El Consejero Jaime Rivera, explicó que el formato del primer debate presidencial fue aprobado desde noviembre con el consentimiento de los representantes de los candidatos, lo que aseguró que no hubiera sorpresas en ese sentido.
Respecto a las preguntas, destacó el proceso llevado a cabo por el ITESO, que garantizó la objetividad y calidad de estas, así como el procedimiento de selección aleatoria para mantener la imparcialidad.