Presentadora: En este momento da inicio el Panel “Atención y Prevención de la Violencia Política contra las Mujeres en Razón de Género”, para lo cual agradecemos la participación como moderadora de Erika Estrada Ruiz, Consejera Electoral del Instituto Electoral de la Ciudad de México, a quien damos el uso de la voz.
Consejera del IECM, Erika Estrada Ruiz: Gracias.
Muy buenos días de nuevo a todas y todos, gracias por permanecer en esta mesa y en este importante día en donde le estamos dando inicio a estos 16 días de activismo.
Ahora, vamos a iniciar este panel desde la perspectiva de la sociedad civil, desde esa visión también especializada sobre el tema de violencia política contra las mujeres en razón de género, para que nos aporten justamente cuáles son esas reflexiones que tienen desde este ámbito sobre el fenómeno que estamos analizando el día de hoy.
Les voy a dar el uso de la palabra hasta por 10 minutos a nuestras panelistas.
Van a ver ustedes en la pantalla una breve síntesis de su amplio currículum y su experiencia, el cual no voy a leer en honor al tiempo, pero sobre todo para tener la posibilidad de escucharlas a ellas durante un espacio de hasta 10 minutos.
En primer lugar, le voy a dar el uso de la voz a Josefina Meza Espinosa, Presidenta de la Red Nacional de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo.
Querida Josefina, tienes el uso de la voz.
Adelante, por favor.
Presidenta de la Red Nacional de Mujeres Defensoras de la Paridad en Todo, Josefina Meza Espinosa: Muchas, muchas gracias.
Agradezco, pero además celebro profundamente la oportunidad de estar en esta importante mesa con mujeres tan distinguidas y hombres, espero yo, de verdad comprometidos y aliados que dedican su vida a realizar las acciones necesarias desde los distintos espacios que ocupan para que la igualdad sustantiva sea una realidad, para que la violencia que se ejerce contra las mujeres se erradique.
Recientemente llevamos a cabo nuestro Tercer Encuentro Nacional de Mujeres Políticas Mexicanas en el mes de septiembre, en Guadalajara, Jalisco. Justo comenzamos a evaluar qué había pasado en el proceso electoral que recién había concluido; bueno, pero si íbamos en un tercer encuentro, quería decir que ya habíamos realizado un primero y un segundo. Nos habíamos reunido en Aguascalientes previamente y antes en Querétaro.
Nosotras conformamos una red, una Red Nacional de Mujeres que defendemos la paridad en todo y, bueno, estamos organizadas en capítulos estatales.
¿Qué encontramos en ese encuentro? Quiero empezar por ahí y después me voy a ir rápidamente a la atención que dimos a candidatas en el proceso electoral.
El clamor generalizado de las personas participantes en nuestro tercer encuentro fue, necesitamos más presencia de la red en época electoral, evidentemente al ser compañeras de nuestra red, nos pedían más presencia a nosotras a las de la red-
Debido a que la mayoría fue víctima de todas las violencias, de todo el catálogo en sus tipos y modalidades y yo creo que hasta comenzaron por ahí a construirse algunas otras.
En distintos espacios y en todos los espacios en donde las mujeres hacen política, se les violenta.
Nos decían también y era un clamor, que necesitaban a las instituciones, son embargo, muchas a pesar de que tienen algún tiempo en la red no necesariamente saben a qué instancias e instrucciones acudir, necesitan a las instituciones, nosotras afortunadamente como red pudimos contar con el respaldo de dos grandes instancias aliadas, la primera, la Defensoría de los Derechos Políticos y Electorales de la Sala Superior, pero en espacial y muy cercana, el programa piloto del INE. Yo les reconozco aquí públicamente por todo el acompañamiento que a través de ustedes pudimos darles a las mujeres que se acercaron a nosotras en busca de apoyo.
Ellas decían y lo voy a resumir así, estamos devastadas, en cachitos, sin recursos económicos y con grandes deudas en las tarjetas, firmaron pagares, deudas con la familia, se acabaron sus ahorros, porque las mujeres pagan sus campañas.
Las mujeres también después de este proceso electoral y lo confirmamos, quedamos muy divididas, muy confrontadas, tal parece que existieran equipos de las buenas y las malas, es decir, las que decidieron a tiempo irse para un equipo ganador y las que resistieron y se quedaron en el equipo perdedor y entonces las buenas son las que decidieron a tiempo o las llamaron o tuvieron oportunidad de irse y las malas son las que resistieron y se quedaron en otros espacios.
Quiero platicarles que realizamos tres días en ese encuentro y las actividades que llevamos a cabo fueron las siguientes: tres foros, dos conversatorios, cuatro mesas de trabajo, les quisiera decir que incluso en estos 16 días de activismo vamos a retomar cuatro mesas de trabajo, maña estaremos en la primera, una mesa virtual nacional a las 06:00 de la tarde, para analizar qué pasa con los institutos de las mujeres y su transición a Secretarías de las mujeres y que donde hay una deuda histórica es en los institutos de los municipios, hemos encontrado muchas complejidades allá.
Como Red logramos recuperar las siguientes experiencias, vamos a tratar de manera muy respetuosa, porque no queremos violentar a nadie, solamente es lo que recabamos de este encuentro.
¿Qué perfiles fueron llamados de mujeres para las candidaturas? Mujeres acompañadas por un hombre encumbrado en el poder, ellas con altas posibilidades de ganar elecciones y lo digo de esa manera siempre y cuando los señores no decidan en una mesa quién gana y quién pierde.
Después en otro nivel, como mujeres con ciertas características de fama, youtubers, influencers, artistas que nunca habían participado en política, pero yo creo que además no van a volver hacerlo, porque en su gran mayoría son engañadas, les mienten, les dicen que van a ocurrir cosas que no van a ocurrir y son usadas como si fueran desechables, sin reconocer que son personas que tienen sentimientos, que tienen emociones y que aún con toda esa fama las quiebran y la quiebran incluso económicamente.
Y en un menor porcentaje dije mujeres militantes y liderazgos de los partidos políticos es decir, si es en un menor porcentaje quiere decir que poco sirve que las mujeres tengamos toda una vida en un partido político, porque a la hora de la designación de candidaturas son otras situaciones las que ellos consideran para tomar esas decisiones.
¿Qué otros hallazgos o qué hallazgos logramos obtener en la atención de las mujeres candidatas, de candidaturas locales y federales antes y durante el proceso electoral? me confieso que debemos hacer un análisis qué pasó posterior al proceso electoral, porque seguramente las vamos a encontrar todavía quebradas, sin ganas de participar en política, don deudas y nadie las está atendiendo.
Pero bueno, les platicaré lo que encontramos antes y durante el proceso. Logramos atender 70 mujeres que fueron víctimas de violencia en distintas entidades federativas, en Hidalgo cuatro, en Querétaro dos, en Zacatecas 35, acudimos personalmente a reunirnos con esas 35, toda vez que ustedes saben de esas denuncias masivas de las mujeres.
Ya en cortito, así nos decían, las presiones, sí nos decían las amenazas, evidentemente el clima de inseguridad y de los grupos delincuenciales en esa entidad tuvieron un peso específico y por eso esas renuncias masivas o así lo manifestaron.
Estado de México, siete; San Luis Potosí, tres; Guerrero, 10; Veracruz, cinco; Guanajuato, dos; Jalisco, dos. Total 70 mujeres, ¿de qué partidos? 20 de Morena, ocho del Verde, 16 de Movimiento Ciudadano, 10 del PRD, seis del PT, cuatro del PRI, cuatro del PAN y dos de partidos políticos locales con registro local.
También hay que recordar que estaban inscritas en alguna o coalición o en algún frente, pero nosotras las registramos conforme el partido del cual eran originarias o el partido que las había colocado en la coalición en el frente.
¿Qué hicimos nosotras? El 10 por ciento lo canalizamos al programa piloto del INE, que fueron atendidas y la verdad ellas están muy agradecidas; el cinco por ciento a la defensoría y el 85 por ciento decidieron no continuar con ninguna denuncia, queja y/o procedimiento jurídico penal, administrativo, etcétera.
Las principales violencias y las modalidades que se ejercieron contra esas mujeres, adujeron, se reconocieron como que se les obstruye y obstaculiza, se les ocultaba toda la información, las hacían firmar chequeras y firmar los cheques y los devolvieran, no sabían cuánto dinero había para sus campañas, todos los partidos decían que no tenían dinero para las campañas y que ellas deberían de invertirle, pero además les decían: “es que mira, tienes tantos followers, que seguro vas a ganar, échale un poquito más de dinero, consíguete un préstamo, vas ganando, eh, vas ganando”.
Se les utiliza con falsas promesas de candidaturas, hacen compromisos con ellas, pero al día de hoy ya no les contestan las llamadas y los mensajes, es más, las bloquen, y estoy hablando de las dirigencias y ahí hay algunas mujeres en las dirigencias.
Esto es importante reconocerlo.
Evidentemente, la violencia sexual en el ámbito político es una pésima práctica que sigue sin erradicarse, incluso lo hacen con el riesgo porque corren riesgo los agresores, de que sean ventilados públicamente, la siguen haciendo, igual que el acoso y el hostigamiento dentro del partido político y fuera del partido político.
Ya hice la referencia a la grave problemática de la violencia económica que tiene repercusión en el patrimonio, en el patrimonio de las mujeres que decidieron aceptar una invitación a participar en un proceso electoral como candidatas.
Los ataques masivos y/o personales en redes sociales fueron la gran, la violencia con más recurrencia, de la que más se quejaban, acababan con su prestigio, con su vida, hoy seguramente muchas están en atención psicológica, por eso les digo que tenemos una deuda con ellas, tenemos que darle seguimiento, porque no las podemos dejar así.
Encontramos con estas 70 mujeres que no existen instancias dentro de los partidos políticos que las puedan guiar, asesorar, acompañar, que en los casos que sí se cuente con esas instancias, que son en su mayoría casos que son inoperantes y funcionan bajo la presión de los liderazgos y de las cúpulas partidistas, pues así no vamos a avanzar.
Los hombres siguen sin apostarle a la paridad sustantiva y no les interesa la igualdad, no les interesa la igualdad sustantiva, porque se trata de perder privilegios y no pueden perder uno solo, sienten que ya perdieron demasiado con la paridad en todo.
Tratan de cumplir con la paridad numérica, pero buscarán las estrategias necesarias para burlar las reglas que en relación con el mandato constitucional en materia de paridad en todo existe.
Es sumamente preocupante que hoy no podamos posicionar a la paridad como un precepto convencional debido al retroceso en materia de la supremacía constitucional. Eso también es preocupante.
¿Me regalan un minuto más?
Muchísimas gracias.
En un 80 por ciento no se les dio recurso económico a las candidatas para sus campañas y debemos seguir esa pista de las candidatas, buenas prácticas del INE, de los órganos electorales y de organizaciones de la sociedad civil sacaron la casta, resuelven, las organizaciones de la sociedad civil resuelven y eso lo tenemos que poner aquí en el diálogo, en el debate.
Dieron asesoría y acompañamiento, dieron y dimos y construimos espacios y debemos apostarle para la atención salud mental y emocional.
Retos: que los partidos sean congruentes, que el presupuesto para el desarrollo del liderazgo político se ejerza, que se incremente y además se ejerza y además se observe, porque no es observable y entonces eso les permite hacer lo que hacen.
Las mujeres defensoras también requerimos de acompañamiento psicológico.
Reflexiones, con esto cierro.
Es urgente que el constructor sociocultural se modifique, aquí debemos estar involucradas todas, todos, sociedad civil, funcionariado, instituciones, etcétera.
Estamos cansadas, estamos devastadas, estamos golpeadas por decisiones de quienes nos representan en el Congreso de la Unión y en algunos congresos locales; sin embargo, creo que estamos haciendo, y además haciendo un homenaje a las mariposas, nos toca dar el extra, pasar al siguiente nivel.
Se ha avanzado mucho, pero es importante que no se afloje el paso y que se desarrollen las estrategias correspondientes.
Urge que todas las mujeres que están en el poder puedan tomar acciones y decisiones desde su propio poderío, que recuerden, que recordemos que estamos aquí por la lucha de otras, pero que las niñas, las jóvenas, mis nietas, mis sobrinas, las niñas de mis amigas, las hijas de mis amigas y todas las infancias y juventudes están esperando que no demos un paso atrás y que sigamos, por encima de todo que sigamos.
Muchas gracias.
Consejera del IECM, Erika Estrada Ruiz: Gracias a ti, Josefina por estas importantes reflexiones, al final de la mesa recapitularemos todas ellas, muy valiosas para ser muy puntuales respecto a los hallazgos que estamos encontrando digamos, en esta sinergia y en esta oportunidad de colaborar y de compartir.
Ahora le voy a dar el uso de la voz, por favor, a Rebeca Moreno Sandoval, Coordinadora Operativa de AÚNA México.
Adelante, Rebeca, por favor.
Coordinadora Operativa de AÚNA México, Rebeca Moreno Sandoval: Muchas gracias.
Primero que nada, quiero agradecer la invitación del Instituto Nacional Electoral y de la Unidad de Género a participar en esta mesa, me voy a permitir hacer mi intervención en dos momentos; primero voy a pasar a explicar qué fue las actividades que hizo AÚNA en el proceso electoral pasado, un poquito para que así se entiende cuáles fueron nuestros aprendizajes respecto de estas actividades.
Primero contarles que AÚNA es una plataforma política que acompaña a mujeres a llegar a cargos públicos, lo que hacemos es buscar, formar y acompañar a estas mujeres, buscamos que sean sobre todo grupos subrepresentados, mujeres indígenas, mujeres afrodescendientes, mujeres de las periferias urbanas y trabajamos con mujeres de todos los partidos políticos, somos una plataforma multipartidista, estamos territorialmente en cinco estados, pero en este proceso electoral acompañamos a mujeres en toda la República.
Cuando digo acompañamos, en este último proceso electoral fueron 73 nominadas, de las cuales 50 lograron candidaturas y 18 fueron electas y una fue invitada a un gabinete local,
El programa que damos empieza un año antes del proceso electoral, es un programa de formación y de liderazgo, coaching político y luego toda la parte de seguridad y aquí se vuelve interesante y es a colación al tema que nos trae a la mesa.
En el tema de seguridad lo que hacemos es dar formación en tres grandes áreas, violencia política de género, violencia digital y seguridad fisca.
Además, desarrollamos estrategias y herramientas de análisis de riesgo, es decir, cómo las mujeres podían identificar los riesgos a los que se enfrentaban de seguridad física dependiendo de su contexto y de sus identidades.
Luego, hicimos todo un proceso de activación para cursos de actuación y canalización de las mujeres que estuvieran enfrentando algún tipo de violencia con las autoridades correspondientes a nivel estatal, municipal o en su caso, federal.
Y en un último pedazo, también canalizamos para dar asesoría Jurica a las mujeres que así lo requieran durante la jornada electoral o posterior a la jornada electoral.
Lo que observamos durante este acompañamiento o los resultados preliminares que tuvimos de este proceso de acompañamiento fueron 18 casos que nos notificaran durante el proceso electoral, tres tuvieron que ver con agresiones físicas, cinco con agresiones digitales y 10 incidentes físicos de ellas o sus equipos de campaña.
Las agresiones físicas se dieron en Guerrero, Jalisco y Chiapas y las agresiones digitales era en redes sociales, pero denominadas que pertenecen a Oaxaca, Nuevo León, Guerrero, Jalisco y Ciudad de México.
Es muy importante para nosotras decirles que estos fueron los casos que ellas nos reportaron, pero al finalizar nuestro programa de acompañamiento, nosotras hicimos una línea de cierre, es decir, enviamos una encuestas a todas nuestras nominadas para ver cómo nos había ido en el programa de acompañamiento y a ellas en el proceso electoral, y ahí en esa encuesta salieron muchísimos más casos de lo que nos habían reportado, de los que nosotras habíamos acompañado durante el proceso electoral, sobre todo mucha violencia digital encontramos en las nominadas.
Entonces, ya que les expliqué un poquito lo que hicimos durante el año, previo a la jornada electoral, creo que ahora sí puedo pasar a los aprendizajes que tuvimos gracias a la estrategia de corresponsabilidad en seguridad.
Y primero es contarles que, porque la política es de hombres, hay una tremenda normalización de las violencias que viven las mujeres que deciden participar en política. Fue, cuando decimos capacitación en temas de violencia, en realidad fue un tema de sensibilizarlas y de hacerlas reconocer que muchas de ellas estaban viviendo diversos tipos de violencia, no solamente violencia política de género, sino violencia político-electoral, que más adelante estoy segura que es Celine González nos va a platicar a qué nos referimos con este término, y otro tipo de violencias de género, como la violencia familiar.
Entonces, un pedazo muy grande es concientizarlas y hacerlas ver este tipo de violencias y otra parte del análisis es entender que las violencias de género a las mujeres que deciden participar en política se le traslapan y entonces están viviendo diferentes tipos de violencias constantemente durante toda su trayectoria política.
Otra reflexión que tenemos es que las mujeres que acompañamos en AÚNA, pudimos identificar que están expuestas a diferente tipo de violencias y riesgos dependiendo de sus identidades, es decir, si pertenecen a un grupo históricamente subrepresentado, pero también a sus contextos socioeconómicos y a sus lugares geográficos donde se encuentran haciendo campaña.
Y esto se vuelve muy relevante porque se divide, creemos, el nivel de análisis en dos grandes rubros: una parte muy importante sí tiene que ver con la mujer, la identidad y su contexto, y otro tiene que ver con las capacidades institucionales que existen en esos estados para hacer respuesta a este tipo de violencias.
Y lo que observamos al menos desde el acompañamiento que hicimos en AÚNA, es que la respuesta de las autoridades electorales y estatales, fue muy limitada y estuvo retrasada por bastantes meses.
Y aquí el comentario es con el afán de contribuir a que en el próximo proceso electoral que ya es el próximo año, podamos activar estos procesos institucionales de forma anticipada.
Lo que observamos fue que al menos, en términos de seguridad física, los mecanismos de protección a personas candidatas se activaron de forma retrasada, en algunos casos incluso, ya en el año del proceso electoral en 2024, en AÚNA empezamos a preguntar qué estaba pasando con las mesas interinstitucionales desde octubre, cuando nuestras nominadas presentaban ya ciertos tipos de violencia política de género durante las precampañas.
Entonces, creo que sería muy importante hacer ese análisis de… dependiendo de la gobernabilidad, la capacidad institucional, el estado de derecho en cada estado donde se encuentran las candidatas, pues es como se respondió institucionalmente a su protección no solamente de violencia política, sino también a su protección física.
Otra cosa importante que aprendimos con esta estrategia de corresponsabilidad, es que las mujeres que enfrentan tanto violencia político electoral como violencia política de género, no denuncian, no denuncian, no nos reportaban ni a una ni denuncian a las instituciones que tienen a la mano.
Mucho tiene que ver por lo que decía Micheel Salas, Micheel, de que las mujeres no confían en las autoridades, eso sin duda, es una de las causas, pero también tiene que ver por este traslape de violencias que les comento
Es difícil para las mujeres saber a qué autoridad de las que conocen y de las que están disponibles, se puedan acercar, dependiendo del tipo de violencia.
Algo también muy importante es que, las nominadas que acompañamos desde AÚNA, que eran candidatas a nivel municipal, eran las más expuestas a todas las violencias que mencioné y las que menos conocimiento tenían de las autoridades a las que podían acudir; incluso, aquellas que logramos hacer que fueran o que trataran de ir a acudir a alguna autoridad, pues eran revictimizadas, la autoridad no tenía capacidad de atenderlas, incluso no podían observar los tipos de violencia a los que estaban siendo expuestas.
Otro de los aprendizajes que quisiera aquí traer a la mesa también, a colación de la falta de respuesta institucional que hubo durante este proceso electoral, es la importancia de las alianzas entre diversos sectores de la población.
Desde AÚNA, para la parte de toda la violencia digital, tuvimos un acercamiento con las plataformas digitales, que tuvieron un gran interés en ayudarnos tanto a capacitar a las nominadas como a poder tener una línea de atención un poquito más directa para la violencia digital.
Creemos que es muy importante seguir reforzando este tipo de alianzas, porque sobre todo la violencia digital se convierte muy rápidamente en violencia física o en agresiones físicas que no solamente dañan la integridad psicológica y física de las mujeres candidatas, sino de sus familias.
Otro tipo de violencia que observamos es que las mujeres candidatas justamente son amedrentadas por su rol de cuidadoras. Entonces las amenazas también tienen que ver con sus familiares, no solamente sus hijos, hijas, hijes, sino también suegros, papás, es decir, su familia cercana.
Entonces entre más fortalecidas sean estas alianzas con los diversos actores de la sociedad civil, creo que un mejor modelo de atención a las violencias podemos hacer para estas personas mujeres candidatas.
Y algo que nos parece súper importante es hablar de que las violencias contra las mujeres las acompañan en toda su trayectoria política. Y eso, de nuevo, lo pudimos observar desde las precampañas; bueno, desde que están ellas en el proceso de toma de decisión de ser o no candidatas, durante las precampañas, las campañas y ahora que ya están tomando algunas sus cargos públicos también observamos que la violencia política de género las acompaña en esa trayectoria.
Eso tiene que ver mucho con el nivel de democracia, de instituciones que queremos. ¿Cómo ejercen ellas el cargo si están siendo violentadas? Pues va a afectar también en las instituciones públicas que están representando.
Y la última reflexión que quisiéramos hacer son los partidos políticos.
También desde una perspectiva constructiva queremos hacer hincapié en que muchos de los casos de violencia política de género regresan a la justicia intrapartidista. Y eso no le da justicia a las mujeres candidatas.
Ya hablaba Micheel y ya hablaba otra compañera de quiénes son los agresores y cuánto poder detentan y su propia trayectoria política, si queremos moldear la forma de hacer política en México, tenemos que empezar a reflexionar como los partidos políticos dan solución o tratamos de que den justicia a las mujeres que son violentadas.
Muchas gracias.
Consejera Electoral del IECM, Erika Estrada Ruiz: Gracias a ti, Rebeca, por compartirnos también este interesante asunto de personas que fueron nominadas, mujeres que tuvieron este acompañamiento y todas estas áreas de oportunidad que tú has podido reflexionar y acompañarnos.
Ahora le voy a dar el uso de voz, por favor, a Teresa de Jesús Mojica Morga, Presidenta de la Fundación Petra Morga A.C.
Se prende solo el micrófono para adelante, por favor, Teresa, por 10 minutos.
Presidenta de la Fundación Petra Morga, A.C., Teresa de Jesús Mojica Morga: Pues muchísimas gracias a la Consejera Claudia Zavala por la invitación y a nuestra querida amiga Flor Dessiré.
Para mí, como parte de la fundación afromexicana Petra Morga, es un honor estar aquí y quiera compartirles esta frase de Audre Lorde que dice: “no seré una mujer libre mientras siga viendo mujeres sometidas” y yo diría racializadas e invisibilizadas.
Porque el mayor problema que nos encontramos las mujeres afromexicanas en la participación política justamente es la invisibilización sistemática, la violencia política de género es una constante justamente por esta invisibilización que obviamente no permite el avance y el desarrollo de estas mujeres.
Estamos en este país hace más de 500 años junto con la llegada de la colonia y aun así tenemos casi nula participación política de mujeres afrodescendientes.
La violencia y el racismo que recibimos de manera constante las mujeres afromexicanas es justamente por nuestro color de piel, por nuestro genotipo, por nuestra clase social y también por la hipersexualización de los cuerpos de las mujeres afromexicanas que derivan en hostigamiento, en acoso dentro de la participación política y muchas veces el condicionamiento para poder acceder a candidaturas o a participar en los partidos políticos.
La violencia y el racismo que recibimos de manera constante es por nuestro fenotipo, la violencia se manifiesta cuando se usurpa la identidad también de las mujeres afromexicanas ahora que ya existen las acciones afirmativas y que en un abuso de los liderazgos de los partidos políticos o de grupos de poder, integran a candidatas y candidatos a través de estas candidaturas que se han configurado justamente para los grupos que han sido marginados y que han sido históricamente racializados en el que están las mujeres afromexicanas.
Hay violencia política de género también cuando los partidos políticos no ejercen ese 3 por ciento por ley que debieran ejercer para acompañar y capacitar a las mujeres afromexicanas, si ya de por sí muy difícil la participación política de las mujeres en general, ahora imagínense ustedes la participación política de las mujeres afromexicanas que nos encontramos en el último escalón o en el primer escalón del sótano. Tener que subir 100 escalones para llegar al piso parejo. Esa es la dimensión que tenemos las mujeres afromexicanas en el acceso a la participación política, teniendo excepciones en la regla.
En este momento por primera vez tenemos la primera senadora afromexicana que es gracias obviamente a que el INE, que las instituciones, esos espacios los asignaron y obligaron a los partidos políticos a cumplir, tenemos una diputada afromexicana, pero imagínense la incidencia que puede hacer una diputada en 500 o una senadora en 128 senadores y senadoras.
Por lo tanto, es muy importante el acompañamiento que se le tiene que dar a estos grupos históricamente racializados que en la discriminación y la violencia, les niegan la igualdad a través, como aquí se dijo anteriormente, la impunidad. Ante los pocos espacios ganados y se los quitan los partidos políticos en la mesa, sin que haya ninguna sanción.
Imagínense la violencia política que sufren y sufrimos las mujeres afromexicanas en nuestros territorios. Me voy a referir no solo a lo federal, no solo a lo estatal, no solo a lo municipal, sino a las mujeres que participan a las regidurías y las mujeres que participan en la primera participación política que son las comisarias y los comisariados, donde estas mujeres sufren toda la violencia porque en la mayoría de esos cargos, todas estas mujeres son la primera vez que llegan a esos espacios y que las comisarias tienen una representación política, simbólica, porque ni siquiera reciben ninguna remuneración para poder ejercer esos espacios.
¿Quiénes violentan a estas mujeres? Los líderes de la comunidad, los líderes de los partidos políticos, sus propios esposos, sus propios hijos, aquí se dijo anteriormente, las mujeres no solo sufren violencia política en lo exterior, sufren violencia política también desde sus casas, pero la violencia política que se sufre desde las redes sociales, desde los líderes y las cúpulas de los partidos que para en primera, cuando tú llegas te dicen: “ay, ¿apoco sí la vas a hacer?”, “ay, te crees mucho, ¿apoco sí vas a poder ser candidata y luego Presidenta Municipal”, en estados como Guerrero donde la violencia que se ejerce desde las redes, es tal que es una violencia que muchas veces apela a la apología del crimen.
En el 2018, en un proceso electoral, fui secuestrada. Después de hacer mi denuncia, fui revictimizada, y al otro día de hacer mi denuncia, aparecieron todos mis datos en los medios de comunicación.
¿Cómo una mujer y una mujer afromexicana, puede hacer política en seguridad?
Por lo tanto, nosotras obviamente pedimos a las instituciones, un acompañamiento, pero un acompañamiento con una mirada étnico-racial, porque las mujeres afromexicanas no partimos del mismo piso, los partidos políticos, como aquí se dijo, muchas veces no les dan ni siquiera un peso para su campaña y les dicen: “ah, pues querías, ¿no?, pues ora, gana, no que muy chingona”.
Y esas mujeres que se echan para adelante, con un valor que en este momento creo que es lo más importante, el valor de la participación política que en algunos años nos va a permitir que muchas mujeres y mujeres afromexicanas e indígenas, estemos representadas en los diferentes espacios de toma de decisión.
Por eso yo saludo y celebro el Decreto para la Igualdad Sustantiva que el 15 de noviembre la Presidenta Claudia Sheinbaum firmó, y que las mujeres ya estamos en la Constitución, pero también queremos estar las mujeres afromexicanas y las mujeres indígenas.
Que hoy se presentó la campaña para combatir la violencia, la Presidenta Claudia Sheinbaum, junto con la Secretaria de la Mujer, Citlalli Hernández Mora, esto es muy importante, porque, como dice la Presidenta Claudia Sheinbaum, se tiene que atender las causas, pero lo que no se nombra no existe y nosotras queremos que las mujeres afromexicanas y las mujeres indígenas se nombren y se nombren en todos los discursos de las instituciones, como éste, como la del INE, en todos los discursos de las instituciones del Gobierno Federal y de este país.
La primera cosa importante que necesitamos las mujeres indígenas y las mujeres afromexicanas es la visibilización de nuestra existencia y de nuestras aportaciones históricas y de nuestras aportaciones también en la lucha para la igualdad sustantiva.
También quiero decirles que es muy importante que trabajemos en ciberseguridad. Con esto voy terminando, porque estoy cerrando mis 10 minutos, porque la ciberseguridad es lo que va a permitir que las mujeres que participamos en política podamos enfrentar la usurpación de identidad, las calumnias, las amenazas, la apología del crimen, el que nos roban nuestras redes sociales, el que se hacen campañas desde la oscuridad, pero que sí tienen una repercusión no sólo psicológica, tienen una repercusión emocional que es la que hace que si 100 candidatas participaron en este proceso, de esas 100 candidatas el próximo proceso electoral sólo participen 15 o 20.
La entrada de participación política de las mujeres es mucha, pero la salida de participación política es por lo menos un 80 por ciento.
Empecé a participar en política en el año 88, tengo 36 años participando en política y después de haber sufrido el secuestro me retiré de la política. Perder 36 años de experiencia es una gran pérdida para la participación política de las mujeres, tenemos que acompañarlas, tenemos que acompañarnos porque solo juntas podemos vencer el flagelo de la violencia política de género y obviamente de la inseguridad, ya ni siquiera voy a tocar aquí los temas del crimen organizado y la incidencia que hay en estas mujeres, no solo las que participan y compiten, sino las que ya están en espacio de toma de decisión.
Muchísimas gracias.
(Aplausos)
Consejera Electoral del IECM, Erika Estrada Ruiz: Gracias, Teresa de Jesús por compartirnos también en la mesa la necesidad de visibilizar a las mujeres afromexicanas y a las mujeres indígenas, pero, además, muchísimas gracias por compartirnos también desde la experiencia personal.
No es fácil, lo hemos dicho muchas veces, hablar desde el yo, desde lo que nos ha pasado a todas nosotras en la vida profesional, privada y en la política es muy complicado y es muy valiente poder hacerlo.
Así que gracias por compartir también esta desafortunada experiencia.
Y ahora le voy a dar el uso de la voz por favor a Paulina Covarrubias Álvarez, Oficial de Programas de Noria Research.
Adelante, por favor, Paulina.
Oficial de Programas de Noria Research, Paulina Covarrubias Álvarez: Muchas gracias.
Hola, buenas tardes.
Gracias al INE por la invitación a formar parte de este esfuerzo y sobre todo a la Maestra Flor Dessiré por ser una escucha tan activa para las organizaciones de la sociedad civil.
También es un gusto compartir el espacio con organizaciones que también han nutrido este proyecto.
Y bueno, les cuento un poco, desde Noria Research, hacemos proyectos de investigación e incidencia en materia de seguridad y construcción de paz a través de tres pilares que son nuestros pilares metodológicos, pero también nuestra posición política.
Documentamos con investigaciones cualitativas, acercándonos a las comunidades afectadas por la violencia, también medimos tomando en cuenta los diferentes sistemas de opresión que afectan las personas y con perspectiva feminista interseccional e incidimos para transformar la realidad social y en espacios justo como este, para colaborar con otras organizaciones aliadas.
Este año implementamos un proyecto de violencia política contra mujeres en Puebla, aprovechando obviamente que iba a ser el periodo electoral con mayor número de mujeres para cargos de elección pública y considerando que Puebla tiene una historia de violencia política muy larga, incluso antes de la narcoviolencia, también con hechos de justicia extralegal y linchamientos y además esto ha cruzado con la violencia contra mujeres que es un estado que tiene, 50 de sus municipios tienen alerta de género.
Entonces, empezamos este proyecto bajo dos hipótesis que primero queríamos entender cómo las mujeres lidian con la violencia que condiciona los procesos político-electorales, más allá el sufijo político para entenderlos más allá de los periodos electorales y también cómo resisten, se adaptan, navegan a esta arena política que ya hemos platicado en este espacio, es un espacio de hombres.
Entonces, sin más para entrar de lleno a los hallazgos, les cuento que los perpetradores más comunes que encontramos son los propios partidos, encontramos también casos de violencia digital y otros tipos de violencia que ya hemos comentado en esta mesa, pero la violencia intrapartidista fue la principal, la que nos comentaban más en las entrevistas, en trabajo de campo, de mujeres de diferentes perfiles: Candidatas, militantes, lideresas comunitarias, funcionarias, ex candidatas, no solo candidatas de este periodo electoral, encontramos que esta ha sido una violencia, bueno, ha casi siempre los perpetradores son de sus propios partidos.
Además existe un contexto violento y de impunidad en Puebla, hay pocas consecuencias legales y políticas para los agresores, que eso también sabemos que es un común denominador en muchos otros estados, y de hecho este periodo electoral Puebla estuvo entre los 10 estados con más denuncias por violencia política por razón de género.
Y además también queremos hacer un énfasis sobre la existencia de los protocolos que si bien sabemos que son un gran avance, pues todavía son insuficientes. El marco jurídico y los protocolos de atención son de reciente creación, tienen tres años en Puebla y aun no logran permear hasta las esferas más locales del estado, hasta los municipios, y sabemos también como había dicho también la Consejera Carla Humphrey, Puebla fue el estado con más denuncias de mujeres a cargos de elección popular en este periodo, más de 800.
Entonces, sobre todo por eso nos parece muy importante hacer énfasis cuáles son las violencias que las están alejando de ejercer sus derechos político-electorales.
Y sobre el primer punto, sobre la violencia intrapartidista, les quería comentar como diferentes categorías que encontramos, si quieren a quien tenga la presentación le podría adelantar uno para que puedan compartirles. Muchas gracias.
Encontramos diferentes tipos de violencias y éstas me gustaría comentarles, son categorías que encontramos en campo, ¿no?, son conceptos que las mismas mujeres que entrevistamos nos compartieron.
Entonces, los dividimos un poco como en las etapas de la vida política electoral y me gustaría concentrarme en algunas porque no tenemos mucho tiempo, pero encontramos que todas las mujeres, bueno, todas las mujeres que entrevistamos, se consideran como invitadas a este espacio, a los espacios políticos, ¿no?, dicen: “me invitaron”, ya sea porque algunas son mujeres que son invitadas por su trayectoria o su perfil, su trayectoria profesional, pero otras porque son mujeres necesarias, ¿no?, así lo mencionan.
Sí, la invitaron porque iba a cuota, porque va a género y entonces va la esposa de alguien o la hija de alguien, y entonces son invitadas para ocupar esos espacios, ¿no?, que sabemos, la paridad ha sido también un logro, pero también tiene estos pequeños demonios que tenemos que conversar en estos espacios, sobre todo, ¿no?
También nos interesa mucho el término de las mujeres tripulables, esto nos lo contó pues una candidata, las mujeres somos tripulables en la política y, bueno, no sé, les invito a pensar cómo qué es un vehículo tripulable, ¿no?, necesita un conductor, alguien que maneje a este espacio vacío, ¿no?, o sea, también pues eso, pensemos en la instrumentalización de los cuerpos femeninos como cascarones o ácidos que se pueden tripular en la violencia.
Y bueno, si le pudieran dar a la siguiente diapositiva, por favor.
Muchas gracias.
También pues la masculinización de las mujeres ya, sobre todo, más presente en el ejercicio del poder, ¿no?, tener que asumir roles y actitudes más masculinizadas para darse a respetar, para que puedan ser tomadas en serio, y bueno, esto muy cruzado con la validación de sus capacidades y habilidades que eso lo encontramos en todas las etapas, ¿no?, del proceso político electoral.
Siempre, si la riegas en algo, es tu culpa, pero si tienes un acierto, seguro es porque ese hombre que estaba en tu equipo, fue su idea, ¿no?
Pero nunca es la mujer que también estaba en el equipo, siempre es el hombre que está en su equipo.
Entonces, bueno, éstos solo son algunos de los hallazgos que encontramos de violencias más recurrentes y estas cuatro que resalté ahorita, encontramos que los perpetradores, como les decía, son o correligionarios de partido o los mismos partidos políticos, como institución.
Y pues ya, para ir cerrando, sobre los mecanismos de protección, bueno, perdón, primero les quiero contextualizar un poco sobre el legado de la violencia en Puebla. Hace rato lo mencionaba alguien, el contexto es muy importante, ¿no?, y por lo menos las últimas tres, cuatro administraciones, han dejado un legado de violencia importante en el estado, o sea, se asume que hacer política en el estado es usar recursos violentos, ¿no? O sea, desde hace casi más de 20 años.
Entonces encontramos como… Bueno, no me voy a parar mucho aquí, pero lo que nos parecía importante es que todos son de diferentes partidos, tenían diferentes formas de gobernar y todos también son autores de violencias directas o indirectas, ninguno de ellos rindió cuentas, más que, bueno, digamos, que Mario Marín puede que rindió cuentas, pero no durante su periodo, sabemos también que fue judicializado por un caso de tortura y fue, pues sí estuvo preso hasta mucho después de su gubernatura.
Y también encontramos que tienen un pacto cuando las mujeres son las víctimas de sus violencias, o sea, si el adversario político ya está ejerciendo violencia contra la adversaria política que me interesa violentar, pues entonces pactamos y gracias por hacer por mí el trabajo sucio y seguimos.
Entonces encontramos eso, pues sí, también importante el contexto del legado de la violencia en Puebla.
Y también pensando esto de ¿por qué los hombres matan a las mujeres? Porque pueden y diciendo “son espacios masculinizados”, pues también un poco hay que repensar por qué la política, por qué una de las características intrínsecas de la política es la violencia, o sea, más allá de la violencia en contra de las mujeres, la violencia que permea y que deja las bases perfectas para que se efectúen violencias contra mujeres en la política.
Y ahora sí, finalmente, sólo para cerrar rapidísimo, sobre los mecanismos de protección encontramos que las mujeres -si quieren, porfa, darle a la siguiente-; encontramos que las mujeres con las que platiquemos emplean muchos más mecanismos de protección no institucionales que institucionales.
Los institucionales no los emplean tanto por un desconocimiento general de que existen o a dónde acercarse, esto lo vemos no sólo en Puebla, ya lo hemos platicado en esta mesa también, a veces son excluyentes, hay protocolos de protección que sólo protegen a candidatas, pero no a mujeres en la política que tienen cargos más operativos.
Y bueno, todavía no contemplan los otros sistemas de presión que vulneran a las mujeres históricamente subrepresentadas. Mujeres que viven en la sierra nos decían, la sierra de puebla, “tengo que desplazarme tres horas y media para llegar al Tribunal”, o sea, ya en el trayecto ya me violentaron, saben qué coche traigo ¿no?
Entonces esas experiencias queremos, lo importante es traerlas de vuelta y sobre todo esto, los mecanismos de protección que más aplican son los no institucionales, que a veces pueden ser redes de mujeres, acuerdos políticos, pero también incluso grupos o actores privados, privatización de las fuerzas del orden de que conozco a alguien de la policía estatal y me va a mandar un mando e incluso el crimen organizado.
Entonces también pensemos en la vulnerabilidad de los mecanismos de protección y que las mujeres siempre van a necesitar protegerse en estos ambientes de violencia.
Entonces, solo como reflexión final, porque ya me pasé un poquito, pensemos también un llamado a repensar ahorita en esta reconfiguración de los partidos políticos, ¿cómo pueden mejorar sus propios mecanismos de protección internos?, ¿cómo podemos hacer que rindan cuentas?, ¿cómo pueden también capacitar en materia de los mecanismos de protección más robustos como el del INE?, porque muchas veces simplemente no comparten esa información.
Y bueno, también colectivizar las demandas y ocupar estos espacios justo para pensar en las definiciones, pero en las implicaciones también de lo local, las historias de las personas que viven estas violencias.
Muchas gracias.
Consejera Electoral del IECM, Erika Estrada Ruiz: Gracias, Paulina.
Pues estaríamos terminando esta mesa desde la sociedad civil, simple y sencillamente con breves apuntes de todo lo que caché de las cuatro intervenciones que nos darían para estar reflexionando toda la mañana
En primer lugar, la necesidad de contar con una red de apoyo, creo que todas coincidiríamos que de alguna forma necesitamos tener redes, tanto en lo privado, lo público, lo profesional, lo personal para saber que no estamos solas, que siempre hay alguien que nos está acompañando.
Defensorías e instituciones aliadas como el INE y los organismos electorales locales que den este acompañamiento de primera mano a las mujeres que están buscando asesoría o bien, algún tipo de capacitación.
Todas y todos coincidimos en que se necesita dinero para a ver política, es un factor fundamental para poder llegar a un cargo de elección popular de la mejor manera y ahí necesitamos también fortalecer las estrategias.
Formación y liderazgos también que puedan dar este acompañamiento a las mujeres para que cuenten con más herramientas cuando están empezando en la política, o bien, cuando ya están dentro de ellas pero que necesitan identificar algunas áreas de oportunidad.
Importantísimo y coincido completamente, bajar a lo subnacional, hay que ver el contexto de cada una de las entidades federativas para ver cuáles son las capacidades instaladas que tienen desde el propio estado y cuáles son las herramientas a las que pueden acceder las mujeres desde esa visión completamente subnacional y civilización a los grupos de atención prioritaria.
Tenemos que diversificar también nuestras estrategias, entendiendo cuáles son también esas áreas de oportunidad para poder efectivamente tener acciones mucho más concretas.
Inseguridad. El clima de inseguridad en el país no debe ser tampoco obviado en el momento en que las mujeres nos acercamos a la política y cómo nos afecta de forma diferenciada que a los hombres.
Otro espacio, sin duda, la ciberseguridad. La mayoría, si no es que por ahí del 90 por ciento también de las denuncias que se presentaron por violencia política contra las mujeres en razón de género, y aquí la Consejera Zavala sin duda tiene el dato mucho mejor que yo desde lo nacional, yo les comparto el dato también desde lo local, desde el Instituto Electoral de la Ciudad de México. La gran mayoría fueron violencia en redes sociales, es el nicho donde se está cultivando este tipo de violencia anónima, que además encuentra causas muy rápidas para poder dispersarse y con un efecto muy importante como ustedes también señalaban en la esfera de protección que tenemos y que nos pone sumamente vulnerables.
También esta identificación de las mujeres tripulables en el concepto que nos acaban también de compartir, que nos identifican en la política como la oportunidad, como un espacio más, una herramienta que hay que cooptar y que solamente estamos siendo de alguna forma como fachada para poder ejercer el poder y la necesidad también de tener la colectividad en las demandas, acompañamiento que se puedan hacer acciones no desde lo individual, sino también desde grupos organizados para lograr un mejor esfuerzo.
Espero haber resumido en gran parte lo que ustedes pudieron expresarnos esta mañana, importantísimo seguir con estos trabajos desde la sociedad civil, las felicito la verdad por todo el trabajo que han venido realizando y les pediría un aplauso para terminar la mesa. Muchas gracias.
Presentadora: Muchas gracias, Consejera. Muchas gracias a las personas participantes.
A continuación damos paso al Segundo Panel titulado Atención y Prevención de la Violencia Política contra las Mujeres en Razón de Género desde una Visión Académica, por lo que damos el uso de la voz a Karla Olvera Moreno, Consejera Electoral del Instituto Electoral del Estado de Querétaro.
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