El pasado 31 de enero, el Instituto Nacional Electoral (INE) asumió la presidencia anual para 2022 del Observatorio de Participación Política de las Mujeres en México. El Observatorio se constituyó el 15 de octubre de 2014 a iniciativa del INE, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y del Instituto Nacional de las Mujeres (INM), en el marco del 61 aniversario de aquella reforma constitucional que le reconoció a las mujeres el derecho político electoral de ejercer el voto activo y a ser electas a diversos cargos públicos.
De conformidad con el convenio de colaboración institucional que dio origen a este mecanismo, firmado hace casi 8 años, su objetivo es coordinar acciones encaminadas a promover la participación de las mujeres en espacios de toma de decisiones en el ámbito público en México, con la finalidad de lograr sinergias que cierren las brechas de género, desde un enfoque de igualdad sustantiva entre mujeres y hombres.
Desde la presidencia anual del Observatorio, el INE reitera sus compromisos y convicción permanentes con la promoción y defensa de los derechos de las mujeres a la participación política en paridad total y a una vida libre de violencia política en razón de género. Se trata también de avanzar en la construcción de una democracia incluyente e igualitaria, características claramente distintivas de los regímenes auténticamente democráticos.
A cargo de la presidencia del Observatorio, el INE asume la responsabilidad de desplegar con energía renovada y en un ambiente de profunda colaboración inter institucional, el seguimiento y evaluación de los avances en la materia, además de continuar en la identificación de la situación de las mujeres en México respecto de su participación política y su acceso a cargos de toma de decisión pública en contextos libres de violencia.
Del mismo modo, desde el portal electrónico del Observatorio, se pondrá a disposición de los gobiernos de los tres órdenes, de los y las legisladoras, de la academia, de organismos regionales, multilaterales y de la sociedad en general, estadísticas que permitan medir con precisión y oportunidad el estado actualizado de la cuestión, pues lo que no se mide, ya lo sabemos, no se puede mejorar.
Para este 2022, el Observatorio debe seguir estudiando y ampliando las herramientas que generen avances sustantivos en esta problemática, como en su momento lo fueron el nuevo modelo de gestión de la violencia política contra las mujeres en razón de género y los criterios y la normativa de ajuste en la postulación paritaria y en la conformación paritaria de cuerpos colegiados de elección popular en cuanto a asignación de diputaciones plurinominales así como paridad en las gubernaturas y legislaturas locales.
El INE pondrá especial énfasis en tres vertientes. En primer lugar, en estudios que nos puedan ofrecer inferencias o certezas sobre cómo votan las mujeres cuando en la boleta encuentran candidatas. En segundo, en llevar a cabo análisis que nos permitan determinar de mejor manera cómo enfrentar las resistencias patriarcales y obstáculos políticos aun visibles, que discriminan a las mujeres al impedirles votar, ser votadas o ejercer los cargos ya obtenidos, en los que con frecuencia se les invisibiliza o vulnera, en el ámbito municipal y en los sistemas normativos internos principalmente.
En tercero, en la construcción de las respectivas y necesarias propuestas de reformas legales y de políticas públicas electorales para atender estas manifestaciones inaceptables del machismo político, que tanto daño causa a la fibra democrática de nuestro país.
El Observatorio será un engrane importante para conjuntar sinergias que logren una auténtica igualdad sustantiva en México, para que se vayan materializando y visibilizando plenamente acciones en beneficio del importante y mayoritario grupo que conforman las mujeres en nuestro país.