VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA INTERVENCIÓN DEL CONSEJERO DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL, ENRIQUE ANDRADE GONZÁLEZ, EN EL TEMA 2: ACCESO A LA PARTICIPACIÓN Y REPRESENTACIÓN, EN EL MARCO DEL ENCUENTRO NACIONAL PARA UNA REFORMA POLÍTICO-ELECTORAL DEL ESTADO MEXICANO, REALIZADO EN EL AUDITORIO DE LA FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES, DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE QUERÉTARO
Muy buenas tardes, muchas gracias por la invitación, al SOMEE, a este Encuentro Nacional que me da la oportunidad de platicar sobre algunos temas interesantes, respecto al tema de esta mesa que, creo que todos lo abordamos de distinta forma, de Participación y Representación.
Como verán, también mi ponencia es un poco diferente a lo ya presentado, pero, finalmente, creo que se liga con lo platicado.
Me da mucho gusto compartir la mesa, por supuesto, con Marcela, que me da gusto verla, con Víctor Alarcón, con Luis Miguel y con Sara Lozano que me da mucho gusto estar con ustedes y saludarlos.
Creo que el tema que convoca a este Encuentro Nacional es importante, de hablar sobre una posible reforma electoral del Estado mexicano y, entre expertos, como es la sociedad que nos convoca a este encuentro, creo que es importante analizar, no lo que se está platicando necesariamente en las iniciativas que estamos viendo y que se dan a conocer en los medios o que parecieran que surgen de algún diputado o de alguna fracción de algún partido político, en fin, sino realmente las que pensamos que pueden ser necesarias para avanzar en democracia y de estas reformas o de estos temas la verdad es que ahorita no se está hablando, pareciera ser que el tema de lo que cuesta, el tema de la austeridad y el tema económico está abarcando más allá de lo que realmente las personas que nos dedicamos a la materia electoral podemos detectar como posibles necesidades o avances para mejorar nuestra democracia.
Uno de estos temas es, por supuesto es, la segunda vuelta electoral, por ejemplo, que es importante discutirla, si para México sería importante, sería necesaria tenerla, con qué reglas hacerlo, en fin.
La otra, por ejemplo, el voto obligatorio, que lo tienen otros países, si fuera necesario hacerlo en México o no, si esto nos daría una mayor participación, como estaba diciendo ahorita Luis Miguel o no, en fin. Creo que sería interesante.
Y otro, es un tema que es al que yo me quiero referir, que es la representación de grupos minoritarios que actualmente están en desventaja, por alguna razón y, que mediante acciones afirmativas o reformas legales se pueden realizar ciertas medidas compensatorias para que tengan una mayor representación política.
En el caso, por supuesto, que yo quiero trata, es el caso de una posible acción afirmativa en relación a buscar una representación de los migrantes en la Cámara de Diputados Federal, de preferencia, a partir de 2021.
¿Cuál es el origen de estas acciones afirmativas? Sabemos perfectamente, digamos, la más importante de todas, la acción afirmativa de género, que empezó primero con un 60-40 como una cuota para que se conformara de esta forma la Cámara de Diputados, después se buscó un 70-30, y finalmente, a partir de 2014 tenemos el 50-50.
Lo que empezó como una acción afirmativa se fue convirtiendo finalmente en reformas legales y constitucionales hasta que ya tenemos ahorita una Cámara de Diputados prácticamente paritaria, y una Cámara de senadores igual.
Otro ejemplo de una acción afirmativa, también, que surgió como una medida administrativa y no necesariamente reforma legal, fue buscar una mayor representación para la comunidad indígena.
Ustedes ya saben la historia que tenemos, la cantidad de población indígena que tenemos en México, digo, reconocida aproximadamente más de 10 millones, en fin, y que, además, bueno no tenía una representación política propia.
Lo que se hizo a partir de que hicimos la distritación nacional es detectar en qué distritos la población es mayoritariamente indígena, es decir, más del 60 por ciento de la conformación del distrito fuera de población indígena, y así se determinó que por lo menos 12 distritos tuvieran como candidato a alguien de la comunidad indígena.
Se impugnó por parte de un partido político y, finalmente, el Tribunal Electoral decidió que no eran 12, sino que tenían que ser 13 los distritos que se consideraran candidatos de población indígena.
Actualmente, en la Cámara de Diputados tenemos 13 diputados que justamente responden a esta cuota, para llamarle de alguna forma, la cuota indígena.
Tenemos un siguiente reto desde luego no es el único grupo, cuando a veces hablo de este tema dicen: “bueno, y por qué ha determinado otros grupos de la sociedad pueden tener el mismo derecho”, sin embargo, creo que el grupo de los migrantes es un grupo que tiene el tamaño y la importancia en México como para tener también una representación política específica.
Nada más para hablar de números, un poquito de datos duros, de manera general, se tienen prácticamente reconocidos 12 millones de ciudadanos mexicanos nacidos en México que están viviendo en Estados Unidos, y que ya con familia, segunda generación, etcétera; podemos llegar a pensar en un número similar a los 30 millones de ciudadanos de origen mexicano.
Y que no dejan de ser ciudadanos mexicanos, esto es importante, porque justamente no hay una prescripción en la Constitución ni en ninguna otra norma, que diga que por no vivir en el territorio mexicano los ciudadanos mexicanos pierden determinados derechos cuando van a vivir a otro lado, como es el caso de Estados Unidos.
No hay ninguna restricción, por lo tanto, el derecho es pleno, el derecho político también debería de ser pleno incluso para los migrantes.
Si comparáramos con qué país pudiera ser esta población más o menos comparable. Bueno, pues es una población mayor a la de Canadá. En Sudamérica solamente sería mayor la población de Brasil y de Colombia. Sería más grande que países europeos, en fin.
Estamos hablando realmente de una comunidad pues muy numerosa y, además, con una gran participación en México, desde el aspecto económico, desde el aspecto social, desde el aspecto familiar, desde el aspecto cultural, en fin.
Yo quisiera preguntarles ¿quiénes de ustedes que están aquí en el salón tienen algún pariente viviendo en Estados Unidos? Si nos damos cuenta, casi siempre somos una mayoría los que tenemos algún pariente viviendo allá.
Y, justamente, a eso nos estamos refiriendo. Si estos ciudadanos que están viviendo allá, que nosotros sabemos las historias, que no todos se fueron por gusto, que no todos se fueron para conocer Estados Unidos, sino se fueron porque México no les dio las oportunidades, o no encontraron las mejores oportunidades en México para quedarse a vivir acá y se tuvieron que ir a vivir allá.
Por eso es la importancia del tema del que estamos hablando. El voto en el extranjero finalmente lo permiten ya más de 17 estados de la República permiten que se vote desde el extranjero en sus elecciones para gobernador.
El próximo 2021 por primera vez va a participar Nayarit y Querétaro justamente, para poder elegir a su gobernador desde el extranjero. Y hay iniciativas muy interesantes para también promover este tema en Veracruz, en Baja California, y en Nuevo León. Tres estados que también están buscando justamente el que se permita el voto desde el extranjero. Creo que será interesante.
En el caso de la representación política es diferente. Aquí, por lo pronto, sí existe un reconocimiento a la fuerza, digamos, o a la importancia de los migrantes, pero se hace dependiendo del estado. Si es un estado mayormente expulsor, o un estado que siente mayor compromiso con los migrantes permite que se tenga un diputado migrante.
Por ejemplo, es el caso de Jalisco, el caso de Guerrero, y el caso de la Ciudad de México, y el caso de Zacatecas. Que prevén – exactamente- el de la, exactamente, que es lo que permite es tener, justamente, una diputación migrante en sus congresos.
Me dice Víctor Alarcón, y con toda la razón, ayer tuvimos un evento justamente hablando de esto, que se aprobó en una comisión del Congreso de la Ciudad de México derogar esta parte del diputado migrante, esperemos que no prospere en el pleno.
¿A favor?
Bueno, pues esto es una muy mala noticia, finalmente ya se derogó en la Ciudad de México. Entonces, solamente tendríamos en Jalisco, Guerrero y Zacatecas; y, bueno, en otros países también que tienen una migración importante, también consideran la posibilidad del diputado migrante.
Como es el caso de Colombia, que tiene una cuota de aproximadamente 10 diputados en su congreso que son migrantes, tiene también una cuota indígena. El caso de Italia, que tiene también diputados migrantes. El caso de Ecuador, prácticamente de 216 países que consideran su voto desde el extranjero, 20 de ellos ya consideran la posibilidad de una representación migrante en sus congresos.
Por eso creo que México está obligado a avanzar en este sentido. Pues simplemente somos el país con la segunda migración más grande en el mundo después de la India, y considerando que la población de la India pues es poco más de mil millones de habitantes. Es decir, creo que se justifica esta posibilidad.
¿Cómo sería la instrumentación de una diputación migrante? En principio, pues se estaría pensando, es en base a los que pueden votar, cuántos diputados migrantes le correspondería a esa población que potencialmente pudiera llegar a votar.
Tenemos ya el programa de credencialización en el extranjero, este programa ha sido exitoso y prácticamente ya tenemos millón y medio de trámites de credenciales de elector en el extranjero, entregadas prácticamente a los ciudadanos una cantidad similar, y en base a esto pudiéramos decir que tendremos en el 2021 aproximadamente este millón y medio de ciudadanos ya potencialmente con la posibilidad de votar.
Se hizo un cálculo en la Dirección de Prerrogativas y dicen, bueno, cuánto cuesta un diputado en el Congreso de la Unión y, son 500 diputados, si hacemos el Padrón Electoral poco más de 90 millones, en fin, se saca el cálculo y dicen: cuesta aproximadamente 200 mil ciudadanos; cada diputado representa, aproximadamente, si lo dividiéramos así, a 200 mil ciudadanos.
Entonces, considerando que tenemos un millón 200, aproximadamente, de ciudadanos ya credencializados en Estados Unidos, con posibilidad de votar, se dice bueno, podemos empezar con seis diputados migrantes; desde luego, esto sería un saque, como puede haber muchos, pero justamente me gusta decirlo en espacios académicos y espacios de estudiosos, porque a veces salen otras ideas y, todas muy valiosas, pero vamos a atender esta sugerencia que dice, tendríamos seis diputados migrantes, uno por cada circunscripción, tenemos cinco circunscripciones en el país; uno por cada circunscripción y uno más en la circunscripción en donde estén los estados de mayor expulsión que es, por ejemplo, a la mejor Guanajuato, a la mejor Michoacán, etcétera, Zacatecas y en base a eso ver en qué circunscripción pudiera caber otro diputado más.
No es fácil, es una situación que apenas se está discutiendo, como les decía, en las comisiones; está en la Comisión de Prerrogativas, en la Comisión que me toca presidir a mí, de Vinculación con los Mexicanos en el Extranjero.
Se harán foros y determinados análisis y estudios, con diputados federales, porque la otra ruta sería que se hiciera una reforma legal, justamente, pero desgraciadamente no vemos que ahorita sea un tema importante para los diputados, entonces creo que tenemos que hacerlo por la vía administrativa, por la vía de las acciones afirmativas.
Hay un debate muy interesante en esto, seguramente ustedes también podrán abordarlo y uno de ellos es, tienen derecho los migrantes que están allá, a tener una representación si ya no están viviendo aquí, no pagan impuestos, etcétera, ese es un punto de vista, habrá que analizarlo.
La otra que es, justamente, el debate que se dio en la Ciudad de México y por lo cual ahora derogaron, pues penosamente esta figura de diputado migrante, es que decían: no tienen interés si no han votado, entonces si no han votado quiere decir que no tienen interés, para qué vamos a poner una figura de diputado migrante en el Congreso.
Esta es una situación con la que se dijo, en la Asamblea de Representantes de la Ciudad de México, en el Congreso de la Ciudad de México y, desgraciadamente, bueno, pues ya prosperó.
Pero, ¿qué quiere decir, realmente no tienen interés porque no han votado? No, no han votado, es complicado el modelo, no todos tenían credencial, es una cuestión progresiva, en fin, pero quitarlo ya avanzado sí se me hace un retroceso terrible que no debiéramos de permitir, porque al rato, pues vamos a quitar el voto en el extranjero en determinada entidad. Tampoco votaron, etcétera.
Desde luego que hay que procurar que voten, pero si no votan, el derecho de todos modos lo tienen. Entonces, creo que no podríamos hacer una situación que fuera un retroceso.
Y, finalmente también, dicen bueno, es que constitucionalmente no pueden votar para diputados, pueden votar para Presidente, pueden votar para senadores y pueden votar para gobernadores de los estados que permiten esta situación. Sin embargo, aquí había que recordar, si no les dimos plenamente el derecho, ahora por no tener ese derecho pleno les vamos a limitar un segundo derecho.
Finalmente, recordar que el derecho político es votar y ser votado, no nada más el votar. Y, bueno, creo que valdría la pena, porque y eso me lo dicen, por ejemplo, los diputados de Zacatecas, porque sería ver el tema trasversalmente, que todo pasara por el tema migrantes: lo que se apruebe de recursos, lo que se apruebe de educación, lo que se apruebe de salud, en fin, que todo tenga que ver con el tema migrante y creo que esa sería la valía que pudieran tener los diputados migrantes, el darle voz y el de visibilizar, justamente, a estos ciudadanos, algunos familiares o parientes que están viviendo allá y que necesitan, en ocasiones, justamente de que México también los volteé a ver.
Muchas gracias.
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