De no ser el caso, de ser el caso al no haber otras intervenciones permítanme intervenir a mí.
El día de hoy, 19.7 millones de ciudadanas y ciudadanos de los estados de Coahuila, Nayarit, México y Veracruz están pudiendo ejercer libremente el derecho al sufragio para elegir un total de 525 cargos en disputa, incluyendo las elecciones extraordinarias en el municipio de Santa María Xadani, Oaxaca y de las siete presidencias de comunidad en el estado de Tlaxcala.
El Instituto Nacional Electoral, a lo largo de este proceso electoral ha cumplido con las atribuciones que le confiere el nuevo diseño del sistema electoral mexicano como órgano rector del mismo.
En tal sentido, el INE ha estado a cargo, como ustedes saben, de la integración de las casillas en los comicios locales en curso, el 100% de las casillas, como hemos reportado, tienen a ciudadanos, han tenido a ciudadanos debidamente insaculados y capacitados, al menos, por lo que hace a los cuatro funcionarios que dispone la ley, con lo que la seguridad en la recepción y escrutinio de los votos de las ciudadanas y ciudadanos está garantizado.
Estamos también frente a una de las elecciones más vigiladas de la historia, el segundo reporte del SIJE, que evidentemente reportará de inmediato, que está en estos momentos ya a disposición, que no reportará necesariamente el 100 por ciento de las casillas, pero es que es un buen avance en la constatación de la cifra de representantes que efectivamente están en las casillas, insisto, nos dará la cifra de presencia de representantes ante las más de 34 mil casillas que se han venido instalado a lo largo de la Jornada.
Pero según el sistema de registro respectivo, más de 219 mil ciudadanas y ciudadanos hoy están fungiendo como vigilantes de los intereses de los partidos políticos y auditando el desarrollo adecuado de los comicios.
Subrayo un dato relevante que se complementa con los que ya mis colegas han puesto sobre la mesa, sólo en siete, según el sistema de registro de representantes, de las 34 mil 75 casillas en Veracruz, Coahuila, Estado de México y Nayarit hay menos de tres representantes de tres partidos políticos, solamente siete de más de 34 mil casillas tienen presencia, al menos en lo que el registro supone, de representantes de menos de tres partidos políticos.
Quiero reiterar lo que ya dijimos en el comunicado conjunto del jueves pasado las y los consejeros electorales, esta autoridad nacional ha establecido, al igual que en otros procesos electorales, una cercana coordinación institucional con las instancias de seguridad federales, para garantizar que a lo largo del día de hoy las ciudadanas y ciudadanos puedan acudir a las urnas libremente y con confianza a ejercer sus derechos políticos y contribuir a decidir el futuro de la vida pública en sus entidades.
En síntesis, está puesta la mesa, como lo hemos señalado, para que la democracia se recree en paz y en absoluta libertad.
Permítanme reiterar el llamado al voto que hemos venido haciendo en los últimos días, las elecciones son el espacio natural para que las y los ciudadanos ejerzan sus derechos políticos con libertad y que aprovechen la igualdad decisoria que otorga la democracia al voto emitido en las urnas.
Nunca como el día de las elecciones las y los ciudadanos somos completamente iguales para decidir colectivamente nuestro futuro político en democracia.
El voto es la herramienta más efectiva de la ciudadanía para incidir en la distribución del poder político, como lo ha demostrado con creces la historia reciente del país.
La pluralidad que hoy vivimos y que estamos presenciando en esta mesa, es el ejemplo más claro de cómo se ha transformado al país por la vía electoral.
El hecho de que a estas alturas, a estas horas, nadie pueda anticipar con certeza el resultado de la voluntad ciudadana expresada en las urnas, es la expresión más palpable de cómo ha cambiado nuestro país.
La mejor prueba de dicho cambio es que la ruta electoral está abierta, es franca y eficaz, y por lo tanto, el hecho de que entre nosotros la posibilidad, insisto, la posibilidad de la alternancia a través del voto, de la que todos los partidos políticos aquí presentes en algún momento se han beneficiado, es que hoy es parte de la natural vida política del país.
Tenemos una ciudadanía cada vez más consciente y empoderada, que sabe que su voto no sólo es contado, sino que cuenta, y eso es algo que a veces se menosprecia y se desdeña, pero constituye el ABC de la democracia, la razón de ser de la misma y que hace del mismo, del voto, la herramienta más importante, no sólo para definir quiénes ocuparán los espacios de representación política, sino también, para premiar y castigar la actuación de los partidos y los resultados que los gobiernos emanados de las urnas arrojan.
De ahí que el sufragio sea el motor inicial de una sociedad democrática, y también, el que Norberto Bobbio definía como el Derecho-Poder más relevante, no el único pero sí el más relevante que las y los ciudadanos tienen en democracia.
Por lo anterior, quiero insistir en el llamado para que las y los ciudadanos acudan a votar, que voten de manera informada y con libertad y que denuncien cualquier intento de presión para influir en su voto.
Confío en que en esta Jornada, la igualdad política que la Constitución y las leyes han conferido a mujeres y hombres se traducirá en que cada voto valga lo mismo y que cada elector pueda incidir, de la misma manera, en la distribución del poder político en el país.
Hoy corresponde a las ciudadanas y los ciudadanos asumir su responsabilidad con la democracia y decidir a quiénes le conferirán el poder político y a los partidos, coaliciones y candidatos, por su parte, les corresponde respetar la voluntad de esa ciudadanía depositada en las urnas.
Es por ello que la democracia ha cambiado el rostro político en los últimos 25 años, con inclusión e igualdad.
La democracia tiene la virtud de ofrecer mecanismos institucionales para la confrontación política y plazos para dirimir las controversias y las diferencias entre proyectos y visiones políticas, para decidir el futuro político, una etapa de gobierno dividido, mayorías calificadas o eventualmente blindadas han quedado atrás.
Reforma tras reforma, los mexicanos transformamos las reglas del juego democrático y creamos un sistema de partidos fuerte y competitivo; cambiaron los actores y las estrategias de campaña, cambió el contexto político y las coyunturas para el desarrollo de las elecciones.
A lo largo de estos años, la ciudadanía, debo decirlo, ha estado a la altura de las exigencias que le impone la democracia, así lo demuestra el hecho de que el poder se ha decidido pacíficamente a través de las elecciones a nivel federal y local desde hace dos décadas al menos.
Las cifras de participación de las y los ciudadanos en la organización de las elecciones de los cuatro estados en los hoy hay votaciones, reflejan su compromiso con la democracia y es el modo en el que reiteran su aceptación y adhesión a las elecciones como vía civilizatoria para definir y distribuir el poder político en nuestro país.
Hoy es un día en el que a los partidos y a los candidatos les toca demostrar a su vez que están a la altura de la ciudadanía y del rol que les toca jugar en democracia, demostrando su respeto a la voluntad expresada en las urnas.
Como cada elección, todos en esta Jornada, todos los actores de la democracia estamos a prueba: autoridades electorales, partidos políticos, candidatos, gobiernos, medios de comunicación y ciudadanos.
Demostremos cada uno de nosotros, en nuestros respectivos ámbitos de responsabilidad, que estamos a la altura de la puesta histórica que tantos esfuerzos ha requerido y que tanto nos ha costado, la democratización del país.
Versión Estenográfica, el punto único de la sesión Extraordinaria, Informe sobre el reporte emitido por el Sistema de Información de la Jornada Electoral (SIJE) en las entidades con Procesos Electorales Locales en curso
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