Versión estenográfica de la inauguración del ciclo de foros sobre los resultados del monitoreo de las transmisiones en precampaña y campaña electoral en radio y tv 2021

Escrito por: INE
Tema: Discursos

VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INAUGURACIÓN DEL CICLO DE FOROS SOBRE LOS RESULTADOS DEL MONITOREO DE LAS TRANSMISIONES SOBRE LAS PRECAMPAÑAS Y CAMPAÑAS ELECTORALES EN LOS PROGRAMAS DE RADIO Y TELEVISIÓN QUE DIFUNDAN NOTICIAS DURANTE EL PROCESO ELECTORAL FEDERAL 2020-2021

Patricia Martínez Torreblanca: Buenos días a todos, les damos la más cordial bienvenida a los Foros sobre los resultados del monitoreo de las transmisiones sobre las precampañas y campañas en los programas de radio y televisión, que difundieron noticias durante el Proceso Electoral Federal 2020-2021. 

Estos trabajos representan el esfuerzo institucional del INE y de la UNAM, a través de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, como una aportación a los diversos procesos democráticos que se suceden en la sociedad mexicana., 

Estos foros tienen como objetivo, ampliar el alcance de la difusión de los resultados obtenidos de este monitoreo. 

Y para dar la inauguración de este foro que incluyó, vale mencionar, nuevas variables sobre género en su metodología. 

Damos la bienvenida al Consejero Presidente del INE, doctor Lorenzo Córdova Vianello, para que nos dirija unas palabras. 

Por favor, doctor. 

Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello: Muchas gracias.

Muy buenos días tengan todas y todos. 

Saludo con mucho afecto a mi querida y admirada amiga, la Directora de la Facultad de Ciencias Políticas, a la doctora Carola García Calderón, a los colegas de la propia facultad y, por supuesto, a las y los compañeros del Instituto Nacional Electoral, empezando por la Consejera Claudia Zavala, Presidenta del Comité de Radio y Televisión del Instituto, y a mi compañero, el Consejero Martín Faz, así como al Director de Prerrogativas y Partidos Políticos, al maestro Patricio Ballados. 

Muy buenos días a todas y todos. 

Los medios de comunicación se han convertido en mecanismos, instrumentos indispensables en la lucha democrática por los poderes públicos, prácticamente todas las personas que aspiran a convertirse a candidatos o candidatas a algún puesto de representación política suelen promocionarse a través de los medios de comunicación y usarlos para posicionar sus posturas, sus planteamientos, sus propuestas, y también para atacar a sus oponentes. 

De hecho, tendríamos que reconocer que no existe una sola democracia moderna en la que los medios electrónicos, en particular, no jueguen un papel central en la difusión de las plataformas políticas. 

No es casual que autores como Robert Dahl, al enumerar las características que son indispensables para que las sociedades políticas puedan considerarse como poliarquías, es decir, sociedades democráticas, se enumere la libertad de prensa y el rol de los medios en general, como un papel fundamental de la recreación de la democracia. 

Hace más de 13 años, esta influencia de los medios de comunicación en la competencia electoral fue ampliamente reconocida por las y los legisladores de nuestro país y motivó una reforma constitucional para evitar que el acceso a dichos medios distorsionara la equidad en las elecciones. 

De ahí que en la reforma de 2007-2008, el constituyente haya diseñado un modelo de comunicación política que garantizan los partidos y a las candidaturas, el acceso a la radio y la televisión a través de los tiempos del Estado mexicano. 

Más allá de la complejidad que implicó poner en marcha esta pieza de ingeniera constitucional, lo cierto es que este modelo de comunicación se ha consolidado como una herramienta del andamiaje electoral que contribuye a la equidad de las elecciones y que ha reivindicado la capacidad regulatoria del Estado mexicano. 

Claramente el modelo de comunicación política ha garantizado a los contendientes el acceso gratuito y equitativo al espacio radioeléctrico, y en virtud de que sus grabaciones son reconocidas por el Tribunal Electoral, como prueba plena en caso de impugnaciones, también ha contribuido a disminuir la liticidad, el entorno, la comunicación política en nuestro país. 

Los resultados de este modelo hablan por sí mismos, por más de 12 años se ha garantizado el acceso equitativo en la radio y en la televisión a partidos y candidatos, y desde 2014 ha contribuido también para la equidad en el plano local de 271 elecciones en las entidades federativas que ha tenido que organizar el propio Institución Nacional Electoral.

Ha logrado que los niveles de cumplimiento de la industria promedien el 98 por ciento de la pauta emitida por la autoridad electoral, con lo cual se demuestra su viabilidad y hay que reconocerlo, el compromiso de la propia industria de la radio y la televisión no solamente con este mandato constitucional, sino también el compromiso con la recreación de la democracia.

Además, ha sido una herramienta disuasiva muy importante para que los particulares eviten adquirir tiempos en radio y televisión para trata de influir en las contiendas.

En la Elección de 2021, la más grande y compleja de nuestra historia, el modelo de comunicación política permitió que todas las fuerzas contendientes y las candidaturas pudieran difundir sus plataformas y propuestas conforme a los tiempos establecidos en el marco constitucional.

Cabe mencionar que una parte importante de la equidad en los medios electrónicos implican no solo transmitir los promocionales pautados por el INE en los tiempos previstos por la norma, sino el tratamiento que los medios de comunicación le dan a la cobertura de las campañas para que sea suficientemente equitativa e imparcial.

Para ello, de cara a las Elecciones Federales de 2021, suscribimos una vez más un convenio de colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México y la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la misma para que se llevar a cabo el monitoreo de las campañas en 493 noticieros y en 10 programas de revista o espectáculos los más relevantes en todo el país, conforme a la metodología aprobada por el Consejo General del INE.

El informe de este monitoreo realizado del 4 de abril al 2 de junio ya fue presentado al Consejo General, y si bien va a ser motivo de un análisis cuidadoso por parte de quienes participaran en este foro, permítanme señalar algunos de sus datos más relevantes en esta inauguración.

El tiempo total de monitoreo supone un poco más de 27 mil 899 horas. De este tiempo, el 72.1 fue monitoreado en radio; y el 27.9, en televisión.

Del tiempo total monitoreado a las campañas federales, le dedicaron un poco más de mil 51 horas. Y de ese tiempo, el 85.7 por ciento fue en radio; y 14.3 por ciento, en televisión.

Se detectó que del total de piezas informativas en los programas de análisis, debate y opinión, en el 85.2 por ciento no hubo valoraciones de los conductores o reporteros, con lo cual se cumplió con el digamos, compromiso, con la finalidad de que la información fuera esencialmente eso.

Finalmente, se observó que el 40.5 por ciento de la cobertura de las campañas no registró especificación alguna de género.

Estoy convencido que el informe contiene información muy útil para evaluar la forma en que los medios de comunicación van a acompañando la evolución de la democracia mexicana.

Es claro que el tema de género y la no disminución, no discriminación, perdón, son aspectos que debemos seguir impulsando y cuidando, tanto en la cobertura noticiosa de las campañas como en las valoraciones de los medios de comunicación, con la finalidad de avanzar aún más en la construcción de una democracia sustantiva y paritaria.

No obstante, desde mi perspectiva, la pluralidad de medios y en los medios, que es como recuerda Michelangelo Bovero, una de las condiciones fundamentales para la recreación de la democracia es ya realizada, ya concretada en cada proceso electoral.

El rol de las y los concesionarios es cada vez más responsable en el cumplimiento de la pauta emitida por esta autoridad electoral y el tratamiento que le dan las notas, es, como he mencionado, en su inmensa mayoría, información sin valoración y, por lo tanto, desde este punto de vista neutral.

Es comprobable que el monitoreo de las campañas en los medios electrónicos está contribuyendo a elevar el contexto de exigencia a la industria de la comunicación, y de esta forma está contribuyendo al buen desarrollo de las elecciones en nuestro país, así como la difusión y recreación del intenso, rico y venturoso, debo decir, pluralismo político.

Por ello, debo insistir en que no olvidemos de dónde venimos, más en los tiempos que corren, en los que la memoria política suele ser breve y en los que la verdad no necesariamente es un valor en la discusión pública.

Nuestro Sistema Electoral se edificó para erradicar la inequidad y la intervención gubernamental a favor de su partido y sus candidaturas. Las mejores pruebas de lo que ha contribuido erradicar el modelo de comunicación política son precisamente las experiencias de 1994 y la de 2006, por no hablar la de 1988, en donde está documentado por los estudiosos que el 95 por ciento de la cobertura en medios era para el candidato gubernamental del partido gobernante.

En 94, años después, el candidato presidencial del partido en el gobierno recibió casi el 90 por ciento de la cobertura en los medios de comunicación; y en 2006, el entonces Presidente de la República intervino indebidamente a favor de su partido, y algunos grupos utilizaron sus relaciones personales, empresariales o su capacidad económica, para impulsar campañas de desprestigio en la radio y la televisión adquiriendo tiempos, cosa que ya desde entonces estaba prohibida en la legislación, aunque no había consecuencias jurídicas para ello.

Es por eso que todos quienes creemos que el pluralismo es la base de la democracia, y quienes creemos en la importancia de la equidad en las contiendas como premisa de elecciones libres y justas, equitativas, debemos defender el modelo actual de comunicación política sin obviar que éste, eventualmente, incluso sería hasta pertinente, sea objeto de una revisión, más en tiempos en los que está existiendo una migración de la publicidad hacia los mecanismos, hacia los medios digitales.

Sin embargo, no olvidemos que en México todavía la radio y la televisión monopolizan, concentran, la mayor parte de los esfuerzos publicitarios de los partidos políticos y de las campañas.

Pensar que la radio y la televisión ya no son importantes y que lo único en lo que hay que centrar nuestra atención son los medios digitales, o que no pasa nada en la convivencia democrática si volvemos a esa época en la que las y los contendientes compraban los tiempos en la radio y la televisión, es abrirle la puerta una vez más a la desigualdad en la competencia electoral, es regresar al pasado autoritario en donde la difícil relación dinero, elecciones y política, era parte fundamental de un problema hoy superado, no resuelto, pero en buena medida superado.

No nos engañemos, las democracias modernas necesitan pluralidad, vuelvo a insistir, en los medios y de los medios, tanto como una garantía para acceder a ellos y de que el poder del dinero no se vuelva un factor determinante en la lucha por el poder político como en la premisa de que en la democracia la discusión por definición tiene que ser una discusión informada, y una discusión informada inevitablemente implica la recreación de pluralismo y de que todas las voces tengan posibilidad de ser escuchadas.

Permítanme concluir con una reflexión final a propósito de una eventual reforma electoral, que una y otra vez está poniéndose en la mesa de la discusión pública por parte de distintos autores políticos desde el término de las pasadas campañas electorales.

Vale la pena en este contexto no olvidar que la ruta de la democracia tiene dos vías; una, que avanza hacía su consolidación y otra que es regresiva y que podría eventualmente hacernos volver a un pasado autoritario.

La experiencia de múltiples países en múltiples contextos, en distintos momentos a lo largo de los últimos 100 años, nos evidencian que la democracia si bien tarda mucho construirse, también es posible que se desmonte, no perdamos de vista a los desafíos que conlleva ahí una reforma electoral en un contexto nominado por la intolerancia y la polarización.

No es un buen augurio modificar la legislación electoral en un contexto de incesantes ataques y descalificaciones a quien no piensa igual que uno, o incluso a la autoridad electoral, a las autoridades electorales que son producto de un arreglo democrático que se ha pactado y concretado a lo largo de distintas reformas electorales en los últimos 45 años.

Si la democracia es una obra colectiva, a todas y todos nos corresponde también defenderla y cuidarla.

En ese sentido, es indispensable que una reforma eventual se dé con base en un debate informado, objetivo con datos altitud de miras sin revanchismos para que el pluralismo, la representación, la diversidad, la inclusión y el poder regulado conquistes de nuestra transición a la democracia sean vistas y asimiladas, asumidas como virtudes y no como debilidades de nuestra convivencia política.

Estoy convencido de que este espacio, este foro generará justamente información objetiva o información precisa que nos permita alimentar una discusión como la que eventualmente se iniciará dentro de poco en nuestro país.

Las instituciones, termino diciendo, no se defienden solos, tampoco la democracia.

Muchas gracias.

Patricia Martínez Torreblanca: Muchísimas gracias, doctor Lorenzo Córdova Vianello, damos el uso de la voz a la doctora Carola García Calderón, directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

Carola García Calderón: Buenos días a todas, a todos.

Me es muy grato saludar al Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral, el doctor Lorenzo Córdova Vianello, también saludo a los consejeros del INE del Comité de Radio y Televisión, así como a todos quienes nos acompañan a través de las distintas plataformas en que se realiza esta transmisión.

Agradezco también a quienes hacen posible la logística para estar el día de hoy reunidas y reunidos virtualmente en este foro.

Estos foros tienen por objetivo analizar los resultados del monitoreo en las transmisiones sobre las precampañas y campañas electorales en los programas de radio y televisión que difundieron noticias durante el proceso electoral 2020-2021, mismo que estuvo a cargo de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales.

El tema que nos convoca es de gran relevancia para nuestra democracia, en las sociedades contemporáneas gran parte de la conformación del espacio público, atraviesa por los medios de comunicación, lo que les otorga a estos una gran centralidad de los procesos de comunicación política.

Los medios tienen la capacidad para establecer parte de la agenda pública, esto sin duda nos convierte en actores claves dentro de la construcción y el ejercicio de las prácticas democráticas, teniendo una especial trascendencia en los momentos cuando se llevan a cabo elecciones.

El monitoreo y el análisis de la cobertura informativa de los medios de comunicación en los procesos electorales reviste gran importancia para que los ciudadanos cuenten con información confiable a partir de las cuales puedan fundar sus decisiones.

El monitoreo realizado por la Facultad de Ciencias Políticas retoma las técnicas de investigación utilizadas de forma intensiva en instituciones gubernamentales y por empresas de mercadotecnia.

Tienen por finalidad dar seguimiento a la opinión pública al respecto de alguna institución o marca.

Su uso como instrumento de análisis democrático para observar y evaluar el comportamiento informativo de los medios sobre determinados acontecimientos en las precampañas y campañas, tiene ya algunos años implementadas. 

El monitoreo de noticias resulta primordial para conocer lo que está sucediendo en el espacio público, con respecto a la cobertura informativa que los medios dan a los distintos partidos, así como a las candidatas y a los candidatos, antes y durante de la contienda electoral. Este monitoreo, recordemos, se elabora durante el tiempo de precampañas y también durante las propias campañas políticas. 

Es necesario para este monitoreo establecer variables que permitan analizar la información, con la finalidad de generar conocimiento respecto a lo que se deba trabajar en el futuro, para establecer la igualdad de posibilidades a todas y todos los candidatos, así como a los partidos, y darle oportunidad de establecer normativas para efectuar elecciones más equitativas y justas. 

Estas prácticas por parte de los institutos encargados de los comicios resultan fundamental al llevar a cabo el análisis de los contenidos informativos divulgados en los medios. 

El surgimiento de este trabajo, de este tipo de trabajo de monitoreo, coincide con las transformaciones políticas experimentadas en las últimas décadas del siglo pasado, que con dificultades y logros, avances y retrocesos, han venido consolidando distintas prácticas democráticas. 

Es así como se ha pugnado por el establecimiento de condiciones igualitarias de competencia, en la que se garantice la participación equitativa de todas las corrientes políticas en los procesos electorales, buscando la transparencia en las actividades proselitistas.

Llevar a cabo el monitoreo de las elecciones más grandes en la historia de México, en 2021, fue sin duda una labor titánica y además fue una labor que se realizó en condiciones de pandemia, que esto lo volvió doblemente complejo. 

Esta labor permite tomar decisiones a partir de lo que sucede en la información difundida en los medios durante los procesos electorales. 

También resulta necesario para reaccionar ante situaciones de violencia, a manera de alerta de los desafíos que enfrenta nuestra democracia. 

Esto avisos requieren ser tomados en cuenta para ser más eficiente la normatividad electoral, con el objetivo de mejorar los mecanismos de igualdad de género, así como la transición de poder de manera justa, equitativa y pacífica a nuestro país. 

En esta ocasión, en el monitoreo que realizó la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México, se registraron 49 mil 919 piezas de monitoreo para todas las candidaturas, de las cuales 40 mil 271 correspondieron a radio y nueve mil 648 a televisión. 

Es pertinente señalar que todavía, y si nos referimos a la televisión que tiene una cobertura nacional, la televisión sigue siendo el principal medio a través del cual se informa a la población mexicana. 

El tiempo total otorgada a las campañas fue de mil 51 horas 44 minutos, y el género periodístico más utilizado en ambos medios fue la nota informativa.

Se registraron siete mil 918 menciones de género para mujeres; 12 mil 959 para hombres; y 30 mil 323 menciones que no incluyeron una especificación de género.

Una parte nueva, novedosa, que caracterizó este monitoreo fue la incorporación de variables para la identificación de un lenguaje que propicie que se erradique la violencia de género en la cobertura mediática en las campañas.

El decir hubo un énfasis, un seguimiento de lo que tiene que ver al tratamiento de género, se registraron 16 mil 82 piezas de monitoreo sin uso de lenguaje incluyente y no sexista para las candidaturas, de las cuales 13 mil 28 fueron realizadas en radio; y tres mil 54, en televisión.

Asimismo, se registró un total de 123 piezas de monitoreo con estereotipo de género; pudiera parecer baja este tipo de menciones, pero también nos da cuenta de que se está siendo sensible al tratamiento de género.

De estas 123 piezas con estereotipos de género, 100 correspondieron a radio; y 23, a periodismo.

Esto nos indica que las variables de género son una veta en la que el INE puede seguir trabajando, tiene que estar al pendiente para evitar cualquier signo de inequidad que llegue a surgir en procesos electorales futuros, así como promover que la radio y la televisión se constituyan cada vez más como espacios en donde prevalezcan la discusión y participación política pacífica.

Por ello, un objetivo primordial de los foros que hoy iniciamos es construir un espacio en el que se discuta y analiza el impacto, así como la situación de violencia política contra las mujeres en razón de género, que se nivela a contienda electoral 2020-2021.

A manera de síntesis, en los contextos en los que se da la mediatización del espacio público como el nuestro, es fundamental realizar un seguimiento de tratamiento informativo de lo que sucede respecto en las campañas en los medios noticiosos.

Por ello, el monitoreo resulta ser un instrumento valioso en manos de las instituciones que defienden las prácticas democráticas para impulsar y promover el desarrollo de procesos electorales en los que los ciudadanos se encuentren mejor informados.

Es así como el realizar el monitoreo tiene la gran visión de estar al pendiente del comportamiento informativo de los medios, demandándoles los principios de objetividad informativa, y el tratamiento equitativo de las candidaturas de las campañas políticas a través del cumplimiento de la ley.

Por lo que la organización de estos foros conformados con cuatro mesas buscan abrir el alcance y la difusión de los resultados del monitoreo de medios de proceso electoral pasado.

Solo me resta expresar que es un gran honor que esta tarea haya sido encomendada por séptima ocasión a la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad, ya que es una importante labor que contribuye con la democracia, misión principal que consideraban los padres fundadores de la Facultad de Ciencias Políticas, y reconozco la ardua labor tanto del Instituto Nacional Electoral como de la UNAM.

No me queda más que darles la bienvenida a estos foros.

Muchas gracias.

Patricia Martínez Torreblanca: Muchísimas gracias, doctora.

Una vez escuchando estas interesantes reflexiones, tanto del doctor Lorenzo Córdova Vianello, Consejero Presidente, y de la doctora Carola García Calderón, Directora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, podemos dar paso a este importante espacio de reflexión, que inicia con el Foro 1 Monitoreo de Noticiarios 2020-2021. Contexto, Alcances y Resultados.

Muchísimas gracias a todos.

Tenemos un espacio para poder dar paso a estos foros.

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