La cobertura informativa de las campañas presidenciales registra un entorno de pluralidad que no ha dejado a nadie fuera de la agenda mediática como ocurría a finales de los años 80, cuando el tiempo destinado en medios masivos para informar sobre actividades de la oposición era mínimo en comparación al destinado al partido en el gobierno. Ahora, la realidad política ha evolucionado e incluso se da más espacio en radio y televisión a opositores, hay mayor equilibrio noticioso.
Sigue habiendo quien recibe más 
o menos exposición, pero no con distancias abismales o silencio absoluto sobre lo que proponen o hacen los distintos actores en competencia. En conjunto podemos afirmar que existe, hasta ahora, una razonable atención de noticiarios para las cinco candidaturas participantes dentro de las principales emisiones periodísticas del país en radio y la televisión y aunque persisten casos particulares donde se opta por sólo cubrir una voz, ésos no son el común denominador o algo presente en los programas con más audiencia. Lejos han quedado las asimetrías irremontables, los sesgos pronunciados en cuanto al acceso a medios de comunicación.
El monitoreo de espacios que difunden noticias a cargo de la UNAM es un ejercicio que de manera coordinada con el INE sistematiza comportamientos informativos de los principales noticiarios durante estas elecciones, toma fotografía minuto a minuto de cuánto tiempo destinan a uno u otro, quién concentra más o menos adjetivos negativos o positivos, a quién entrevistan más, de quién difunden más notas, entre otros muchos elementos disponibles para cualquier persona interesada.
El universo de monitoreo incluye emisiones de todo el país que suman 493 noticiarios y 10 programas de espectáculos o revistas con mayor rating. Esa revisión que arroja una enorme base de datos no implica en ningún momento vulnerar o coartar la libertad editorial de cada medio para destinar más o menos tiempo a un tema o partido, pero sí le permite a la población saber cómo es la cobertura en cada programa, de quién hablan más, de quién menos.
A partir de los resultados obtenidos entre el 30 de marzo y el 29 de abril pasado, sabemos que durante el primer tercio de la campaña los programas monitoreados ocuparon 1,315 horas 55 minutos 19 segundos para hablar de las candidaturas presidenciales y que fue Andrés Manuel López Obrador quien más tiempo tuvo (327 horas), seguido de José Antonio Meade (306 horas), Ricardo Anaya (290 horas), Margarita Zavala (219 horas) y Jaime Rodríguez (173 horas).
El reporte nos da un buen número de datos adicionales, por ejemplo, encontramos que el tipo de género con el que se da cobertura tiene variaciones. Si aislamos cuánto tiempo se usó únicamente para entrevistas tenemos que Meade alcanzó 72 minutos en ese género periodístico, López Obrador 52 minutos, Anaya 56 minutos, Zavala 32 minutos y Rodríguez únicamente 24 minutos.
Aunque es López Obrador quien tiene más tiempo de cobertura sumando todos los géneros (nota, reportaje, entrevista, opiniones), también concentra el mayor número de valoraciones negativas (1,567), seguido por Rodríguez Calderón (908), Meade (697), Anaya Cortés (603) y Zavala (573).
En lo que tiene que ver con programas de espectáculos y revistas, el tiempo total que dedicaron fue de 20 horas a todas las candidaturas y la mayor parte de ese tiempo se concentró en las independientes.
Tendremos cortes mensuales de ese registro informativo, aunque las cifras perfilan ya una deliberación pública con espacios abiertos a la pluralidad que vivimos y opciones para informarse de todas las candidaturas que buscan respaldo en las urnas. Es posible conocer en los medios la oferta completa a favor de un voto razonado.
