La política en las sociedades masivas, contemporáneas es impensable sin los medios de comunicación, la circulación de noticias, la difusión de imágenes y hechos son insumos fundamentales de la conversación pública y elementos detonadores de los propios humores públicos, por ello, no hay un asunto relevante para una sociedad que no llegue y se difunda a través de los grandes medios, incluso hoy, con el desarrollo de las redes sociales, la radio y la televisión continúan siendo vehículos indispensables para procesar lo que llamamos la cosa pública, y pocas cosas tan públicas y de tanto interés como las campañas electorales, cómo se despliegan las campañas pero sobre todo cómo se miran y llegan a la ciudadanía depende del trabajo de los medios de comunicación, el trabajo periodístico es inseparable de las libertades básicas que se reproducen en el ecosistema democrático.
El monitoreo de noticieros que por ley realiza el INE tiene el propósito justamente de hacer públicos los resultados de la cobertura que desde la libertad periodística y editorial se hace en la radio y la televisión de nuestro país, el propio desarrollo de la pluralidad periodística y de la diversificación de las fuentes de información es parte de nuestra democratización en sentido extenso, más allá del capítulo electoral, prensa libre, prensa plural, prensa diversa es consustancial a la vida democrática
No digo nada nuevo, aunque quizá sí olvidado si afirmo que el monitoreo surgió como una medida legal para crear un contexto de exigencia al desempeño de los medios de comunicación después de muchos años en los que los medios y poder político fundían un mismo discurso, una misma visión de las cosas, basta recordar aquella cobertura del más del 90 por ciento del tiempo de los principales noticieros de la televisión al partido gobernante hace apenas 30 años en 1988.
Pero eso venturosamente es historia, los medios ni se deben al poder ni el poder habla por los medios, sería imposible, pues el poder se ha diversificado, repartido, pluralizado, y los medios son más independientes, más plurales, más libres y también más críticos y más exigentes hacia todos los actores políticos.
Más que como un instrumento de control de los medios, pues nunca ha sido eso, el monitoreo es una herramienta útil y objetiva para constatar un hecho palpable e inocultable de nuestra vida política, la cobertura que hacen los noticieros de radio y televisión de las campañas es la cobertura propia de una democracia.
Este informe del monitoreo que realiza la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional, nos muestra que el hallazgo más importante es el de una cobertura equitativa e imparcial, nuestros medios no solo se han acostumbrado a trabajar como laboran los medios de una democracia, sino que con ello alimentan la propia reproducción democrática.
Como podrán ver, las campañas electorales están donde deben estar, en los medios de comunicación, desde este punto de vista concesionarios, editores y periodistas cumplen con la misión social de los medios, dan cuenta de los asuntos públicos de relevancia, y en esa medida contribuyen a que se pueda cumplir el derecho de acceso a la información por parte de la ciudadanía.
El monitoreo a 493 noticieros y a 10 programas de espectáculos o de revista ha identificado que se habla de las campañas en 208 mil 782 piezas informativas, de las que 161 mil 810 corresponden a radio y 46 mil 972 a televisión. Y se ha otorgado a las campañas un tiempo de siete mil 883 horas, 30 minutos y 50 segundos, es decir, tan solo en los espacios que monitoreamos se ha hablado de las campañas y los candidatos por un tiempo que equivale a 328 días y medio.
Las campañas entonces están en las sondas de la radio y en las pantallas de la televisión, pero además están ahí de forma equilibrada, la diferencia entre el tiempo que reciben los candidatos de una coalición y otra no alcanza los cinco puntos porcentuales. Y la distancia entre la coalición con mayor presencia respecto a las candidaturas independientes es de menos de seis por ciento.
Así, los candidatos que recibieron mayor cobertura en medios fueron los de la coalición “Juntos Haremos Historia” con 21.7 por ciento del tiempo.
Enseguida se encuentran los candidatos de la coalición “Por México al Frente” con 18.4 por ciento del tiempo, en tercer lugar, los candidatos de la coalición “Todos por México” con 17.2 por ciento, y hay que destacar que los candidatos independientes, en conjunto acumulan 15.8 por ciento del tiempo de transmisión.
En lo que hace a los candidatos a la Presidencia de la República, se han dedicado 110 mil 240 menciones, equivalentes a tres mil 741 horas, cuatro minutos y 18 segundos.
Como se sabe, a partir del 18 de mayo Margarita Zavala dejó de ser sujeto del monitoreo debido a la renuncia de su candidatura.
De los que siguen en contienda, el candidato con mayor cobertura es Andrés Manuel López Obrador con 31.6 por ciento del tiempo, le sigue José Antonio Meade con 28 por ciento del tiempo, en tercer lugar, Ricardo Anaya con 25.8 por ciento del tiempo de transmisión, y finalmente Jaime Rodríguez que cuenta con el 14.6 por ciento del tiempo de cobertura, lo anterior a escala nacional.
Pero las cosas no son tan distintas si enfocamos el análisis a los noticieros en las entidades federativas.
De esta forma, se le ha brindado mayor cobertura a Andrés Manuel López Obrador en 21 entidades, y a José Antonio Meade en las otras 11, sin embargo, en seis entidades Meade ocupa el tercer lugar detrás de Ricardo Anaya. Amplia cobertura y con equidad, pero también hay que destacar un tercer rasgo central, la neutralidad de la cobertura.
Para el cálculo del número de valoraciones de las piezas informativas se restan las que corresponden a géneros de opinión, análisis y debate, y nos queda que en el 90.4 por ciento de las notas informativas no hubo valoración de los reporteros, así que solo el 9.6, una de cada 10 notas tuvo alguna valoración, eso sí, casi siempre negativa a lo que señala un periodismo en general más crítico que complaciente con los actores políticos.
He hablado de la amplia atención de los medios a las campañas, de la equidad y la neutralidad, pero también es necesario señalar que hay poco periodismo de investigación, por ejemplo, casi no hay reportajes, estos han ocupado solo el 0.3 por ciento del tiempo, es decir, por cada hora de cobertura, en promedio solo 11 segundos son de reportaje.
Los medios son plurales, pero reproducen dichos de los candidatos, voces e imágenes, más escasea la investigación de trayectorias, de plataformas, e incluso de acusaciones y escándalos sobre una u otra cobertura.
Hemos construido una democracia y un periodismo de alta pluralidad, nos falta tener una democracia de mayor calidad y eso también se refiere a los medios, el reto es pasar de la pluralidad periodística al periodismo de mayor calidad.
Versión estenográfica de la intervención del Consejero Electoral Ciro Murayama Rendón, en el punto 18 de la Sesión Ordinaria, relativo al informe mensual sobre Monitoreo de Noticieros y la difusión de sus Resultados durante el Periodo de Campañas
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