VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DEL CONSEJERO PRESIDENTE DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL (INE), LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, EN LA FIRMA DEL ACUERDO POR LA INTEGRIDAD ELECTORAL Y COLABORACIÓN CIUDADANA
Muchas gracias, muy buenas tardes tengan todas y todo ustedes.
Saludo con mucho afecto al señor Gobernador, al licenciado Omar Fayad Meneses, Gobernador constitucional del estado de Hidalgo.
A los titulares de los Poderes constitucionales, las y los titulares de los poderes constitucionales, órganos autónomos e instancias de justicia de la entidad.
A la y los dirigentes de los partidos políticos en este estado.
Al Magistrado Presidente del Tribunal Electoral del Poder judicial de la Federación, el maestro Reyes Rodríguez Mondragón.
Las titulares e integrantes del Tribunal Electoral del Estado, del Instituto Electoral del Estado, a las y los integrantes del Instituto Nacional Electoral del la entidad y al Presidente de la Asociación de Tribunales Electorales de la República Mexicana.
A lo largo de casi ocho años las instituciones que conformamos el sistema nacional de elecciones hemos superado desafíos de todo tipo.
Desde la instrumentación de la reforma electoral más compleja de nuestra transición a la democracia, pasando por la organización de elecciones cada vez más grandes, competidas y complejas, hasta haber impedido codo a codo de la ciudadanía que la democracia mexicana se convirtiera en una víctima más de la pandemia.
Permítanme señalar algunos datos que acreditan el éxito que entre todas las instituciones y con el invaluable acompañamiento de la sociedad mexicana, hemos logrado en el marco del sistema nacional de elecciones.
Desde 2014, hemos organizado 309 elecciones en el país, en cada elección, el pluralismo político se ha mostrado dinámico y vigoroso, por lo que ninguna fuerza puede asegurar, ni el triunfo propio, ni que los contrarios serán rechazados en las urnas.
El voto se ha consolidado como una herramienta de transformación de la vida pública, para que, en todos los rincones del país, sin excepción, la ciudadanía y nadie más que ella, pueda decidir en condiciones de igualdad a sus gobernantes y a quiénes integrarán los órganos de Estado.
El índice de alternancia que se ha generado en el sistema nacional de elecciones, considerando elecciones federales y locales, supera el 68 por ciento, con lo que, en los últimos siete años, desde 2014 hasta 2021, se han convertido en el periodo de mayor alternancia de la historia en nuestra democracia.
Hemos garantizado no sólo la paridad finalmente en las candidaturas, sino que establecimos mecanismos para asegurar la paridad en la representación política a través de normas, incluso llevadas a la Constitución y acciones afirmativas para fortalecer la inclusión en los órganos de gobierno y representativos.
Al respecto, me importa subrayar que éstos son logros colectivos; no son logros de una sola institución y menos aún de una persona o de una única fuerza política.
Claramente los avances democráticos de nuestro país son logros colectivos, de las contribuciones que varias generaciones de mexicanas y mexicanos plasmaron en el andamiaje constitucional y legal de nuestro sistema democrático y que hoy se han convertido en un referente a nivel internacional.
Sin embargo, los desafíos para la organización de elecciones, limpias, auténticas e imparciales no cesan, y lo que estamos viviendo en 2022 no será la excepción en ese sentido.
La experiencia adquirida desde 2014 demuestra que no es suficiente que las autoridades electorales, cumplamos con los procedimientos y apliquemos las leyes con imparcialidad, para que las elecciones lleguen a buen puerto.
Conforme nuestros procedimientos se han ido perfeccionando, el entorno en el que transcurre la competencia electoral adquiere mayor importancia.
El contexto, como decía Dieter Nohlen, importa, hace la diferencia, e importa mucho.
Por ello es necesario que, de cara a las campañas electorales de 2022, las autoridades electorales propiciemos que los poderes legislativo y ejecutivo, que los medios de comunicación, así como los partidos políticos, contendientes y la ciudadanía, en lo individual y a través de sus organizaciones, nos comprometamos todos con las reglas del juego democrático.
Que todas las instituciones y actores políticos respeten las reglas, es indispensable para que las elecciones no sólo sigan siendo creíbles, sino para que cumplan con su función civilizatoria en la resolución de las naturales diferencias políticas de una sociedad diversa, plural, pero también desigual como la nuestra.
De ahí que, una y otra y otra vez, insista en que la democracia es una obra colectiva.
Se trata, para decirlo en pocas palabras, que todas y todos, desde nuestros respectivos ámbitos de competencia, contribuyamos para que la disputa electoral transcurra con imparcialidad y legalidad; desde el inicio de los procesos electorales y hasta que concluyan los comicios con la calificación que llevan a cabo los tribunales electorales.
La integridad de las elecciones es, en tal sentido, una responsabilidad de todos quienes participan en la lucha por el poder político y de quienes se ven involucrados en la recreación de la convivencia democrática.
Esta visión colectiva de la democracia es la que sustenta el acuerdo por la integridad de las elecciones que hoy suscribimos aquí en el estado de Hidalgo, a casi un mes de que inicien las campañas electorales.
Debo reconocer que aquí en Hidalgo, a diferencia de lo que ocurre en otras entidades, afortunadamente el Poder Ejecutivo y el Congreso del estado han mostrado su compromiso con la adecuada recreación de las elecciones locales, y no han asfixiado al Instituto electoral de la entidad.
Venturosamente aquí en Hidalgo están dadas las condiciones para que el proceso electoral en curso fluya conforme al calendario previsto, y no como sucede en otras entidades, en las que los Organismos Públicos Electorales Locales hoy enfrentan una problemática presupuestal que puede comprometer la adecuada llegada a buen puerto de los procesos electorales.
Quisiera también aprovechar, lo hemos platicado, señor Gobernador, señores legisladores, amigas, amigos, presidencias, Presidenta y presidentes de los partidos políticos, algunas buenas cifras que se mueven minuto a minuto, así que en el momento en que las diga ya están desfasadas al alza, pero que demuestra el compromiso de la ciudadanía con la construcción y recreación de la democracia en la entidad.
Para el proceso electoral del próximo 5 de junio hoy ya contamos con la anuencia y con la aceptación en consecuencia, pero ya con la capacitación de 170 por ciento de las y los ciudadanos que necesitamos para integrar las más de cuatro mil mesas directivas de casilla. Y faltan 29 días todavía por delante.
Y, por lo que hace al proceso de Revocación de Mandato, aunque sé que el acuerdo que hoy suscribimos es para las elecciones, pero ya que estoy aquí, señor Gobernador, señoras y señores, amigas y amigos, discúlpenme, hoy tenemos ya 180 por ciento de las y los funcionarios requeridos para instalar las casillas que, a diferencia de lo que ocurrió en la Consulta Popular, estarán en todos los municipios de la entidad.
En tal sentido, permítanme concluir mi intervención haciendo dos llamados: Uno de ellos es hacia la ciudadanía, para los 2.2 millones de electores inscritos en la Lista Nominal, para que se informen, participen en la deliberación democrática de la entidad y voten libremente en las poco más de cuatro mil casillas que se instalarán el próximo 5 de junio en las que se renovará la gubernatura del estado.
El segundo llamado es también para que todas y todos los electores incluidos en la Lista Nominal de la entidad se informen, pero aquí sobre los pros y los contras de la decisión que podrán tomar el próximo 10 de abril en la primera consulta ciudadana para la eventual Revocación de Mandato del Titular de la Presidencia de la República.
En tal sentido, para que la ciudadanía se informe y reflexione sobre el ejercicio de este derecho constitucional, el INE ha difundido más de un millón de impactos en radio y televisión alusivos a este proceso revocatorio y está organizando 3 foros de debate de carácter nacional, un foro de debate a nivel estatal y siete foros de debate, al menos, a nivel distrital en Hidalgo.
El Instituto Nacional Electoral seguirá promoviendo la participación de la ciudadanía en los asuntos públicos y en todas aquellas actividades que contribuyan a la recreación de la democracia y, por supuesto, acompañarán siempre, indefectiblemente, todo compromiso que hagan los actores políticos para recrear la democracia conforme a las reglas del juego que, nie el INE ni el Tribunal Electoral, hemos puesto, que se han pactado por las y los partidos y que hoy rigen la competencia electoral como reglas de nuestra democracia.
Muchas gracias.
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