VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DE LA CONSEJERA DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL (INE), CARLA HUMPHREY JORDAN, EN LA PRESENTACIÓN DE LA AGENDA 2020, PARIDAD EN TODO DE QUERÉTARO
Muchas gracias, bueno días a todas y a todos.
Gracias a quienes nos acompañan en esta transmisión.
Igual, me permito también agradecer la presencia en esta mesa virtual, por supuesto, el doctor Lorenzo Córdova Vianello, Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral.
También, de la doctora Margarita Teresa de Jesús García Gasca, Rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro.
Por supuesto, además, de grandes aliadas en este tema, la doctora Gabriela Nieto, Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Querétaro; también, de la Consejera Yolanda Elías Calles, Consejera del Instituto Electoral del Estado de Querétaro.
Por supuesto, también, de nuestra Vocal Ejecutiva, Ana Lilia Pérez Mendoza, y también, de Valeria Guerrero, que es la Directora General del Instituto Queretano de las Mujeres.
Sin duda esta agenda, desde que nos invitaron a participar en ella y sé que estuvo un poco retrasada la presentación precisamente por la pandemia, me parece un gusto enorme, una gran noticia poder generar estas sinergias y acciones conjuntas, particularmente con un estado que lleva en alto la agenda de género.
Como ya se nos había dicho aquí, bueno, es un estado en el que 52 por ciento de las mujeres integran la legislatura ya por dos ocasiones consecutivas, también, que nueve de 18 mujeres son presidentas de ayuntamiento, bueno, fueron de 2014 a 18, y ahora son seis, pero siempre pujando por esta representación activa, puntual y, además, generando estas acciones conjuntas con el resto de las mujeres.
Y bueno, me permito iniciar con, que desde 2012 el Informe de la Comisión Global sobre Elecciones, Democracia y Seguridad señalaba que las elecciones celebradas con integralidad son elecciones basadas en los principios democráticos del sufragio universa e igualdad política, consagrados con normas y tratados internacionales cuya preparación y gestión son profesionales y transparentes durante todo el ciclo electoral.
Ya se ha hablado aquí por quienes me antecedieron en el uso de la voz de la importancia de la constitucionalización del principio de paridad en la constitución en 2014, y que antes parecía una concesión graciosa del legislador y de los partidos políticos, cómo tenían que garantizar distintas cuotas de participación política de las mujeres, en la que, hay que decirlo muy claramente, los avances empezaron a nivel local, ya señalaba el doctor Córdova cómo a raíz de acciones conjuntas entre la Sala Superior y también el Instituto Nacional Electoral, se garantizó la letra de la ley.
Sin embargo, creo que, quienes hemos integrado también, institutos electorales locales, hoy OPLES, y tribunales electorales de las entidades federativas, hemos tenido muy claro de las batallas que hemos tenido que dar desde el foro local, desde el ámbito local, con resolución de sentencias, y creo que esto ha provocado, además, una serie de inercias ha tenido a parar a la legislación tanto local como nacional.
Por ejemplo, este tres por ciento para capacitar y formar liderazgo de mujeres, pero también una serie de acciones que vienen desde lo local para garantizar este avance contundente de mujeres que ahora es necesario poder sentar las bases con otros criterios y otras acciones, por eso es una buena noticia la presentación de esta Agenda 2020 Paridad en Todo, que además lo sitúa en un reto central, fueron muchos años para lograr construir esta reforma constitucional por mujeres, también por hombres, pero me parece que principalmente mujeres, es respecto a garantizar la paridad en otros espacios, y no solamente en los espacios legislativos.
También, garantizar paridad horizontal y vertical, que hoy está garantizada, y también, hacerlo en los tres ordenes de gobierno y en los tres poderes de los estados.
Creo que estos es una misión que vamos a tener que ir de la mano distintas autoridades y que más, y qué mejor noticia hacerlo acompañado además de instituciones académicas como la Universidad Autónoma de Querétaro.
Tenemos un reto importantísimo de cara a la elección, otra vez, más grande de nuestra historia, con más de 21 mil cargos, con 95 millones de mexicanas y mexicanos que estaremos inscritos en el Padrón Electoral, y es así como encabezar la comisión, ahora ya permanente, de Género y No Discriminación del Instituto Nacional Electoral, que ya ahora es permanente a partir de la reforma en materia de violencia política publicada en le Diario Oficial de la Federación el 13 de abril de 2020.
Es una gran noticia, porque habla de la importancia de este tema, de garantizar la paridad, de hacer acciones transversales dentro de la propia institución, y también, generar estas acciones con las entidades federativas para que seamos aliados en defender estos avances, en concretarlos y en generar acciones que nos permitan a todas y a todos garantizar la participación igualitaria en condiciones, además, primero paritarias, pero también, e condiciones libres de violencia.
Creo que es una gran noticia la aprobación de la reforma denominada “Paridad Ya” o “Paridad Total” en el 2019. Pero creo que la parte importante que faltaba y que también luchamos desde distintos espacios es justamente la tipificación, la sanción, la prevención, la atención y la obligación de disminuir o de erradicar la violencia política en contra de las mujeres.
Fue un gran acierto que desde el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación junto con el INE y con otras instancias y dependencias gubernamentales se pudiera hacer el Protocolo para atender, en ese momento, la violencia política en contra de las mujeres y que ha ido avanzado hasta generar ahora un tipo penal de violencia política, una obligaciones muy claras para los partidos políticos, para las autoridades electorales en todo el país, y generar sanciones y acciones concretas que deben de realizarse, justamente para atender, prevenir, sancionar, y muy importante, reparar la violencia política que sufren las mujeres en el ejercicio de sus derechos político electorales.
Es fundamental, además, en este momento de emergencia sanitaria, que tengamos muy claro que tenemos que elevar estas medidas para detectar la violencia, porque, como ya se mencionaba, no solamente ha aumentado mucho en el ámbito intrafamiliar, también hemos visto casos y creo que desafortunadamente quizás se pueda replicar en el ámbito del ejercicio de los derechos político electorales de las mujeres, y creo que tenemos que tener las acciones como Instituto, como autoridades electorales, y tener, además, estas acciones que repliquen todo lo que se vaya haciendo desde nivel nacional y generando, además, esta retroalimentación con autoridades locales que permitan tener justamente este cerco para prevenir y erradicar la violencia política en contra de las mujeres.
Importante, como ya lo señaló el doctor Córdova, que se nos mandató desde la Sala Superior, a crear unos lineamientos para el registro de personas infractoras de violencia política en contra de las mujeres. Que tenemos que hacerlo antes del proceso electoral, que tendremos que generar sinergias con las autoridades jurisdiccionales y también las administrativas electorales, para tener este padrón de personas que violenten políticamente a las mujeres por el ejercicio de sus derechos.
También para implementar, a partir de ahí, acciones y responsabilidades de las autoridades, pero también de las personas que integren este padrón de personas que violenten políticamente a las mujeres.
Y, en ese sentido, además de generar estos lineamientos, de establecer los periodos por los que tendrán que estar, digamos, inscritos en este padrón que tiene una misión, además, muy importante de inhibir públicamente a las personas que cometan este tipo de violencia política; es decir, la Sala Superior nos mandata tener este registro para, en su caso, resolver cuáles son las consecuencias jurídicas de cada una de estas personas, de estar ahí, por ejemplo, el limitar su acceso a una candidatura a un cargo de elección popular, si este es el tema, pero también para inhibir públicamente que una persona que esté ahí, pues sea de conocimiento público, porque será un registro público que pueda ser consultado por diversas autoridades, de que, bueno fue condenado ya por una sentencia firme de un tribunal electoral, o bien por una autoridad jurisdiccional, cuya resolución no fue impugnada.
Hablábamos también, entre las y los consejeros electorales, de que esto pudiera, todavía no está resuelto, y en primero momento tendremos que acatar en sus términos la sentencia del Tribunal, ser un piso mínimo respecto de las condiciones de violencia que viven o vivimos las mujeres en el ejercicio de nuestros derechos y, quizá ampliarlo en primer lugar obviamente, aquéllos que tengan una condena penal por violencia política. Tener una interacción con la Fiscalía de Delitos Electorales y también, por qué no, pensar en otros ámbitos.
Ya hay una iniciativa por parte de diputadas de diversos partidos políticos, en el sentido de que también las personas que sean condenadas por violencia de género, tengan una consecuencia, o pueda tener una consecuencia en caso de que quieran postularse a un cargo de elección popular.
Además, el INE tiene un desafío importante, porque tenemos que emitir lineamientos para que los partidos políticos prevengan, atiendan, sancionen, reparen y erradiquen la violencia política contra las mujeres en razón de género; tienen que tener en sus estatutos todas estas medidas que garanticen un acceso a la justicia partidaria, pero también sanciones y elementos de reparación en contra de las acciones de violencia política.
Y, además, junto con otra sentencia de la Sala Superior que, me parece muy relevante, respecto a la omisión de un Congreso local de armonizar su legislación en materia de paridad de género, pero también de violencia política, mandata directamente a ese Congreso a legislar de manera inmediata, pero, sin embargo, para que las mujeres no se queden sin este parámetro de protección y de garantía de sus derechos, establece que los Organismos Públicos Locales, o ese en concreto, tenga que emitir unos lineamientos para cumplir estos parámetros respecto a la reforma constitucional y legal en esta materia.
Y esto ofrece también una ruta muy clara para que cualquier Congreso del estado sepa que, sin importar que ellos no legislen en el tiempo correspondiente o adecuado para que las reformas se apliquen en el siguiente proceso electoral, habrá una serie de medidas que garantizarán que esa reforma en materia de paridad y de violencia política, se cumpla.
Finalmente, uno de los retos más importantes que tendremos enfrente y para el que estaremos trabajando, es buscar la auténtica igualdad sustantiva, erradicar la violencia política, como ya lo había dicho, y tenemos tres semanas para tener claro el panorama, generar todos estos lineamientos que se nos obligan desde instancias jurisdiccionales, pero también que es una misión que, desde el INE se ha abanderado ya por muchos años, de generar condiciones igualitarias y libres de violencia para la participación política de las mujeres.
La paridad de género es un principio constitucional que busca la igualdad entre hombres y mujeres, en el acceso a puestos de participación y representación política; es decir, no busca ni más, ni menos que una igualdad de derechos.
La normativa indicada y la ley busca asegurar dicha participación igualitaria en candidaturas en el Legislativo, pero ya también en otros poderes del Estado, por ello, resultan fundamentales todo este marco que nos podemos dar como autoridades electorales y, desde la academia, para generar estas condiciones de participación igualitaria, en primer lugar, pero en condiciones seguras.
La Paridad en Todo debe ser una garantía, no sólo normativa, sino también debe seguir permeando en los diversos actores políticos, para que la misma se materialice con hechos y que, con ello, logremos al fin ser una sociedad con igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
Y me permito concluir con la frase de una escritora estadounidense Frances Wright que dice: “La igualdad es el alma de la libertad; de hecho, no hay libertad sin ella”.
Muchas gracias y cuenten, desde luego, con el doctor Córdova, con mi participación también desde la presidencia de la Comisión de Igualdad de Género y No Discriminación y con todas nuestras compañeras y compañeros, para acompañarlas en esta Agenda Paridad 2020 y, por supuesto, para generar todas las sinergias, las acciones necesarias para garantizar la participación de las mujeres en condiciones igualitarias y de seguridad.
Gracias.
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