El Instituto Nacional Electoral (INE) en el estado de Querétaro presentó el Informe País 2020: El curso de la democracia en México, realizado en colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el cual es un diagnóstico sobre el estado actual de la democracia en México.
El documento fue presentado por el Consejero Electoral del Consejo General Martín Faz Mora teniendo como moderadora a Grisel Muñiz Rodríguez Presidenta del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Querétaro (IEEQ) y como comentaristas a Martín Silva Vázquez Magistrado Presidente del Tribunal Electoral de Estado de Querétaro (TEEQ) y a Marcela Ávila Eggletón Directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAQ.
Durante su intervención y al dar la bienvenida, la Vocal Ejecutiva del INE Ana Lilia Pérez Mendoza, señaló que el Informe identifica algunos obstáculos que enfrenta la democracia para cerrar la brecha entre el ideal y la experiencia concreta de la vida democrática donde destacan las actitudes discriminatorias, la exclusión y la intolerancia y las prácticas de corrupción y coacción del voto.
Al exponer los resultados del Informe País 2020, el Consejero Electoral Martín Faz Mora resaltó que la ciudadanía percibe, en primer lugar, la corrupción con un 55%; el segundo lugar, lo ocupa la pobreza con un 53%; un tercer lugar lo ocupa la inseguridad y la delincuencia con un 50%; en cuarto lugar, el desempleo con un 50% y, en quinto, el mal desempeño gubernamental con un 25%.
Otros resultados que destacan es que la ciudadanía confía mucho en las universidades públicas con un 70% además de que tiene depositada su confianza en las fuerzas armadas (Ejército y Marina) con el 64% mientras que, la Guardia Nacional obtuvo un 65%; luego de las fuerzas armadas, la ciudadanía confía en el Instituto Nacional Electoral con un 60% y. luego, en el Presidente de la República con un 53%.
Los resultados de esta mirada ciudadana-dijo- permiten advertir la existencia de una conciencia social sobre los problemas que habitan en la democracia; esta ciudadanía está desencantada con los resultados de la democracia, en los problemas que les aquejan directamente pero que, no obstante, mantiene su mayor apoyo al proyecto democrático.
Faz Mora señaló que, en el rubro de la representación política y la participación electoral, la ciudadanía no relaciona este ejercicio con la participación política ni con el electoral; para la mayoría de las y los mexicanos, la ciudadanía significa fundamentalmente tener responsabilidades un 36% y derechos un 29% y, en mucho menor medida, votar con un 10%. Apuntó que las y los mexicanos expresan una clara preferencia por la democracia como una forma de gobierno: el 69% señala que el mejor gobierno es aquel en que todos participan en la toma de decisiones.
En su momento, Marcela Ávila Eggleton Directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAQ, comento que si bien la participación como ciudadano no incide en la toma de decisiones genera descontento y apatía y, justamente, se refleja en menor participación electoral; Abundó que en México la participación de la ciudadanía es bastante limitada.
Agregó que hay que analizar qué tipo de ciudadanía se quiere formar, unos ciudadanos y ciudadanos críticos, una ciudadanía que cuestione a la autoridad y al poder público o una ciudadanía sumisa sometida a través de programas sociales.
Por su parte, el Presidente del Tribunal Electoral del Estado de Querétaro Magistrado Martin Silva Vázquez mencionó que el 53% están algo o muy satisfechos con la democracia en México si bien se habla de una desilusión en la ciudadanía sobre los resultados de la democracia esta puede generar condiciones para resolver algunas situaciones en el país. Destacó que la democracia es una forma de gobierno y, en ese sentido, la expectativa está excedida o los resultados no han sido los esperados dada la altísima expectativa que tienen las y los mexicanos. “Hay deudas pendientes, aspectos a atender y un descomunal trabajo por hacer en el ámbito donde nos desempeñamos.
El Informe País 2020 muestra que hay avances y retos que se han mantenido en cuanto al desarrollo de la democracia en México a partir de la comparación con los hallazgos del primer Informe País de 2014. La elaboración de un Informe como este representa un diagnóstico robusto que brinda un bien público para que gobierno, organizaciones civiles, partidos políticos y ciudadanía puedan trabajar en aspectos concretos que abonen al fortalecimiento del sistema político.