Permítame hacer una breve intervención respecto del mismo.
Creo que es importante en este contexto hacer algunas reflexiones sobre la importancia de la observación electoral a propósito del informe que hoy se nos presenta. Es reconocido, ayer mismo tuvimos oportunidad de constatarlo a partir de declaraciones de quienes integran la misión de observación política de la Fundación para Sistemas Electorales, IFES por sus siglas en inglés, respecto de la robustez de nuestro sistema electoral, que está abierto al escrutinio público nacional e internacional.
Ciertamente, el detalle de la legislación electoral y los procedimientos que empleamos en cada una de las etapas de los comicios han evolucionado en las últimas dos décadas de manera significativa, con base en la experiencia como principal fuente de modulación de los ajustes a las reglas de la competencia electoral.
Dichos ajustes no solo se han nutrido de las opiniones de especialistas, académicos e incluso de los partidos políticos, sino que se han enriquecido de las sugerencias de la observación electoral tanto nacional como la que ejercen los visitantes extranjeros que han venido a atestiguar nuestros procesos electorales y darles seguimiento.
De 1994, año en que se reglamentó la observación de visitantes extranjeros en nuestro país a la fecha, mucho han cambiado tanto las condiciones de las contiendas como las áreas de interés de las misiones de observación electoral.
En los años 90 las principales preocupaciones estaban centradas en eventuales prácticas fraudulentas de manipulación de los votos realizadas durante la Jornada Electoral, ahora las misiones de observación electoral no solo se han profesionalizado y han diseñado metodologías y métricas que permiten comparar las prácticas democráticas de un país con otro, y en este punto hay que decirlo, nuestro país ha tenido las más altas calificaciones en términos de sus sistema electoral de manera comparativa, y no soy yo quien lo dice, ahí están los informes de las misiones de observación electoral internacionales, sino que se han extendido para analizar aspectos como el financiamiento, la fiscalización y la comunicación política.
Se trata, para decirlo en una nuez, que ahora las misiones de observación electoral tienen un enfoque integral para analizar los diferentes aspectos del contexto que influyen en la forma en que transcurren los procesos electorales, bajo la lógica de la integridad electoral.
Es precisamente por eso, que la imparcialidad y el profesionalismo de quienes llevan a cabo las tareas de observación resulta crucial para que su presencia en nuestras elecciones contribuya efectivamente a la credibilidad y certeza de las mismas.
Este enfoque integral de la observación electoral es el que explica el intenso trabajo que, de cara a las elecciones el próximo 1º de julio, desde 2017 se ha venido realizando con los diferentes organismos internacionales y multilaterales especializados en la observación internacional de las elecciones.
De ahí que por mencionar solamente algunos datos me permito compartir con ustedes que las misiones de observación electoral de IDEA Internacional, de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (UNIORE), ya han iniciado sus trabajos, y han estado en diversos lugares aquí en nuestro país y concluirán sus análisis después de la Jornada Electoral.
La Organización de Estados Americanos, si bien no realizará una observación con tanta anticipación, como en casos anteriores, sí desplegará una misión de gran cobertura la próxima semana.
Ya recibimos la visita del señor Kofi Annan, premio Nobel de la Paz, y de la ex Presidenta Laura Chinchilla en nombre la Fundación Kofi Annan, quienes después de diversas reuniones de trabajo reconocieron los aspectos técnicos y logísticos, con lo que el Instituto Nacional Electoral está llevando a cabo el actual Proceso Electoral.
Esta misma semana, como lo acabo de mencionar, recibimos una segunda etapa de la visita de la misión de IFES, una misión, en este caso, de observación de seguimiento de tipo político, la cual externó también su reconocimiento al trabajo serio e imparcial que está realizándose en la organización de estos comicios.
A lo largo de dos décadas, México ha contribuido al desarrollo de los sistemas democráticos de diversos países en prácticamente todas las regiones del mundo. Recientemente, hace apenas unas semanas, el Instituto Nacional Electoral, bajo el amparo de PNUD, de la región árabe de África y de la Comisión de Venecia, ha participado en misiones de asistencia técnica en las elecciones de Túnez, recientemente celebradas.
Desde mi perspectiva, las contribuciones de nuestro país al desarrollo de la democracia en el mundo derivan esencialmente de dos aspectos. El primero del cuidado técnico que se ha puesto por quienes han integrado esta institución por más de 20 años; y el segundo de la retroalimentación que durante este arco temporal hemos recibido como país de las organizaciones de la sociedad y de los organismos multilaterales regionales, así como de las misiones de observación electoral que han tenido el interés de conocer los mecanismos mediante los cuales, en México, se realizan las elecciones.
Probablemente el desarrollo alcanzado en nuestros procedimientos electorales y la forma en que hemos estandarizado las condiciones de las contiendas, son los factores que llevaron en esta ocasión a la Unión Europea a declinar el pasado 27 de febrero de 2018 la invitación que el 25 de abril del año pasado le extendió este Instituto a ese organismo, para que designaran a una misión de observación electoral que atestiguara la organización y las condiciones de la competencia electoral de la elección más grande de la historia democrática de México.
Como ha sido compartido en esta mesa, la Unión Europea declinó conformar una misión de observación electoral, porque en virtud del grado “democraticidad” alcanzado en nuestro país, no forma parte de los ámbitos de atención de dicha comunidad.
El día de hoy, a las 24:00 horas vencerá el plazo para el registro de los observadores extranjeros, hasta la noche de ayer y me permito actualizar con esto, los datos contenidos en el informe que fue elaborado cuando fue circulado para esta sesión, hasta la noche de ayer se habían aprobado los registros de 711 visitantes extranjeros provenientes de 55 países, hay todavía que esperar, insisto, los que a partir, los que los días siguientes a partir de los eventuales registros que se reciban en las próximas horas hasta el día de hoy, como decía, cuando se cierra el plazo habrán de presentarse.
Quiero poner sobre la mesa un dato interesante, de estos 711 visitantes extranjeros que provienen de 55 países, las misiones o las acreditaciones solicitadas de visitantes desde Estados Unidos que son 94, componen el 13.12 por ciento.
En 1994, cuando por primera vez se recibieron misiones de observación electoral, de Estados Unidos provino el 68.6 por ciento de las acreditaciones, de las solicitudes, esto quiere decir que la Observación Internacional se está diversificando de una manera muy importante.
Un dato adicional, con las cifras que hoy se están presentando, esta elección tendrá una Observación Electoral Internacional más grande que las elecciones presidenciales 2012 y que las elecciones del 2006.
Confiamos que se logrará con ello nuestro objetivo de que la elección en curso sea la más vigilada, la más explicada, la más documentada, y por ello, también la más libre de todas las elecciones que ha organizad nuestro país para disputar los poderes públicos.
Está a su consideración el informe.
Versión estenográfica de la intervención del Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova, en el punto cinco de la Sesión Ordinaria 20 de junio de 2018, respecto al octavo informe que presenta la Coordinación de Asuntos Internacionales sobre las actividades relativas a la atención de los visitantes Extranjeros en el Proceso Electoral Federal y Concurrente 2017-2018
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