Intervención de Benito Nacif en la Conferencia Magistral Estacional Primavera 2018: “¿Puede sobrevivir nuestra democracia? Liderazgo y agencia política en América Latina”

Escrito por: INE
Tema: Consejeras y Consejeros Electorales

Muchas gracias.

Muy buenos días a todos.

Pues me da un enorme gusto presentarles a ustedes, a Aníbal Pérez-Liñán quien está hoy a cargo de la Conferencia: “¿Puede sobrevivir nuestra Democracia? Liderazgos y Agencia Política en América Latina.

Yo, como todos ustedes espero ansiosamente la respuesta.

Aníbal es catedrático en Ciencia Política en la Universidad de Pittsburgh, donde según me contaba hace un momento y no lo será por mucho tiempo.

Y es editor general de, es una de las revistas académicas más importantes el Latin American Research Review en temas relacionados con la región con América Latina, ahí se publican principalmente investigaciones originales sobre América Latina y el Caribe, y la verdad es que es un lujo tenerte aquí Aníbal, quien entre 2015 y 2017 fue investigador distinguido afiliado al Instituto Kellogg de Estudios Internacionales de la Universidad de Notre Dame en Indiana.

Tiene una carrera muy prolífica, se ha enfocado a estudiar procesos de democratización, instituciones políticas y gobernabilidad, procesos electorales además de contar con numerosos artículos en revistas especializadas y capítulos en obras colectivas.

Ha escrito tres libros sobre los temas de que nos va a hablar el día de hoy, elites, instituciones y el público, una nueva mirada a la democracia bolivariana con Barry Ames y Mitchel Seligson; Juicio Político al Presidente y una nueva inestabilidad política en América Latina, en 2009; Democracies and dictatorships in latin america emergence survival and fall con Scott Mainwaring, que en el 2014 recibió el Premio junto con otro libro de la Asociación de Estudios Latinoamericanos como el mejor libro sobre política comparada de ese año.

Pues sin más, Aníbal, bienvenido. Esperamos con mucho interés la respuesta a esa pregunta tan provocadora que has puesto de título.

(Segunda intervención)

Muchas gracias Aníbal.

Tenemos todavía tiempo para algunas preguntas por parte del público, y creo que hay muchas cosas muy interesantes, a mí me cuesta trabajo como por dónde empezar antes de dar la palabra a quienes deseen formular preguntas.

Pues yo empezaría como distinguiendo las buenas noticias de las malas noticias, ¿no? me quedo con la última, que la probabilidad de supervivencia de las democracias es positiva, pero depende de diferentes factores, ¿no?

Y la buena noticia es que estamos en el periodo de estabilidad de las democracias presidencialistas en América Latina más largo en su historia, que arrancó en la década de los 80´s y que continúa hoy en día. México en su momento se sumó a esta ola de transiciones a la democracia, fuimos de los países de América Latina que lo hicieron, quizás en la segunda parte de la década de los 90´s.

Luego, la mala noticia es que el riesgo de quiebre o el riesgo de muerte de la democracia sigue ahí, pero las razones o la forma en que las democracias colapsan o mueren han venido cambiando, no esperemos que ocurra como en la década de los 70´s, que los políticos vayan a tocar, o los empresarios vayan a tocar la puerta a los cuarteles y pedir una intervención mediante un golpe de Estado, un golpe militar, como ocurrió en Sudamérica, principalmente.

Y lo que nos cuenta ahora Aníbal es el riesgo de quiebre de la democracia se está manifestando de manera diferente. Y ya no está ocurriendo mediante esta muerte violenta y rápida como ocurría en la década de los 70´s o antes, sino, es más bien una muerte progresiva, sí. E incluso por mecanismos que pueden, aparentemente, ser democráticos, porque lo que está en riesgo es la democracia liberal, que requiere de la existencia de instituciones, de mecanismo de frenos y contrapesos, de dispersión del poder al interior del sistema.

Y lo que caracteriza el quiebre de las democracias durante el siglo XXI ha sido precisamente la erosión o la supresión de estos mecanismos de rendición de cuentas horizontales, la supresión de cortes, el llamado a nuevas constituciones, la reconcentración del poder en la figura puede ser del mismo titular del Ejecutivo; y esas son las cosas de las que hay que estar pendientes, de los propios elementos dentro de las democracias latinoamericanas que pueden estar conduciendo a la supresión de mecanismo institucionales, de frenos y contrapesos que promueven la concentración del poder.

Pero mi primera pregunta, Aníbal sería, ¿éstos son los síntomas, más bien, de cómo las causas que llevan a la destrucción o al colapso de las democracias pueden estar operando?, pero mi primera pregunta sería ¿si estas causas no siguen estando ahí donde los libros de texto de ciencia política de los 70 nos decían, la economía principalmente?; ¿si esto no es más que el reflejo, otra vez, de intentos, de respuestas políticas a los problemas económicos propios que se vivieron en la década de los 70, tasas de crecimiento muy bajas, inflación muy alta y no sé si en el modelo que ustedes construyeron el tema de la política, perdón, de la economía y el impacto de la economía sobre la tensión que ejerce para promover soluciones radicales a través de la política sea, digamos, el hallazgo que teníamos desde la década de los 70?

La otra cosa que me llamó mucho la atención fue el redescubrimiento del papel de las élites y cómo la radicalización de las élites, el compromiso de las élites con los principios democráticos en la investigación que ustedes han realizado se convierte en una variable muy importante.

Y no estoy seguro si esto es una buena o es una mala noticia, porque las élites suelen ser mucho más radicales o más radicales que los votantes, que el electorado en general, y suelen ser mucho más volátiles al momento de adoptar preferencias en torno a políticas públicas, preferencias ideológicas.

Y mi pregunta sería si ¿el electorado que puede obligar a las élites a buscar el centro de la política, a través de los típicos democráticos? Lula, por ejemplo, inició como un político muy radical y conforme se presentó a elecciones y obtuvo resultados se vio obligado a moverse hacia el centro constantemente y a buscar en el centro. Y mi pregunta sería si ¿esas tendencias hacia el centro, centrípetas tienen algún efecto en la estabilidad de la democracia, en la moderación de las élites y si tenemos una evidencia que ése es un mecanismo que refuerza la estabilidad de las democracias el hecho de que tienes que ir y buscar al votante mediano y tratar de incluirlo dentro de tu coalición electoral?

Finalmente, el tema del radicalismo del gobierno. Si son las, en los 90 decíamos en la Ciencia Política que era la incapacidad de los gobiernos en los sistemas presidenciales de construir coaliciones para entregar o para producir cambios de políticas públicas radicales, integrales, lo que frustraba al electorado, y hoy lo que parece es habilitar a los gobiernos para poder conseguir eso, es lo que pone en riesgo a las democracias, y si no es precisamente el que los gobiernos les desates las manos, por así decirlo, para poder cambiar las cosas rápidamente lo que puede amenazar la estabilidad de un sistema democrático.

Y yo me quedaría ahí, tenemos un montón de preguntas que nos han hecho llegar por escrito, así es que Aníbal.

Versión estenográfica de la Participación Del Consejero Electoral Benito Nacif, en la Conferencia Magistral Estacional Primavera 2018: “¿Puede sobrevivir nuestra democracia? Liderazgo y agencia política en América Latina”, impartida por el Doctor Aníbal Pérez-Liñán, realizada en el auditorio de la institución

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