Consejero Martín, no es cierto que los jóvenes y las jóvenes y les jóvenes estén ajenos a la cosa pública, están presentes, sólo que no los representan quienes se van a la oferta.

Y hay que oírlos, y lo que siempre les he dicho, hay que dialogar entre las generaciones, porque también nuestra generación está medio rancia o muy rancia, y hay que abrirnos, pero también tenemos cosas que han servido y que consolidan y que también hay que convencer de por qué funciona de esa forma. Este es el proceso dialógico que necesitamos tener entre las generaciones.

Y estos jóvenes de 18 años que van por primera vez hay que retenerlos y hay que conquistarlos, pero no nada más va a ser una tarea del INE o de los OPL, es una tarea que también tiene que ver con otros sistemas constitucionales que tenemos.

Vamos al cierre, ya no tenemos más preguntas. Seguros, díganlo ahora o cállenlo para siempre.

Si no, me voy a despedir porque aquí hay una pregunta.

Pregunta: Bueno, concreta, en abono a lo que dice la Magistrada, con lo cual estoy de acuerdo, tratándose de la participación ciudadana, tenemos que quitar esas barreras.

Ya habló algo de las personas de 80 años en adelante y también coincido con el Doctor Hurtado que el voto electrónico sería una cuestión toral para evitar o quitar esa barrera para que los ciudadanos en general accedieran.

Y esto viéndolo desde otro punto de vista, no solamente en la cuestión de los jóvenes, sino en la cuestión de la inseguridad que hemos visto, que hay lugares que básicamente no se pudieron hacer elecciones constitucionales, eso sería de suma importancia.

La pregunta directa sería, ¿hoy por hoy existe algún proyecto o algo que estén haciendo para el voto electrónico, no solo en el extranjero, sino el voto general en las próximas elecciones constitucionales?

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Gracias. Le voy a pasar a Martín.

Sí tenemos un proyecto, Martín lo está coordinando, entonces a lo mejor rápido.

Consejero del INE, José Martín Fernando Faz Mora: Sí, las elecciones locales de Coahuila, que son las elecciones que habrá el próximo año, se va a implementar el voto por internet de los ciudadanos (…), que son personas que residen en el país.

Hasta ahorita solamente el voto por internet era para los ciudadanos, pero justo en el Proceso Electoral del 2024 personas cuidadoras, justo de estas otras personas que están en situación de postración, de las que hablaba la Magistrada directamente, los cuidadores y cuidadoras dijeron: “oigan, pues es que yo también estoy aquí cuidando a estas personas, o a otras personas con discapacidad”.

Y entonces, el Tribunal, de hecho, tuvimos que ir a recoger el voto de una decena de personas el día anterior de la jornada electoral, eran pocas personas. Pero justo para el 2026 estamos con este proyecto piloto para que estas personas cuidadoras primarias puedan ejercer su voto de manera electrónica dentro del territorio nacional. Desde luego es una prueba piloto para ir avanzando.

Hay que recordar que efectivamente en nuestro país el voto sigue siendo un voto por papel, el desarrollo del voto electrónico implica no solamente avances tecnológicos, sino también muchos elementos de seguridad cibernética, que habrá que seguir explorando para poder llegar a una aplicación de carácter masiva.

Entonces el INE está yéndose con pies de plomo, dicho de esa forma, para ir haciendo proyectos piloto progresivamente, pero el próximo año estamos trabajando ese proyecto en particular para las elecciones de Coahuila y veremos cómo funciona para llevarlas a las elecciones del proceso federal del 27.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchas gracias.

Nos despedimos con, planteo la última pregunta y si gustan ustedes en la última intervención van dando ya su cierre para concluir nuestro evento, no sin antes agradecerle a todas las personas que lo hicieron posible y a quien han estado dialogando a través de estas preguntas.

La ley señala que votar es un derecho y obligación, ¿creen que esta dualidad genere en la ciudadanía la percepción de que es un derecho acudir o no a votar y que reste valor a la obligatoriedad que también se tiene? Y de ser así, ¿cómo cambiar esta percepción?

Magistrada, empezamos contigo.

Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco, Brenda Judith Serafín Morfín: Gracias, ¡qué buena pregunta!

Pues sí, digamos el fraseo del precepto podría, me parece en una primera lectura considerarse de esa manera, ¿cómo hablas de un derecho y luego de una obligación? Sin embargo, creo que los dos conceptos no se contraponen, primero está privilegiando, por supuesto ese privilegio, esa facultad, digamos esa cosa que tú tienes para acercarte y ejercer tu voto y emitir tu opinión.

Y, por otro lado, más bien lo que está haciendo es tratar de apelar al sentido de responsabilidad que supone que tú vayas y puedas elegir a tus autoridades en una elección constitucional y ahora pues a las juezas y magistrados en una elección judicial.

Entonces creo que, aunque parezca que es contradictorio, creo que más que contraponerse se complementan, ya el doctor Hurtado ha abordado en diferentes momentos, ¿en qué consiste esa obligatoriedad del voto? ¿Y por qué no se ha operado tampoco este precepto constitucional? ¿y cuáles serían las consecuencias?

Hasta ahí quiero dejar esto porque no quiero dejar de hacer una aportación en el tema del voto electrónico, rapidísimo, como ustedes saben en Jalisco hemos tenido elecciones constitucionales con urnas electrónicas desde el 2009, han impugnado, nunca se ha dicho que la urna electrónica no funcione, no obstante nuestra urna electrónica transmitía por internet, cuando hemos hecho pruebas piloto ya después de la reforma del 2014 no transmite por internet, que facilita muchísimas cosas, entre otras que el momento de hacer los cómputos hay menos errores y es mucho más rápido para eso.

Sin transmitir por internet, dato puro y duro, me parece que hay suficiente información para que podamos ir con pies de plomo y que puedan impulsarlo pues desde sus espacios, consejeras, consejeros, pero también los legisladores porque esto ya venía avanzando, la reforma del 2014 trajo unas cosas, se llevó otras, entre ellas la posibilidad del voto electrónico.

Agradezco al Instituto Nacional Electoral la oportunidad de estar con ustedes, de dialogar, celebro que sean estos foros así donde la moderación de la consejera fue fundamental para propiciar el diálogo.

Gracias nuevamente y que tengan muy buenas tardes.

Analista, Javier Hurtado González: Pues no me resta sino más que agradecerles a todos ustedes el favor de su atención y formular votos, porque ojalá en la famosa Comisión Presidencial para la Reforma Electoral se les prenda el foco y atiendan, a mí lo que me parece que es uno de los principales problemas de la democracia mexicana, éste del que estamos hablando, el descenso en la participación electoral en las elecciones.

Entonces ojalá que no vayan a salir con el asunto de los pesos y los centavos cuando la verdad, ponerse de “cuenta chiles”, como se dice, cuando en esto no hay que escatimar recursos, sobre todo para crear ciudadanía y difundir la cultura cívica y democrática, o sea, yo pienso que el Instituto necesita mayor apoyo en eso y entrar en coordinación con el sistema educativo nacional.

Ya lo dijo el Licenciado Luis Zamora, que hicieron esa Consulta Infantil y Juvenil, felicidades, pero hay que llevarlo también yo creo que a las preparatorias, yo creo que ahí también y hasta a las facultades, en verdad, eh.

Bueno, pues muchas gracias a todos ustedes.

Un gusto saludarlos.

Consejera del INE, Beatriz Claudia Zavala Pérez: Muchísimas gracias, Doctora Brenda, Doctor Hurtado, que nos acompañan en esto, a todos ustedes.

Vamos a proceder al siguiente paso, que es el reconocimiento a quienes nos acompañaron en esta moderación antes del cierre.

Yo nada más esperaría que los pies de plomo no se conviertan en diques y que podamos seguir convenciendo para avanzar en nuestra democracia.

Sé que sería una buena opción voto anticipado para el personal médico, por ejemplo, para quienes tienen estas cuestiones y hay que cuidar mucho la otra parte, que no se convierta en un voto masivo, pero sí hay formas, estoy convencida de que sí hay formas.

Muchísimas gracias y vamos a entregar el reconocimiento al Doctor Javier Hurtado González, Profesor Investigador del Colegio de Jalisco, por su destacada disposición y valiosa aportación como panelista en la Mesa Análisis del Estudio Muestral de Participación Ciudadana 2024, que contribuye al fortalecimiento del diálogo y al desarrollo de reflexiones fundamentales para la democracia en un marco de colaboración institucional y compromiso con la participación ciudadana.

Muchísimas gracias, Doctor.

Encantada de tenerlo aquí.

Consejero Martín, por favor.

Consejero del INE, José Martín Fernando Faz Mora: Bueno, ya la Consejera Zavala leyó lo que dice.

Y éste es para la maestra Brenda Judith Serafín Morfín, Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Jalisco.

Muchas gracias por acompañarnos y por sus aportes.

Pues, muchas gracias.

La invitación es a que vean este estudio muestral, de verdad es un estudio muestral que vale la pena.

Si ustedes están en alguno de los institutos electorales, si están en la academia, en organizaciones de la sociedad civil o si son chismosos y chismosas profesionales, es un estudio, en verdad, muy interesante y muy sólido, porque no está hecho sobre percepciones, está hecho sobre el Listado Nominal y lo que se llenó el día de la jornada electoral y con una muestra, pero sobradísima, sobradísima.

Entonces en verdad es un estudio, lo pueden consultar ustedes en la página web del Instituto Nacional Electoral, incluso ahí pueden ver el código QR.

Muchísimas gracias y no dejen de participar en todos los eventos que tenemos aquí en el stand del INE, todos los días tenemos presentaciones de libros de distinta naturaleza y todos muy buenos.

Esos son nuestros patrocinadores: los libros del INE.

Bien, muchísimas gracias. Nos vamos a tomar una para una foto oficial, nos van a tomar una fotografía.

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